CAPÍTULO 2

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L Y O V O C H K A

Capítulo 2
"La habitación de Yaku"

Yaku estaba acostado sobre su cama. Esa noche, él se haría responsable de cuidar al menor de la familia Haiba. Lo primero que hizo para cumplir su tarea, fue dejar un vaso y un pequeño plato hondo con leche en su velador. Lev se había acercado a tomar un poco para luego volver al lado de su senpai.

La habitación de Morisuke era bastante pequeña, aunque eso no le causaba incomodidad a Haiba. Tal vez porque su tamaño actual era considerablemente menor a lo usual y por ende no ocupaba mucho espacio dentro de la alcoba, o tal vez solo por el simple hecho de que el lugar era acogedor.

En ese sentido, Yaku se preocupaba de mantener limpia su habitación para sentirse a gusto. Su ropa solía estar siempre ordenada dentro de su armario. Cada mañana se encargada de hacer su cama. Su escritorio lo mantenía despejado si no lo estaba usando. Su estante tenía los libros alineados. Ningún detalle se le escapaba de las manos.

-Lev, acabo de leer que a los gatos no se le debería dar leche...- dijo mirando la pantalla de celular. -Debería darte carne, pero tendrás que esperar hasta el desayuno. Es muy tarde para comer.- añadió cerrando la ventana del internet.

Siendo cerca de las once de la noche el libero de Nekoma buscó entre sus contactos el número de celular de Kuroo para luego marcarlo. Debía resolver cuanto antes su duda relacionada al actual estado de Lev.

- ¿Yaku? ¿Por qué me llamas tan tarde?- preguntó extrañado Kuroo desde el otro lado del teléfono.

-¿Acaso eres un anciano que te acuestas tan temprano un día viernes?- contestó Morisuke molesto.

-Me lo dice alguien que de seguro ya está en pijama...

-Cállate, no te llamaba para discutir.

Lev levantó sus orejas y miró fijamente a Yaku quien parecía irritado por culpa de la conversación que mantenía con Kuroo en el teléfono. Aprovechó ese instante para acercarse un poco más y frotar sus bigotes cerca de la mano de su compañero.

-Ah, maldición, Kuroo ¿Puedes dejar de distraerme con tus palabrerías?- preguntó Yaku frunciendo el ceño mientras miraba al gato que tenía a su lado. Al rato, cambió su semblante y acarició su cabeza. -Necesito hablar algo importante. Se trata sobre los poderes de gato que mencionaste el otro día. ¿Eso era un rumor del Instituto?

-No se trata de un rumor.- respondió Kuroo inmediatamente. -Kenma y yo tenemos esos poderes.

-¿Y qué mas?

-Ahora puedo confirmar que no me escuchaste casi nada de lo que te hablé el otro día.

-Vamos Kuroo, necesito saberlo con urgencia.- insistió Morisuke.

-¿Mm? ¿Qué pasó?- preguntó sonando interesado.

-Se trata de Lev.- dicho eso, Yaku tragó saliva y miró a su kouhai convertido en animal. No estaba seguro de cómo se lo llegaría a tomar Kuroo, después de todo, la situación era inverosímil.

-Habla más claro, ¿acaso fuiste a ver a Lev a su casa? ¿No habías dicho que lo irías a ver mañana?

-Eh, bueno, lo que pasa es que...

-Ya veo, te armaste de valor antes de tiempo, ¿lograste al final hablar con su hermana?

- ¡Cállate!-exclamó Yaku sonrojándose levemente. -No se trataba de una excusa para ver a su hermana. Yo, realmente estaba preocupado por Lev. Es raro que falte tres días seguido al Instituto y a las prácticas. Llegué a pensar que se había enfermado, pero se supone que los idiotas no se enferman.- añadió haciendo una mueca de disgusto. -El caso es que Lev no está enfermo.- añadió cada vez más inseguro.

Levochka (LevYaku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora