Tal vez» Namjoon

07.

―Te voy a dar una oportunidad.― Dijo ella, dando otro sorbo a su té.―Te voy a dar la oportunidad de que me confieses todo.

Namjoon no quería esa oportunidad. No quería nada, quería pagar. Quería que esas voces se fueran de su mente.

Entonces nuevamente las lágrimas abrumaron sus ojos, acumulándose ahí y empezaron a caer por sus mejillas. Los sollozos fueron los siguientes en hacerse presentes.

A ese punto, ni siquiera él sabía la razón por la cual había hecho tal calamidad. Y se odiaba a sí mismo.

Si simplemente se iba de ese mundo ¿El dolor que lo atacaba sería menos?

"Ni siquiera pienses en dejarnos solos."

"Ya ha empezado, ahora lo vas a terminar."

Tomó su cabeza entre sus manos y apretó fuertemente. Otra vez. Otra vez estaban ahí. Quería gritar, quería sentirse libre, pero solo lograba soltar balbuceos sin sentido. Su garganta empezaba a cerrarse, se sentía de esa manera, pero solo se estaba formando un nudo en su garganta.

―A...Ayúdame.― Dijo apenas. Seul Gi esperaba una respuesta. No creía ni un poco. Ella no creía que Namjoon estuviera haciendo aquello enserio. Pero lamentablemente era cierto. Él estaba teniendo un ataque de nervios en ese momento.― ¡Hazlas que se vayan!

El empezó a negar con la cabeza. Un escalofrío empezó hacerse presente en su piel. Reconocía ese escalofrío, era el mismo que había experimentado todas aquellas veces que mandó los mensajes desde un segundo celular. Todas aquellas veces se había disfrazado de aquella persona. Esas veces no había pensado en nada, solo se había dejado llevar por aquellas voces.

Empezó a temblar. Entonces Seul Gi se acercó a él. Le tomó el hombro y el rápidamente tomó su mano.

Estaba sudando.

Entonces nuevamente, él no fue más que esclavo de aquellas voces.

Un estruendo, un grito y un forcejeo.

Namjoon estaba en el piso encima de Seul Gi.

Ella estaba perdiendo el oxígeno. Por qué él estaba deteniendo el flujo de sangre. Estaba ahorcándola.

Ella solo suplicaba con la mirada a la vez que trataba de respirar, y ejercía fuerza en tratar de empujarlo lejos de ella. Era imposible, él era notablemente más fuerte que ella.

La vista de ella empezaba a nublarse. Era el fin de ella. Otra víctima se iba a sumar a la lista de Kim Namjoon.

Otra más iba a agregarse a su historial. Otra muerte que mancharía sus manos.

El peso de él cayó de pronto sobre ella. Y la presión en su cuello desapareció. Empezó a toser, buscando el aire que le hacía falta desde que él había ejercido presión en su cuello.

Pudo ver el cabello verde de Yoongi y se sintió segura. A pesar de que a su alrededor había vidrios por doquier.

... 

Todo había sido descubierto. El pasado de Namjoon aún era incierto. Pero se sabía que él tenía problemas.

Había sido sentenciado. Cadena perpetúa por el asesinato de dos personas y un intento de atentado contra la vida de Seul Gi. También un tercer grado de esquizofrenia.

Pero a pesar de ello, se sentía bastante aliviado.

Era lo que tanto había deseado.

El frío de aquella celda no se comparaba en lo absoluto con lo que sentía dentro de sí. Las escasas ropas que le habían dado en aquella cárcel parecían más tibias que todo aquel pesar que había cargado en sus hombros.

Sorprendentemente se había encontrado con uno de sus compañeros de secundaria. Mismo que también había cometido un asesinato.

En aquel lugar, un asesinato era la cosa más trivial de la cual podían hablar.

Kim Taehyung hablaba de aquello como si fuese la cosa más normal. Él por su parte había asesinado a su padre. A su propia sangre.

No se arrepentía de nada.

Namjoon lo recordaba cómo la persona más feliz y divertida de la clase.

¿Cómo era posible que aquellos pensamientos inundarán las mentes de las personas así de sencillamente?

"Nosotros nos hacemos cargo de ello. Ustedes simplemente se encargan de hacerlo."

Namjoon empezó a reír. Nada de lo que esas voces decían era cierto. El no volvería a hacer daño alguno. Se sentía seguro al saber que las personas de fuera estaban seguras sin él con libertad alguna.

Una noche de esas simplemente se quedó dormido, con sus ropas escasas y con un frío desbordante.

Era el final de su pesadilla. El final de esa vida espantosa. El final de sentirse como una basura. Sin ninguna fuerza por seguir luchando o seguir vivo.

...

Resulta y resalta que no era un capitulo y un epilogo, si no; dos y un epilogo, asi que no se preocupen mucho por ahora c: 

tratare de subirlos en el trancurso de la semana c: 

hasta luego y gracias nuevamente ;---;