Miércoles diez

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Capítulo dedicado a ; valee_valee_valee por siempre leer lo que escribo, comentar y votar. Y por que compartimos nuestro amor (y todas las demás que leen por supuesto) por Harry, también por ser muy buena compañera<3

Miércoles diez.

Me senté en la sala, esperando a que la clase de cálculo iniciará. Las personas ingresaban con sus grupos de amigos riendo animadamente y se sentaban todos cercas uno de otros para poder hablar durante la clase.

La figura un poco encorbada y tímida de Aaron cruzó el umbral, entrado a paso lento a la sala. Alcé mi mano hacia él en saludo y él me sonrió sin mucho ánimo, quise suponer que por la hora. El camino hacia mi asombrándome, y se dejó caer en el puesto desocupado de mi lado.

—¿Qué tal Madison? —Chocó su hombro suavemente con el mío—.

—Bastante bien para ser martes por la mañana, ¿y tú? —Le devolví el choque de forma suave a lo que el río entre dientes—.

—Cansado, no dormí mucho —Se encogió de hombros como si de restarle importancia quisiese, pero creo que noto mi ceño fruncido y mis ojos curiosos—Es que debo cuidar a mi hermana menor en las noches, porque suele tener muchas pesadillas, y mi madre trabaja en el hospital durante la noche así que a veces no duermo mucho —Paso las manos por su cabello en un intento de arreglarlo—.

Mi corazón se encogió de ternura al imaginarme la situación, Aaron como hermano mayor de una adorable niña pequeña la cual cuidaba durante sus pesadillas.

—¿Y tú padre? —Mostré una media sonrisa hacia el—.

Una sonrisa sin humor ni gracia se expandió por los pálidos labios de Aaron.

—El murió hace un año, por eso Amy tiene pesadillas —Mi respiración se detuvo unos segundos, no debí preguntar—.

—Lo lamento Aaron, no debí preguntar en serio perdón —Mi mano iba hasta su brazo con la intención de acariciarlo, pero me detuve en el camino. Ya había hecho esto lo suficientemente incomodo, y dudaba que Aaron quisiera que lo consolara, aún no nos conocíamos del todo—.

—Mis padres se separaron cuando tenía diez, el se mudó a New York, y me olvido, a veces llama durante semanas y otras veces desaparece durante meses, pero nunca viene —Me encogí de hombros, realmente no sabía porque le contaba sobre esto, no sabía porque había decidido decirle algo tan importante para mí como aquello, simplemente pensé que le debía algo, le debía algo mío personal al yo saber algo suyo personal. Algo así como estar a mano, sentía que Aaron era un buen tipo, y no le diría a nadie más sobre esto—.

El profesor llego hace unos minutos, pero Aaron y yo continuamos hablando en voz baja, era un chico muy divertido y teníamos muchas cosas en común.

—Odio cálculo —Me queje al ver los ejercicios anotados en él pizzarón—.

—Somos dos, nunca logró entender bien —Río mientras anotaba algunas cosas en su cuaderno—.

La clase paso rápido, Aaron era un chico muy divertido, y me hizo reír en muchas ocasiones, aunque debía guardar silencio porque no quería que me expulsaran de la sala.
El timbre anunciando receso resonó, guarde mis cosas en mi bolso, y salí a la par con Aaron, el sin problema alguno me acompañó a guardar mis cosas al casillero para luego irnos camino a la cafetería como de costumbre.

—Una vez Amy me despertó gritando, esa definitivamente fue la peor noche de todas —Río mientras movía su pelo negro hacia atrás—.

—¿Pero eso es normal? —Intente no reír, porque sentía incorrecto reírme de algo así—.

Aaron iba a responderme cuando la voz de Ryan llegó a mis oídos, ¿por qué alguien como él me estaba llamando?

—¿Qué quieres? —Voltee hacia el, quien venía con tres amigos más a su lado—.

—Solo tenía una duda y pensé que sería buena idea preguntarle a mi amiga Madison —Una sonrisa molesta se creó en su rostro—.

