Fue extraño...
En un principio, creía que te quería solo como mi hermana, pero estaba equivocado.
No llegaste a ser parte de mi mundo, te convertiste en mi mundo.
Lo lograste, me tienes a tus pies, no puedo vivir lejos de ti, porque me tienes loco...
Los rayos de sol llegaron a mi rostro, despertándome completamente, pero no quería que sucediera, estaba cansado y me dolía mucho la cabeza.
Tapé mi rostro con mis manos pero se me hizo imposible dormir de nuevo, gruñí y mis ojos se abrieron, fue raro que al abrir los ojos vi un techo que no era de la cabaña, pero la sorpresa fue más grande cuando miré a mi lado.
- ¡¡¡MIERDA!!! -Me alejé tanto que llegué a caerme de la cama en la cual estaba acostado.
- ¿Dipper? -Despertó la chica que estaba a mi lado, refregó sus ojos con sus manos, cuando pudo apreciar la escena en la cual estábamos sus ojos se abrieron a tope y soltó un grito muy agudo, me legaron a doler mis oídos.- ¡¿QUÉ HACES AQUÍ?!, ¡¿PORQUÉ NO TIENES ROPA?!, ¡¿QUÉ MIERDA PASÓ?!
- ¡N-no tengo idea!, ¡ni siquiera sé que hago aquí! -Ambos nos miramos de pies a cabeza.- No... ¡NO, NO, NO, NO, NO, NO! ¡No puede ser verdad!
- ¡Que asco, joder! -Gritó Candy sacudiendo las sábanas, no le vi nada, por suerte, no quería ver nada, ni siquiera a mí mismo.- ¿porqué me pasa esto a mí?, ¡mis padres me van a matar!
- Ya sé. Me voy de aquí, y hacemos como que nada pasó ¿te parece?, ¡todos ganamos! -Candy negó repentinamente la cabeza de un lado a otro, negándose rotundamente a mi idea.
- No, ¿qué pasa si estoy embarazada?, y si no lo estuviera. Contigo perdí mi virginidad, debes hacerte responsable. -Solté una carcajada fuertemente, burlándome de su idea.- ¿Qué es tan gracioso?
- Muerto antes de hacer eso, no puedes obligarme, Candy, estás loca. -Comenzó ella a reírse a carcajadas, fuertemente como si no aguantara la risa.
- No, si puedo, si no quieres que Mabel se entere de todo deberías hacerme caso, Dip. -Habló con burla.
- ¿Enterarse de qué? -Estaba confundido, pero tenía la leve sospecha de que Candy sabía, claro, yo y mi bocota que nunca puedo cerrar.
- Que estás enamorado de ella, de tu hermana. Jamás se me había ocurrido algo como eso, la verdad, es muy original.
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Estoy realmente jodido...
- No creo que seas capaz, ¿no te acuerdas de lo que pasó anoche?, ¿pero si de lo que te dije?, ni siquiera yo me acuerdo. Bueno, me descubriste, sí, me gusta mi hermana.
- ¡Así que es verdad!, pensé que lo decías porque estabas ebrio, pero no. Jaque Mate, Dipper, acéptalo, te gané. -Suspiré y tapé mi rostro con mis brazos, aceptándo mi derrota, todo por culpa de Mabel.
Pero ¿uno no elige de quién se enamora?, ¡no!, solo pasa, no fue mi culpa, solo la de Mabel, entiendo, la traté mal pero no fue para tanto como para que me golpeara.
- ¡Maldita vida! -Grité.
- Dipper, no creas que a mi me gusta la idea, pero no me queda de otra que seas mi novio.
