Por Encima Del Alpha

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Gael

   No existe superlativo que indique el dolor, que me causan sus palabras, pero tiene razón, me acabo de comportar como un pervertido acosador de quinta. No me engaño justificándolo, porque es mi mate y tampoco responsabilizo al idiota de mi lobo, quien en este momento está furioso y loco; luchando por tomar el control sobre mí... 

Siempre quiere tenerme como un maldito esquizofrénico, escuchando y haciendo su maldita gana. Él es nadie y yo nunca lo escucho, ojala pudiera deshacerme él.

Es estúpido pensar que una mujer con más de una neurona, se complacerá ser sacada de su auto por un hombre y este la manosee a su antojo, nomás por que se le antojo.

Soy un idiota... debería auto-golpearme la cara.

Aunque no sea del todo cierto, me obligo a inculpar a su hermosa mirada, como cómplice de mi estupidez. Esos ojos que me miran altaneros y prepotentes, un minuto antes me miraban con deseo, sus bellos labios que elogiaron esa parte de mi anatomía, tiemblan de coraje contenido. Será que solo imagine el estremecimiento de su cuerpo por mi tacto o su corazón paralizado por mi presencia.

Ella es mía, mi mate, yo soy suyo, somos uno...  Ella aún no es consciente... Todo sería más fácil sí fuera una loba, porque sabría cómo me siento.

Mía es un prefijo que más que indicar posesión denota mi orgullo al saberla mía, mi mate, mi luna. Como el orgullo que se siente al llamar a un hijo, madre, padre, esposo, etc. No se siente como una cadena obligada de pertenencia, sino un lazo, una unión consentida, de pertenecía mutua.

Es hermosa y lo sabe muy bien; graciosamente lo usa de arma. En mi experiencia esa arma es muy peligrosa y tiene más de dos filos...

A estas alturas, puedo inferir de su carácter altivo, que palabras de elogio, amor, justificación e imploración de perdón, no tendrán ningún sentido o efecto, porque inevitablemente me mandara al demonio.

Esa mirada, ya me la conozco bien, es la misma que yo pongo cuando una mujer o loba, se me insinúa sin dignidad y con vulgaridad; repulsión y asco es lo que me inspiran. Entonces, eso me da una idea de lo que puedo hacer...

Sí ya he sobrepasado el punto de no retorno que más da un poco más... Sí a hierro hieres a hierro mueres.

- ¿Mujer? – digo gritando

¡Por favor mocosa!

¿Tengo cara de un puto acosador?

Sí bien mis palabras no concuerdan con mi razón, pues deseo cada parte de ella, principalmente sus labios, no es factible expresarle la verdad. Nunca podría dejarla ir, el miedo de perderla me domina y desquicia.

–Nadie, me somete y controla...

-Pues mucho gusto porque ¡YO SOY NADIE! y sí te digo que eres ¡MIA! lo eres.

No hay vuelta atrás, como un secuestrador la tomo con mis manos del cuello y la llevo junto a mí dentro del auto. -Grito a Lucas que ponga los seguros y que me lleve rápido a casa.

Lógicamente ella se asusta, enoja, llora, me grita idiota, que la deje salir, que no puede dejar su auto abandonado; mientras me golpea con sus manos, brazos y pies. 

Al verla agitada y tocando mi piel, lo único que pienso en ser el pervertido que represente ser y a si tenerla como en mis sueños. Intento aparentar estar enejado y así esconder lo que en realidad pienso. 

Ojala fuera como una muñeca de pilas y así tener un respiro para pensar como mostrarle lo que somos los dos.

Me divierte las expresiones y gesticulaciones de su cara al estar enojada y diciendo sus infantiles insultos, sí supiera que el orgullo de alpha lo perdí en sus ojos. Por Dios mi niña estoy perdido por ti...

Es difícil contenerme teniéndola frente a mí, después de tanto, esperarla, buscarla y soñarla. No sé cómo tratar a esta humana que es mi mate. Disfrazo esta sed de ella y la amenazó con ser el pervertido que menciono. Solo busco que se calme un poco y así poder pensar. 

Pero sin darme cuenta le he gritado muy fuerte, ahora su cara de odio se ha mezclado con asco. Aprieta sus labios temblorosos del coraje, necesito que hable para borrar su expresión con nuestros besos.

Vamos mi amor háblame, sí te gusto mi trasero, te gustan más mis labios, aquí no se pierde, sino que los dos ganamos. Me divierte provocarla, parece una niña. Es el momento más feliz de mi vida, por fin la encontré. 

No me molesto su vomito en mi pecho, es como sí a un sediento le molestase el agua; muchos menos la mirada de deseo en mi cuerpo o sus mejillas que se sonrojaron sin pedirle permiso, en realidad estoy feliz.

-Gael ¿Qué le paso a tu celular? No soy tu maldita secretaria, todas tus llamadas se están desviando a mi teléfono.

-Escucho a Sofía por la conexión. Lo siento peque, tuve un problema en la constructora y después encontré a mi mate. Oye tu programa de diseño de estructuras me salvo la vida.

-¡Enserio! Felicidades hermano, ya sabes quién es la genio de la familia. No me digas la atrapaste con una pokebola y después la vas a poner Cómo sí fuera la rosa de la bella y la bestia.

- Es una humana que sabe ella de lobos, mate, manadas, etc. Ni sé su nombre.

-Ósea que: 

"Cómo tú te llamas yo no sé

De dónde llegaste ni pregunté
Lo único que sé, es que quiero con usted
Quedarme contigo hasta el amanecer"

- Perdón no lo pude evitar. -Contesta Sofía riendo .

- Mi amor, te perdono todo porque estoy tan feliz y porque tienes 14 años, pero no te pases.

-Ya, ya tranquilo hermanito yo la puedo investigar, solo necesito sus huellas digitales.

Tengo una idea tú serás el policía malo y yo la policía buena, ¿me copias pareja?

- Corto la conexión. Mi mate está perdida en sus pensamientos con la mirada hacia la ventana.

-A una calle antes de llegar a la casa, la escucho decir muy, pero muy bajito.

"Por favor, por favor Dios que no sea un tratante de blancas"

 -Me obligo a contener la risa. ¡Esto me servirá para jugar con ella y vengarme!