Otra oportunidad...

Capítulo 14

Desperté con unos hermosos ojos mirándome.

- Ojala fueran así mis mañanas por el resto de mis días.- dijo Isau. Solté una risita.

- Qué cursi eres.

- Así me quieres.

- Correcto.

Me estire y deposite un beso en su mejilla, luego me levante y fui al baño.

Por si lo preguntan, la noche de ayer no tuvimos nada, aún estaba algo triste, distraída, pero triste.

Me lave la cara, los dientes y me peine un poco el cabello.

Cuando regrese a la habitación ya no estaba Isau. Baje a la cocina por algo de comer.

Había una nota en la barra:

- Hermosa, salí, pero no tardó, desayuna y ponte más bonita de lo que eres, cuando llegue te tendré una sorpresa.

Sonreí.

Me prepare brochetas de frutas con mantequilla y mermelada. Mi postre favorito.

Después, me di un baño.
¿Qué debía usar? No sabia a donde iríamos así que le envíe un mensaje.

Alexa: ¿Qué ropa debo usar?

Isau: Con lo que te sientas cómoda.

No pregunté más. Por si las dudas, no llevaría vestido ni falda, tampoco iría deportiva...
Tome unos jeans claros, una blusa tejida con un ligero escote en la parte de la espalda.
Escogí unos Adidas blancos con negro como zapatos, y el cabello me lo deje suelto y con rizos un poco definidos.

Justo cuando bajaba las escaleras, tocaron la puerta.

- ¿Lista?- cuando lo vi me lance a abrazarlo y deposite un beso en su mejilla.

- Si.

Subimos a su auto.

- ¿Ya me dirás a dónde vamos?

- Nop... Será un viaje un poco largo, si quieres puedes dormir.

No me sentía cansada,eran las tres de la tarde aproximadamente, así que mejor conecte mi celular con los audífonos.

Comencé a pensar, cuando me valla todo tendrá que cambiar... quizá Isau se valla conmigo, pero la prensa jamás nos dejará en paz y eso me hacía sentir aturdida.

Odiaba que la gente se metiera en asuntos que no les importaba.

Pero en fin, no cambiaría mis planes de vida solo porque algunas personas no estarían de acuerdo.

Lo mire. Se veía concentrado en el camino, se formaba una línea justo en el centro de su frente, lo que lo hacía parecer más atractivo. Llevaba unos caqui con un suéter amarillo. Parecía todo un universitario, y me causaba gracia.
Con una mano sostenía el volante mientras que la otra reposaba en mi pierna.
Noto que lo estaba mirando y una sonrisa de lado se formó en su rostro dejando a la vista sus perfectos dientes blancos.

- ¿Qué tanto me ves?- tenía la música baja, así que lo escuchaba perfectamente.

- Nada...- sentí mis mejillas arder ligeramente.

Volvió a centrar la vista al camino y yo a la ventana.

[...]

- Llegamos.- me dijo Isau sacándome de mis pensamientos.

Estábamos entrando en los jardines de una cabaña. La cabaña era totalmente de madera, tenia un estilo rústico pero formal al mismo tiempo.
Los jardines estaban muy bien cuidados y había flores por todas las orillas.