Mía Smith...
Hoy me levante con un muy, muy buen humor. Tan buen humor que en vez de levantarme a las siete treinta como de costumbre, me levante a las seis treinta cosa demasiado rara en mí.
Salgo del baño luego de asearme, me visto con la ropa que elegí antes; unos jeans ajustados celeste claro, una blusa color crema y mis vans floreadas, hice ondas en mi cabello y lo deje suelto. Me miro al espejo y me gusta lo que veo.
Cuando bajo a la cocina son las siete diez y papá esta tomando desayuno mientras ve las noticias en la televisión.
-¡Buenos días papá!- digo con alegría mientras tomo la jarra con jugo y me sirvo en un vaso.
-Buenos días cariño- saluda mirándome sorprendido- ¿Qué pasó? ¿Estas enferma o algo?- pregunta preocupado.
-No es sólo que...- pensé mejor mis palabras- me levante con buen humor.
-Me alegro mucho por ti- se levanta tomando los trastos que ensució, los deja en el fregadero, voltea besa mi frente y va a buscar su chaqueta.
-¿Nate aún no se levanta?- cuestiono extrañada. El pequeño demonio es muy puntual y responsable para sus cosas.
Já todo lo contrario a mí, pienso divertida.
-Esta listo incluso desde antes que yo- dice burlón- sólo fue a buscar su mochila- termina de hablar y se escuchan pisadas en la escalera.
-¿Te orinaste o algo?- se burla una vez que llega a nosotros.
-No molestes a tu hermana- papá lo mira serio- deberías ayudarla para que no moje la cama- ambos chocan los puños y se ríen a carcajadas.
-Ja ja sólo me levante temprano porque hoy veré a mi novio- aclaro.
Ambos paran de reír para mirarme serios. Así es, ambos son muy sobreprotectores.
-No tienes novio- asegura Nate con el ceño fruncido.
-¿Por qué estás tan seguro?- miro mis uñas.
-¿Enserio quieres que hable?- pregunta con maldad- Hermanita deberías cerrar la puertas cuando hablas por teléfono con Sonia o Margaret- dice con superioridad y yo abro los ojos como plato.
-Okay- dice James, mi padre, interponiéndose- no peleen- nos amonesta- Mía ve por tu mochila, hoy te vas con nosotros.
[...]
-Adiós cariño, cuidate- se despide papá besando mi frente.
-Adiós papá, Adiós enano- salgo del auto y empiezo a caminar a la entrada.
-¡Mía!- escucho que alguien grita mi nombre.
Miro hacia los casilleros y veo a Gael agitando sus brazos, camino hacia el a paso lento.
-¡Apurate!- exclama- ¡Sólo lo haz hecho para fastidiar!- grita cuando llego a su lado.
-¡No todo gira entorno a ti pesado!- vocifero.
-¡Como tu digas Dora la exploradora!- me molesta.
-¡Idiota!- le saco la lengua- ¡Y salte tapas mi casillero!- lo empujo.
-¿Me estás diciendo gordo?- adopta su pose de divo. Mjm Divo.
Lo ignoro y abro mi casillero, dejo mi pequeña mochila saco mi lápiz de pasta morada, el libro y el cuaderno de Matemáticas.
ESTÁS LEYENDO
¿El Sabor Del Amor? Chocolate Y Fresa.
Genç KurguNo sé si lo nuevo es bueno o malo. La vida no es como la pintan las películas de romance. Lo cierto es que cuando te llega el amor, no sabes lo que es correcto, no sabes como actuar. Lo que yo sé hasta ahora, es que...Hay que dejarlo fluir.