11-Mudanza

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Cocinamos mientras escuchamos a mi madre hablar con añoranza sobre mi cuando tenía no más de cinco años. Damon se veía completamente concentrado en lo que mi madre decía. Sonreía cada vez que esta le contaba las trastadas que hacia.
-y bueno entonces ¿estáis saliendo?-preguntó mi madre a Damon mientras este bebía su café.
-si. Y realmente me siento el hombre más afortunado del mundo.-dijo Damon dirigiéndome una mirada cargada de amor.
Me sonrojé al instante por ese dato que acababa de confirmar.
-no sabes lo que me alegra escuchar eso hijo.-respondió mi madre con una sonrisa tierna.
-no sabes lo que me alegra a mi.-dije yo con total confianza con estas cuatro personas a las que tanto quiero.
-¿y cuándo será la boda?-pregunta en broma mi madre haciéndonos reir.
-espero que pronto.-contesto Damon sorprendiendo a dos personas de la sala.
Yo y el ya sabíamos del tema. Cuando yo estuviera lista pasaría lo que Damon tanto quería. Y la verdad no es un dato que me moleste.
-vaya hijo. Si que te has enamorado.-dijo mi madre riendo y dando un mordisco a su tostada.
-más de lo que se pueda imaginar señora Helen.-me cogió de la mano encima de la mesa y la apretó suavemente haciendo que se me encogiera el corazón de cariño.
-hijo, puedes llamarme de todo menos señora Helen.-dijo mi madre en broma.-no soy tan vieja ¿o si?-
-para nada.-contesto rápidamente Damon.-es la madre más guapa y joven que he conocido.-
A este se le da muy bien hacer la pelota.
Me reí y recosté la cabeza en el hombro de Damon.
-mama. Quería avisarte de que iré a vivir con Damon.-dije esperando una respuesta de su parte.
-¿vivir con Damon?-pregunto confusa.-¿no es muy pronto?-dijo esta con el ceño fruncido.
-no. Es el tiempo suficiente para nosotros.-conteste sonrojada.
-¿y que? ¿los nietos cuando Alice?-contesto de broma mi madre haciéndonos sonrojar a Damon y a mi.
Vaya. Nunca e visto a Damon sonrojado.
-mama...-dije entre dientes mirando hacia abajo. La risa de Damon rebotó en nuestros oídos.
-cuando dios quiera tia Helen.-intervino Megan.
-exactamente cuando Alice quiera.-dijo Damon mirándome.
-haber haber haber....-me llevé las manos al tabique de la nariz y baje la cabeza sonrojada.-vamos a cambiar de tema.-suplique.
-bien bien.-dijo mi madre rendida.-¿que tal el instituto?-preguntó.
-muy bien tia Helen.-contesto Megan.-ayer nos pusieron un trabajo larguísimo.-se quejó.
-¿estas haciendo ese trabajo con Alice?-pregunto mi madre.
-no exactamente.-contesto Megan rascándose la nuca y mirándome.
-mama. Yo ya no voy al instituto. Yo estudio por internet.-le confirme.
-¿y eso por que?-preguntó mi madre extrañada.
-te lo contare mas adelante.-dije haciendo un gesto quitándole importancia para que no se preocupase.
Realmente no sabia que excusa ponerle. No le iba a decir ahora que soy una mujer lobo.
Pero tampoco se me ocurría alguna excusa lo suficientemente creible para justificar ese dato.
-bien cariño. No te pondre objeciones. Eres mayor y auto-suficiente.-contesto.
-gracias mama.-dije agradecida por los cumplidos.
-pero sigues siendo mi bebe.-contesto agarrándome de los mofletes por encima de la mesa.
-y tu mi mama osa.-conteste haciéndola reir.
-mama osa tiene sueño. Cariño me voy a dormir. Sentiros como en casa.-contesto mi madre despidiéndose de todos.
-te amo mama. Te amo demasiado.-dije abrazandola.
-y yo a ti mucho mas cariño. Estoy muy orgullosa de ti.-beso mi cabeza y subio escaleras arriba.
-limpio esto y nos vamos.-dije recogiendo los platos que estaban encima de la mesa.
-te ayudo.-respondió Megan.
-gracias.-le respondí con una sonrisa.
-yo os espero en el coche.-dijo Damon señalando a la puerta.
-vale. Enseguida vamos.-conteste llevando las cosas a la cocina.
-Alice. ¿no crees que las cosas van muy deprisa?-pregunto Megan ayudándome a fregar los platos.
Suspire y la miré sin dejar de fregar.-Megan. Las cosas van como deberían de ir.-contesto mientras niego con la cabeza dándole a entender de que no voy a darle la razón en este tema.
-pues yo creo que van demasiado rápido.-dijo mientras secaba una taza y la guardaba.
Lo que creas o no a mi me la....
-simplemente pasa del tema. Yo y Damon estamos bien como estamos.-le respondo un poco brusca.
-cuando vengas llorando porque el te hizo daño solamente te diré la razón que tenia y lo muy equivocada que estabas.-contesto.
-ya. Eso no pasara.-dije pasándole un último plato.
-vale Alice. Lo que digas.-me respondió cansada.
Salí de la cocina con Megan detrás. Estaba un poco mosqueada por la conversación. Somos nosotros la pareja. ¿que necesidad hay que los de afuera opinen en nuestros sentimientos? ¿acaso es su relación? Si estamos bien como estamos ¿para que vienen a joder? Entre mosqueada en el coche.
-quiero ir a la aldea.-dije mirando al frente con el ceño fruncido.
-lo e escuchado todo.-dijo enfadado.
-créeme. Eso ya lo se.-conteste igual.
-que le den.-dice Damon entre dientes.
-pasa del tema. Deja a Megan en casa y vámonos.-dije al ver que Megan ya se subió al coche.
-bien.-y eso fue todo lo que se hablo en el viaje hasta mi casa.

Todos bajamos del coche. Entré en casa con Damon siguiéndome.

-ayúdame con algunas cajas por favor.-pedí a Damon. Este asintió y subió escaleras arriba.

-Alice.-me llamó Megan-¿enserio te vas?-me preguntó.

-si Megan. Es lo mejor.-dije subiendo escaleras arriba y negando levemente con la cabeza.

-¿lo mejor para quien? ¿para ti?-dijo Megan con lágrimas en los ojos.

-no. Lo mejor para todos.-conteste y terminé de subir el tramo de escaleras que me quedaban.

-No te quiere cerca de mi.-dijo Damon mientras cerraba la puerta con pestillo.

-solo esta preocupada.-dije sentándome en la cama.

Damon bufo y se sentó a mi lado. 

-¿preocupada? ¿preocupada de que?-dijo brusco.

-déjalo pasar.-le acaricie el mentón y lo hice mirarme.-¿acaso lo que importa no es lo que pensemos nosotros dos?-roce sus labios con los mios.

-te quiero.-susurro.

-créeme lo se.-uní sus labios con los mios.-anda vamos.-dejé una caja encima de sus piernas.-hay algunas cosas por mover. Llevas tu unas cuantas cajas en tu coche y yo llevo otras en el mio. así no hacemos dos viajes.-

-me parece bien.-contesto.


Enseñame A VivirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora