¡CAPÍTULO EXTRA!

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Beverly Hills, CA.
Seis años antes de los suceso.

La familia Grande-Butera poseía una de las mayores empresas inversionistas de todo el estado Americano. Ellos eran una familia de gran prestigio, tenían el respeto de todos ganado y el dinero era el menor problema para ellos.

Pero luego estaban ellas, dos hermanas con un corazón enorme, pero no tan enorme como su odio hacia la familia Grande-Butera, quienes habían dejado a su familia en la ruina total, luego de que Edward Grande despidiera a su padre luego de enterrase de sus preferencias sexuales.

Las hermanas fueron llevadas a un orfanato debido a que sus padres no podían cuidarlas. Eran fuertes, pero no lo suficiente como para soportar aquello.

Ellos querían a su padre y su madre devuelta, aunque su amor no volviera a ser el mismo. Pero el deseo de volver con su familia era casi igual al deseo de acabar con aquella familia adinerada e inhumana.

Kendall y Kylie, querían venganza.

Beverly Hills, CA.
Cinco años antes de los suceso.

Era la navidad del 2012. Todas las familias celebraran la noche buena, los ricos y adinerados con sus grandes árboles cargados de enormemente costosos regalos y mucha felicidad tras ellos, sus grandes banquetes con todo lo que uno podría imaginar, ellos lo tenían todo; menos la bondad y humildad.

El timbre de la mansión de los Grande-Butera fue tocado. La pequeña castaña con un atuendo valorado en casi quince mil dórales, se levantó de su asiento a regaña dientes para abrir la puerta y encontrase con unos adolescentes; uno de ellos ojiverde el otro ojiazul.

Sus prendas rasgadas, sus cuerpos fríos como el invierno y sus estómagos tan vacíos como un pozo sin fin.

— Buenas noches señorita. Mi nombre es Harry, y el es mi amigo Louis –Señaló a su amigo–.¿ Podrías darnos un poco de tu, comida? – Sollozo él chicos de aspecto asqueroso y triste –. Nuestras madres nos han abandonado y estamos solo...

— Ese no es mi problema.

— Solo te pedimos algo de pan, o chocolate, no queremos morir de frío – Rogó el otro chico de mirada azul.

— Y yo no quiero compartir mi comida con personas tan asquerosas como ustedes. Muéranse y ahórrense su sufrimiento y a personas como yo las molestias de tener que verlos –. Exclamó con rabia para luego cerrar la puerta en sus caras.

Beverly Hills, CA.
Cuatro años antes de los suceso.

La pequeña Carter Butera en ese entonces era la sensación de su pequeña pero importante escuela. Era una niña feliz, rica y llena de caprichos. Muchos aclamaban que era una niña pequeña, pero que su ego era masivo.

Ella caminaba por los pasillos de su escuela moviendo su pelo de manera coqueta, mientras sonreía de oreja a oreja. Entonces una chica se cruzo en su camino... Alexa Luria.

Alexa estaba completamente enamorada del Fletcher Sams, el mismo muchacho del cual Carter había estado enamorada desde que tenía uso de sentido común.

Entonces aquel chico compartió un beso dulce pero bastante subido de tono con Alexa, en ese entonces apodada Lexie.

La pequeña Carter tomó su teléfono celular y se lo paso a su amiga para que grabara toda la acción. La castaña -quien tenía una bebida en sus manos- saco el hielo de esta con sus manos y los colocó dentro de la blusa de Lexie, causando que ella pegara un pequeño chillido. Acto seguido la maliciosa pequeña hecho todo su jugo de arándanos sobre la cabeza de Luria, causando que ella vomitara de inmediato debido a que Alexa era sumamente alérgica a aquella fruta.

Carter sonrió y tomo su teléfono para subir ese espantoso vídeo a todas las redes sociales.



Viéndolo de esta forma nada era lo que parecía. Ni siquiera Carter era quién decía ser, no era esa niña buena y humilde que todos pensaban, y eso la llevó a la ruina.

Todos ellos se habían prometido a si mismos Destruir a Carter Butera, le iban a prometer una amistad y luego iban a apuñalarla sin piedad. Pero ¿Quién realmente cumplió su promesa?

Las apariencias engañan, vaya que lo hacen.

Ahora para finalmente terminar esta historia llena de dramas, redes de mentiras, apariencias engañosas, y situaciones realmente lamentables...

¿Sabes tú quienes son tus verdaderos amigos?
O
¿También te falta descubrirlo?

Nadie es quién dice ser. Carter no era una santa, Jai, Alissa y Ricky no eran los malvados en esta historia, Selena simplemente sabia lo que pasaba, más se negó rotundamente a participar en aquellas acciones.

Ahora saca tus propias conclusiones.

¿Kendall y Kylie?
¿Harry y Louis?
¿Alexa Luria?

O

Ellos aplicaron el dicho "todos para uno y uno para todos"

Porque al final de todo.

Si, hay una parte de la historia que jamás será contada.

¿La razón?

Carter Butera se llevará ese secreto a la tumba.




Fin.

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