Capítulo 11

17 0 0
                                    

POV Lyden

Desde el momento en el que Cory me sonrió de esa manera supe que iba a hacer algo, pero nunca me imaginé que iba a jugar así conmigo.

Chica lista.

No aguanté más y la arrastré lejos de ahí. Conmigo.

Ante su mirada confusa le dedico una de mis sonrisas de lado. Sé que le encanta. Como a todas. La guío hasta que llegamos al estacionamiento de la universidad. Estoy tan caliente que se lo haría en mi cuarto de la residencia, pero sé que mi compañero de habitación es tan oportuno que es capaz de llegar mientras lo estamos haciendo. Ya me ha pasado. Pero esta vez es con Cory. No quiero que nadie más que yo la vea desnuda. Sólo de pensarlo se me ponen los vellos de punta. La llevo hasta mi auto y le abro la puerta del copiloto. Se sienta y rodeo el auto para entrar. Me pongo en marcha hasta mi apartamento.

¿Por qué vivo en la residencia si tengo un apartamento? Porque el departamento es para hacer fiestas, acostarme con mujeres en los sofás de la sala y porque es uno de los "regalos" de mi padre. Soy muy orgulloso como para aceptar lo que él me obsequia.

En todo el camino hacia mi apartamento Cory se la pasa callada mirando por la ventana del auto. Realmente no sé qué mierda hizo esta chica para que la tenga metida en mis pensamientos casi todo el maldito día.

Cuando llegamos a mi apartamento lo primero que hago es agarrala de los hombros y acercarla a mí para poder besarla como no pude hacer en público. Cuando estoy a punto de juntar nuestros labios ella se aleja bruscamente de mí.

¿Ahora qué hice mal?- le pregunto, un poco desconcertado.

-Es sólo que...- se calla de repente. ¿Por qué se calla?

-Es sólo que...- la incito a que termine lo que estaba diciendo.

-Lyden, lo que sucedió la otra vez no se va a repetir hoy ni nunca. Fue un error. Debes saber que ese día estaba ebria y no sabía lo que hacía. Lo lamento si lo que pasó te hizo creer que puedo estar a tu entera disposición para cuando tengas ganas de sexo.- Lo dice como si nada, como si lo que pasó hace minutos no fuera nada. Como si no supiera lo que su cuerpo me provoca.

No puedo hacer otra cosa mas que darle la espalda e ir a sentarme en el sofá. Coraline tiene algo que me llama la atención. No sólo es su cuerpo. Es... toda ella.

Si ella no quiere hacer esto lo acepto. Pero que diga que nunca más va a pasar es algo que ni ella ni yo sabemos a ciencia cierta. Tal vez para ella soy un asno que sólo piensa en sexo, y sí, soy un asno que piensa en sexo, pero no sólo en eso. Sé que ella se puede llegar a meter muy profundo en mi ser. Y si eso llegara a pasar, realmente no sé qué mierda haría o cómo reaccionaría. No estoy preparado para una relación. Ni ahora ni en un futuro.
Joder, ¿por qué estoy pensando en si estoy preparado en tener una relación? No debería ni pensar en eso.

Cory se sienta a mi lado y me saca del transe en el que estaba.

-Ahora que tienes claro que no voy a tener sexo contigo, ¿quieres que me vaya?- pregunta un poco tímida.

La volteo a ver y le dedico una de mis sonrisas que tengo reservadas para mí.

-¿Quieres irte?

Sé que ha quedado en shock. Hasta yo me he quedado en shock. ¿Qué mierdas estoy diciendo? Trent me está pegando su lado cursi de mierda, joder. Tengo que reconocer que sonó un poco patético. Sigue callada pero está viéndome fijamente, como si estuviera analizándome. Alzo mis cejas para que sepa que estoy esperando una respuesta.

-Eh... Sí, supongo- dice y se sonroja. Debo admitir que se ve tierna, aunque no lo parecía. Es una persona de día y otra de noche. Multifacética.

-Bien- me limito a contestarle.

Se queda sentada a un lado mío. Ahora que aceptó no sé qué hacer. Nunca había traído a alguien aquí mas que para tener sexo. ¿Qué hacen para perder el tiempo? ¿Ver películas? ¿Jugar al Jenga? ¿Turista? No lo malditamente sé.

No debí decirle eso. Ahora no sé qué hacer. Además de que sonó cursi y patético. No quiero hacerla creer que quiero algo más con ella. Sólo quiero sexo, porque, tengo que admitirlo, Coraline tiene un cuerpo bien formado. Tiene unos senos que muchas desearían tener y no son operados, cien por ciento comprobado. Y un trasero que con sólo verlo se me pone dura. Ni siquiera tengo que verlo, sólo con tenerlo en mi mente. Recordar cómo lució sus atributos esa noche no sirve para que mi amigo deje de estar feliz. Tengo que pensar en otras cosas. Piensa en otra cosa. Piensa en otra cosa.

-¿Qué significan?- me pregunta de repente.

¿Qué? Me le quedo mirando dándole a entender que no tengo ni puta idea de lo que habla.

-Tus tatuajes, ¿qué significan?- aclara.

-Nada en particular, es un diseño que hice cuando estaba aburrido.- Explico, aunque no sea totalmente cierto.

-Ok- dice. Se queda viendo todo la sala, especialmente los cuadros que tengo colgados como decoración. Son tres cuadros colgados casi juntos que muestran a tres mujeres diferentes en diversas posiciones sexuales. -Interesantes cuadros- ya sé.

-Ya sé.

Espero que pase rápido el puto día, porque no tengo ni puta idea de qué mierda hacer.

N/A

Holi. Muuuuuuucho tiempo sin actualizar, pero bueh. Ya estoy libre otra vez, después de muchísimo tiempo y voy a estar actualizando constantemente gg.

Esto es todo, bai.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Dec 20, 2016 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

QuédateDonde viven las historias. Descúbrelo ahora