—Tu y yo no somos amigos —Reí secamente, mientras me cruzaba de brazos—.

—Bueno, igual preguntare ¿Al final Harry se aburrió de ti, o tu de Harry? —Ladeo la cabeza un poco— Tal vez no lo complaciste muy bien, o tal vez él no sabe cómo tratar a una chica como tú —Se rió junto con sus amigos—.

Se acercó a mí, estiró su mano hacia mi rostro con la intención de tocar mi mejilla, pero golpee su mano antes que está me llegara a tocar, dio una grande zancada acortando la distancia.

—No me toques —Las manos de Ryan se pusieron en mis hombros y me empujaron hacia atrás, estuve a punto de tropezar y caer pero mantuve el equilibrio—.

—No la vuelvas a tocar tú a ella —Aaron se acercó hacia el, mostrando esta vez toda su altura y sobrepasando a la de Ryan, hice los mismos movimientos que Ryan conmigo y posicionó sus manos en los hombros de este para darle un fuerte empujón, Ryan estuvo a punto de tocar el suelo, pero sus dos amigos lo sujetaron por los brazos—.

Aaron sin darle más importancia, volteó hacia mi, donde guiándome por mi cintura me hizo avanzar, a unos pasos estaba Harry observando todo, había estado allí hace un buen rato, vio como Ryan me empujó y no hizo nada, ni siquiera le dijo algo ¿por qué demonios seguía esperando algo de él?, negué con la cabeza como si quisiese quitarme la idea de la cabeza. Y continue caminando al lado de Aaron hacia la cafetería.

Una vez dentro, voltee hacia Aaron y lo abrace, por simple necesidad y agradecimiento, aún me sentía mal por lo de la mañana y el ahora me había defendido, era un gran chico.

—Gracias por eso Aaron —Lo solté avergonzada y sin más, camine hasta la mesa donde estaba Matt solo—Hey rubio —Bromeé—¿Por qué tan solo? —Choque mi hombro con el suyo—.

—Porque Shay continúa enferma, y me dijo que te tenía que decir que te odiaba —El río y yo simplemente me sentí mal, por ser tan mala amiga con Shay, ayer no tuve tiempo, siendo honesta ni siquiera me acorde de llamarla—.

—Dile que lo siento, mi mente es un lío —Me encogí de hombros, abrí mi botella de agua y le di unos sorbos—.

—¿Qué tal su mañana? —Pregunto Matt—.

—Problemática —Respondió Aaron—.

Matt frunció el ceño, e hizo señas con su mano indicando a que explicáramos.

—Ryan llegó a otro nivel de molestarme, me empujó —Rodee los ojos—Y Aaron me defendió, lo empujo de vuelta. Ya sabes, una mañana problemática —Reí intentando ser graciosa, pero ninguno de los dos río conmigo—.

—Madison, esto es serio. Ryan no puede ir por allí empujándote y molestando, ¿por qué es así contigo? —Pregunto Aaron, mientras se cruzaba de brazos—.

—No lo sé, no le agradó —Mentí. Sabía perfectamente porque el actuaba de esa forma conmigo, pero era una larga historia la cual no tenía ganas de contar—.

Pasaron unos minutos, en los cuales los tres nos mantuvimos en silencio, aunque a veces se sentía incomodo, ninguno hizo nada por mejorar el ambiente.

El día acabo rápido después de las dos ultimas horas de clase, estaba dispuesta a irme a casa, darme una ducha porque necesitaba relajar mis músculos, y dormir el resto del día para así poder evitar hacer mi cabeza un lío en pensamientos que al final nunca llegaban a nada, y debía llamar a Shay, me sentía una terrible amiga, debía recompensarla, y con algo estupendo.

—¿Te llevo? —Un sonriente y animado Matt me rodeo por los hombros e hizo maniobras con las llaves de su auto—.

—No hoy Matt —Reí y me removí de su medio abrazo, quería que me soltara, estaba incomoda—Gracias de todas formas, nos vemos mañana —Bese su mejilla y me fui caminando sin detenerme a esperar una respuesta de su parte—.

Prouds |h.s|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora