Levochka (LevYaku)

Gustos y disgustos

★ L Y O V O C H K A ★

"Gustos y disgustos"
EXTRA 2/2

Había visto un animal entrar a mi baño. Nunca antes me había pasado. Ni si quiera en mi antigua casa. Pero el caso es que esa enorme gata había entrado mientras me daba un baño. Eran alrededor de las nueve de la noche. Mis padres iban a regresar tipo diez, ya que habían ido a comprar un par de cosas para el almuerzo de mañana.

Hasta cierto punto, todo iba normal. Absolutamente todo, pese a lo extraño de la situación. Sin embargo, casi me caí de la bañera por culpa de ese animal cuando comenzó a hablar. No podía creerlo, estuve a punto de lanzarle lo primero que agarré, pero parecía que esa gata me conocía.

Tuve una intuición al verla por primera vez; Me recordó al idiota que se cree el as del equipo.

¿Acaso una gata se apoderó de Lev?

No entiendo nada, lo único que se me vino a la mente fue esa corta conversación que tuve con Kuroo el otro día sobre gatos en luna llena. No sé por qué comenzó a hablarme sobre eso. Supongo que él debe saber mucho del tema, justo ahora me arrepiento de no haberle prestado suficiente atención. ¿Qué debería hacer?

Suspiré un poco cansado de la extraña  situación. Miré a la gata, ah... Digo gato. Es un gato después de todo. Supongo que la cinta rosa me confundió.

"¿Eres Lev?"

Pregunté incrédulo.

El gato me respondió con un maullido y fijó su vista en mí por unos segundos. Mi piel se erizó al notar que sus afilados ojos verdes se asemejaban a los de Lev. Definitivamente era él.

¡Ah Maldición! Yo no creo mucho en esas cosas sobrenaturales. ¿Qué se supone que es esto?

¿Reencarnación?

¿Acaso será que Lev...?

Apreté mi puño.

"¡Lev!"

Grité con angustia. Pensé en algo horrible y me sentí triste. No, ese idiota no podría... o será que...Mierda.

Tomé al enorme gato entre mis brazos y lo cargué a mi habitación. Me senté con él en la cama y lo abracé mientras le acariciaba el lomo. No suelo ser así con los animales, pero pensar que Lev puede estar atrapado en el cuerpo de un gato, o que Lev ya no puedo volver a ser un humano otra vez, es algo a lo que no podría acostumbrarme.

¿Me estaría buscando para pedir ayuda? ¿Estará desorientado? ¿Cómo lo puedo ayudar?

Parecía que Lev me entendía, estaba frotando sus orejas en mis manos y pasaba su nariz por mis dedos. Decenas de preguntas en mi cabeza desaparecieron cuando escuché que tocaron el timbre. Deben ser mis padres, tal vez olvidaron la llave.

"¡Ya voy!"

Me cambié rápidamente de ropa mientras me secaba los ojos. Me había puesto el primer pijama que encontré en mi armario. Es un poco vergonzoso admitirlo, pero como no crecí mucho en mis años de preparatoria hay mucha ropa que sigo usando... Empezando por este pijama con estampados de gatos.

Una vez que me puse mis pantuflas, corrí rápido por los pasillos para llegar a la entrada principal. Al abrir, me di cuenta que no eran mis padres... Era ella; Alisa Haiba, mi amor platónico desde que la vi por primera vez. No había notado el color diferente de sus ojos, no podía parpadear. Me puse rojo y me quedé quieto, era muy alta, extremadamente alta, y sobre todo hermosa.

Mierda, y yo vistiendo un pijama tan infantil.

"Buenas noches, eh... ¿Morisuke-kun?"

Su voz sonaba como una dulce melodía. Se acordaba de mí.