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Sale de clase el jueves en cuanto el profesor cierra el libro y voy tras ella para comprobar cómo está. En tres clases de dos horas esta semana no he conseguido que hable conmigo, aunque tampoco lo he intentado mucho.

-Victoria- la llamo y todos se voltean a mirarnos - ¿Estás bien?

-No lo sé - sus ojos parecen anegados en lágrimas y algo dentro de mi me duele

-¿Puedo ayudarte? - me preocupa verla tan vulnerable

-¿como amigo o como policía?

-Lo que necesites, incluso puedo ser ambas cosas a la vez- intento sonreír para animarla

Me lleva de la mano hasta el aparcamiento y, por extraño que me parezca, no me siento incómodo. Incluso ella se ve más segura y decidida.

Sin preguntar se monta en mi moto y se coloca su casco y, en esta vez, al tenerla abrazada a mi si aumento la velocidad sintiendo su pelo golpear mi espalda. No es tan malo cuando lo ves en perspectiva.

No la llevo a su casa y paramos en un parque cercano a la mía. Su sonrisa y su pelo revuelto por el aire le dan un buen aspecto a su cara.

-¿Recuerdas el chico que estaba conmigo el viernes? - su voz es muy suave ahora, sólo se mira las uñas

-Si - de lo recuerdo perfectamente

-Él... No sé qué pasó exactamente, ¿vale? Cuando entramos en el local se separó de mi y volvió más tarde, enfadado conmigo, aun habiéndolo conocido esa noche, porque hablé contigo

-¿Eso es todo? - no se si comportarme como policía o amigo

-No, él dijo que me llevaría a casa pero al verlo enfadado decidí irme sola. Me encontró por el camino y discutimos, me hubiese pegado si yo no hubiera corrido más que él.

-¿Qué te hizo? - se agarra el brazo y puedo ver hematomas desapareciendo de su piel- Necesito que me digas quien es

-Solo se su nombre y... Prefiero que actúes como un amigo ahora mismo

Ella ha decidido. Lo que de verdad quería ella es que yo actuase como un policía, que me remitiera a cumplir la ley. Como amigo voy a machacarlo legalmente.

Descubro todo cuanto puedo de él haciéndole preguntas y al final la conversación degenera en, sin saber cómo, películas de Rocky Balboa.

No quiero que se vaya cuando está anocheciendo por lo que la invito a cenar. No lo había pensado muy bien hasta que empezamos a subir las escaleras. NADIA seguro está arriba.

Su grupo de frikis huyen al verme entrar, sorprendidos por la compañía miran en nuestra dirección antes de cerrar la puerta. Nadia está feliz de verla.

- Eres Victoria - afirma acercándose a ella

- Lo soy - parece confundida - de ¿nos conocemos?

- Eres amiga de mi hermano o algo así- se encoge de hombros

-¿ Ha hablado de mi?

- No ha hecho falta

No me dejan entrar en la conversación, ambas empiezan a hablar y, en aunque tengan intereses distintos, parecen llevarse bastante bien. Es lo que tienen las personas buenas, que no juzgan y son capaces de aceptar cualquier cosa.

Nadia la invita a cenar con nosotros y ella declina la oferta, debe volver con sus padres. Eso me dará tiempo a hablar con mi hermana. Se despide y volvemos a mi moto donde cada vez se hace más fácil tenerla junto a mi.

- Gracias por esta tarde - de sonríe un poco guardando su casco

-De nada, ¿estas bien? No me has dicho si necesitas algo. ¿Vas a denunciarlo? - estoy preocupado por ella

-No, no creo que fuese para tanto... - deja la frase sin concluir, vuelve a agradecerme y, en antes de irse, besa mi mejilla

Al volver a casa voy directamente a hablar con Nadia y P lo. Ellos sabrán ayudarme, ellos son buenas personas que tienen amigos.

-Nadia, os necesito - me siento a su lado ignorando sus caras extrañadas

- ¿consejo de chicas? - pregunta divertida

- consejo de amigos

VictoriaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora