El Amigo De Mi Padre. [EADMP#1] EN EDICIÓN.

Capitulo 22

Creo que quienes no lo superaron fueron ellos. Habia pasado un mes y sus caras largas, y de pena no se iban.

Lo entendía, de verdad que lo hacía, pero no nos hacía bien estar así, necesitaba otros aires, que me ayuden.

Me hacian sentir peor de lo que ya me sentia, no me demostraban cariño, ni sacaban sonrisas de mi.

Yo no podia hacerlo sola.

Para: Han.

No puedo quedarme toda la vida encerrada. Bar de Pick en 5.

No lo habia superado, pero queria eso.

Los ojos ya no me daban mas de todo lo que lloraba dia y noche. No recuerdo lo que era salir de la cama, ni mucho menos lo que era la luz solar.

Prepare mis mejores vaqueros, el mejor top escotado y mis tacones.

Baje las escaleras en silencio, agarre mis anteojos de sol, mi bolso negro y sali de la casa con mi mejor sonrisa.

No sabia que me esperaba de Han, es como mi hermana, que ahora es mi madrastra, pero no sabia como iba a reaccionar ante esto.

Cuando entre al bar, y la vi corrió a abrazarme con una sonrisa de oreja a oreja.

Me alivie tanto.

-Nos sentamos?.-Me pregunto y me llevo abrazada hacia la mesa.-Oye!, que le paso a tu abdomen?.

-Bueno.. Ya no tengo un bebe dentro.-Me reí.

 Su expresión cambio a la velocidad de la luz.

-Perdona.-Dijo y un sollozo se le escapo.

Oh no.. Aqui vamos, lo que no queria que pasara, lo que queria esquivar.

-Vamos Han, si siguen asi, nadie podra ayudarme a superarlo.

Mi telefono comenzo a sonar y quise hundirme cuando lei el nombre.

-Dime.

-Donde estas?, te sientes bien?, si necesitabas algo, me lo podias pedir.-Se lo notaba agitado.

-Oh adios.

Corte y mire a Han.

-Era James, mejor me voy.-Me levante de la silla y arroje algunos billetes.-Come algo, y no me extrañes.

-De que hablas?.-Dijo limpiando su nariz.

-No quiero verlos jamas, necesito hacer mi vida, feliz, respirar aire, no verlos y que me hagan recordar lo mal que la pase.-El nudo en la garganta se agrandaba.-Era mi hija, no piensan en mi?.-Sentia las lagrimas caer.- Lo siento mucho Han, realmente lo siento.

Su cara palidecio y trago saliva.

-No puedes hacerme esto. -Susurro. -No puedes hacernos esto.

Me rompió el corazón pero más me rompía por dentro su poca ayuda, su poca comprensión.

La deje sola cuando vi que comenzaba a llorar.

Te quiero, no lo olvides.

Escribí en un mensaje y se lo envíe.