Capítulo 2

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Pasan los días y me olvido del incidente, ¿quien seria? Fue todo tan extraño, en fin, seguro que no lo vuelvo a ver así que mejor lo olvido.

Vuelvo a estar en el centro de la ciudad, salgo de nuestro mini metro llamado TRAM y me dirijo al punto de encuentro donde he quedado con mis amigos. Después de los saludos nos ponemos en camino hasta la zona volvo del puerto ya que allí se dará lugar una quedada de k-pop, al llegar hay mucha gente ya esperando allí, han venido de diferentes puntos de la ciudad, incluso algunos de otras ciudades cercanas, hay un DJ, refrescos y comida, esto ultimo se agradece con el calor y la caminata.

Hablamos de musica, idols, bias, coreografías, de como y cuando entramos en el mundo k-pop. Esto ultimo me hace pensar en como entre yo: hacia un tiempo que conocí el k-pop a través de una foto que subió un futbolista de mi equipo a las redes sociales de unas zapatillas plateadas, algo difíciles de mirar, los medios se hicieron eco de esto y salio la imagen del videoclip del grupo donde salían esas mismas zapatillas, así es como encontré a Exo aunque no vi el vídeo (porque fui directa al minuto donde salían las zapatillas) si conocí la marca puesto que después en una conocida web de compras por internet la volví a descubrir. A parte de que Exo era un grupo y que eran coreanos no sabia nada mas del k-pop hasta que Teresa me propuso meterme en un grupo de baile con este genero de musica, desde hace unos meses estoy de cabeza con el k-pop y no se exactamente el por que pero también con Exo.

La jornada avanza y el DJ se pone en marcha, a través de lo bafles retumba el k-pop de grupos y solistas duro contra nuestros oídos, si fuera de noche solo nos faltarían cuatro paredes y alcohol para ser un garito del barrio. Las diferentes personas salen a un improvisado escenario a bailar las distintas melodías, unos con mas o menos gracia pero ¿que mas da? Nos estamos divirtiendo. Yo los veo bailar y me muevo a mi ritmo, cantando las partes que me se y que no invento el idioma. En un momento dado Teresa sale a la pista a bailar sola Chat me if you can de SNSD, baila tan bien que me siento orgullosa solo con el primer movimiento que hace. El resto vitorea y anima, cuando acaba sigue la rutina, cada vez se pone la cosa mas caliente pero no pasa nada, la musica de Hyuna tiene ese efecto.

Al filo de la noche (aunque luce algo de sol) nos retiramos, Teresa y yo vamos hablando de su baile y me comenta que ha tenido un fallo "vaya, pues yo no lo he visto" le digo, la verdad es que yo, aun habiendo ensayado esa misma coreografia no he sido capaz de ver el fallo, hay demuestro lo mucho que me falta por aprender en baile y lo buena que es Teresa.

Cuando cada uno del grupo de cinco se separa para tomar su camino mi cabeza da vueltas, me ha dado mucha envidia verlos bailar y moverse tan bien cuando yo no puedo, en varios momentos me he llevado la mano al hombro como un acto reflejo y de frustración.

— Maldita lesión, después de todo el tiempo que ha pasado y todo lo que he hecho me fallas ahora....

Digo dándome golpes en el hombro con las lágrimas picando en los ojos,esto me impide bailar, moverme tan siquiera y duele, no físicamente sino mentalmente después de tanto tiempo algo me vuelve a ilusionar y... me rompo así, no es justo.

— Te odio karma, no se que he hice en otra vida pero te odio

Vuelvo a decir, menos mal que la calle a estas horas esta vacía sino la gente pensaría que estoy loca.

Al dia siguiente vuelvo a la misma zona: mañana con una amiga de compras en los hippis, comida y risas. La verdad es que aunque estoy cansada me apetecía, hacia tiempo que no veía a Lucia y ya era hora de tener una conversación.

Camino de vuelta a mi casa, hoy estoy cansada así que decido tomar el TRAM, a mitad de camino un hombre con gorra roja, pantalones vaqueros, camisa blanca y gafas oscuras corre en mi dirección con otro tipo detrás, este parece mas joven, lleva unos pantalones rotos negros y una camiseta azul a rayas blancas, gorra negra y gafas oscuras además de un tapabocas. La situación es como la del otro día pero con un tío mas, nos acercamos, intento esquivarlos pero el mayor de ellos me para.

Distancia 10.184,52 kmDonde viven las historias. Descúbrelo ahora