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"Colors."

—Me duele todo.— Nina se quejo, mientras guardaba las llaves de la cafetería en su abrigo.

Harry solo asintió en respuesta, lo único que necesitaba en ese momento era dormir.

—Debí tomar unas vacaciones mas largas.— Nina comenzó a caminar, con el rizado a la par.

Eran las 9:00 pm, y por lo tanto había obscurecido, extrañamente las calles estaban vacías y los comercios habían cerrado temprano.

—Totalmente de acuerdo.— Harry murmuro con una sonrisa juguetona.

Nina rodó los ojos y siguió caminando.

Minutos después, el castaño dejó a su jefa cerca de su casa, la cual no quedaba muy lejos de su departamento.

Harry no había tenido tiempo para pensar, gracias a su trabajo.

Pero ahora no tenia excusa alguna, y el rostro de su pequeño rubio apareció en su mente, haciéndolo sonreír como tonto.

No sabia el porque ni el cuando pero le atraía Niall, le atraía de una forma tan fuerte que le costaba pensar cuando estaba cerca de él, le atraía su sonrisa, su voz con aquel acento tan sensual, sus ojos Y ese profundo azul que se escondía en ellos.

Cuando antes le irritaba si quiera escuchar su voz, se sentía tan estúpido.

Dio un respingo, cuando sintió que algo vibro dentro de su jeans ajustados.

Saco su móvil y lo desbloqueo.

+5379..

Hola Hazz.
Soy el chico que te beso esta mañana ¿lo recuerdas?  En fin, te extraño xx.

Definitivamente Niall no podía ser mas lindo.

Quería verlo y la idea de hacer una visita inesperada a su departamento paso por su cabeza. Tenia su dirección, lo único que tendría que buscar seria el numero del departamento.

Tomo la decisión y cambio el curso de su camino.

**

—Se lo he dicho, soy su amigo y voy con él en la universidad.— Harry insistió, intentando que la recepcionista lo dejase pasar.

—Escuche, alrededor de cincuenta personas han venido aquí diciendo lo mismo, y el joven Malik me ha dicho que no los deje pasar, ya les han dado varios sustos.— Harry suspiro, Zayn estúpido.

—Por favor, quiero darles una sorpresa, no traigo armas, ni drogas.— El rizado junto sus manos e hizo un puchero, la recepcionista sonrió pero negó.

—No puedo, enserio.— La castaña murmuro.

—Te daré cien dólares.— Harry ofreció, sacando de su bolsillo lo que se había ganado de propinas, mas cuarenta dólares que Nina le dio por preparar un pastel.

—No.— La chica suspiro.

—Eres cruel.— Harry guardo sus billetes.—Cuando vea a Zayn le diré lo mal que me has tratado.

—Bien, es el 3E, pero cualquier cosa extraña que hagas llamare a la policía, ¿entendido?— Harry sonrió y asintió. 

Camino hasta el ascensor, no sin antes agradecerle a la chica de recepción. El edificio era grande y algo sofisticado, le gustaba.

Cuando el ascensor se detuvo se apresuro a salir y comenzó a buscar el 3E, cosa que no le llevo demasiado tiempo, tomo aire rápidamente y toco la puerta algo temeroso.