Cabaret Convoitise 「Fonnie AU」

Onze

Treinta días. Había contado treinta días sin ver al pelirrojo, treinta días en los cuales se dedicó a ordenar sus sentimientos hacia él y la única respuesta cuerda que encontró fue: "Él me gusta"
Se repetía varias veces que eso no era posible, no puede gustarte alguien a primera vista, eso no existe. Gritó nuevamente para dejar de estar tan frustrado pero seguía son funcionar, pensaba en ese pelirrojo día y noche sin parar, ni siquiera salir con Madison y Bryana lo ayudaba.
Era el único pensando en el otro, Frank seguía sin inmutarse, sólo se dedicaba a mimar y cuidar a su novio... Aunque igual tenía sus momentos en los que pensaba en el joven de Convoitise, aunque no era nada importante.

-Foooxy- el chico de cabello celeste abrazó a su novio por la espalda. -¿Podemos ir a algún lado? Estoy un poco aburrido aquí- el pelirrojo dejó de cocinar y miró a su novio.
-¿Dónde quieres ir, conejito?- se volteó quedando frente a frente con el chico.

Toby dio un pequeño salto, aunque lo suficientemente alto como para que Frank lograra tomarlo en brazos, dándole un tierno beso en la punta de la nariz.

-No lo sé... Siempre vamos al centro comercial, se esta volviendo rutina y comienza a aburrirme- hizo un puchero cuando el más alto lo sentó en la le mesa. -Salgamos a dar una vuelta al parque-
-Los parques están saturados de "entrenadores pokémon"- hizo comillas con sus dedos y luego volvió a cocinar. -Pero si quieres no me negaré-
-Quizás Mangle esté ahí- rió el de cabello celeste. -Ya sabes, está a punto de completar la pokédex... Todavía me duele su traición de unirse a Instinto, debería estar en Sabiduría conmigo, como la mejor amiga que es-
-Yo también estoy en Instinto para tu información- el pelirrojo rodó los ojos.
-Lo sé, pero soy el único en Sabiduría y no quiero, los odio- el chico se cruzó de brazos fingiendo enojo.

El pelirrojo le restó importancia y siguió con lo suyo mientras el chico intentaba llamar su atención. Cuando Frank finalmente terminó de cocinar su "especialidad" que no iba más allá del arroz con carne, salió con su novio de la cocina para ir a cualquier lugar, mientras estuvieran juntos sería especial ¿No?

Al final terminaron yendo al centro comercial al igual que la gran mayoría de las veces porque Toby había visto unas nuevas botas y obviamente las quería. Y aunque Frank siempre se ofreciera a comprarle las cosas siempre se negaba, no era el típico novio aprovechador, tenía su propio dinero y haría lo que quisiera con él.
Ya era costumbre de que al momento en el que el chico se dirigiese a la ropa y cosas parecidas, sus caminos se separasen y cada uno fuese a donde quisiera.

-¿No debería ser Golden quien comprase los equipos de música?- se volteó y se encontró con Freddy hablando con... ¿Una estantería? -Digo, manejo el lugar pero... Meh-
-Me gusta este, no dijo nada sobre cual llevar y suena bien- el ceño de Frank se frunció al oír esa voz, pero como curioso y tonto se nace, se acercó para confirmar justo en el momento en el que el chico que acaba de hablar subía el volumen al aparato.

El pelirrojo quiso retirarse pero que Freddy lo haya saludado llamó la atención del joven, haciendo que volteé a verlo.

(N/A: aquí recomiendo que reproduzcas la canción de la multimedia porque los audios de SoundCloud sonaban mal)

Y sí, te he dejado usarme desde el día en que nos conocimos por primera vez. 
Pero no he terminado todavía de enamorarme de ti. 

Ninguno podía decir nada, no porque alguien o algo se los impidiese, simplemente las palabras no salían de sus bocas.

Soy el primero en admitir que soy imprudente. 
Me pierdo en tu belleza y no puedo ver dos metros más allá de mí. 
Y sé que en mi corazón sólo eres una parte que se ha ido. 

Los segundos se hacían eternos para ambos jóvenes, el castaño no existía en esos momentos, eran sólo ellos dos y las verdades de la canción que se oía de fondo. El pelirrojo miraba cada expresión del rostro de su contrario, su boca ligeramente abierta y confusión era todo lo que lograba ver.

Por su lado, el joven miraba al pelirrojo quien intentaba hablar pero nada salía de su boca, al igual que se movía incómodo en su lugar.

Y así siguieron por un buen rato, hasta que el de pelo morado bajó su mirada y la posó nuevamente en el aparato, intentando ignorar la presencia del más alto. El contrario intentó enfocar su pensamiento en cualquier otra cosa, logrando concentrarse en su novio el cual se venía acercando con dos o tres bolsas en sus manos, rastro de Freddy ya no había.

-Volví, amor...- el chico se percató de la presencia del joven y el tenso ambiente que había. -¿Quién es él?- estaba celoso.
-Nadie importante...-