Mirada en la Obscuridad

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  Había corrido a consolar a Key, no deseaba oír nada más sabía que esa cosa lo quería manipular para que le hiciera algo a mi hermano. Vi como lanzó su mirada y entendí al instante que sus planes eran que me molestara con Kibum, pero yo no haría algo como eso. Sabía que ese trato estaba mal pero no podía culpar a mi amigo, el era demasiado valioso para mi, tanto como mi hermano, no quería un estúpido trato en donde fuera uno u otro.
Lo abracé con fuerza, su cuerpo estaba tan frio, supongo que eso era normal en el ahora.
-Tranquilo Kibum, ignóralo, creí que ignorarlo era la solución – acariciaba su cabello hincado a su lado quería protegerlo, era obvio que se trataba del mismo Kibum de siempre, pero esa cosa lo engañaba con su propio temor de volverse un monstruo.
-¿Taemin? – Me miró con sus ojos llorosos y con ternura, sentí como se aferró tomando mi playera.
-No te preocupes Kibum, el no puede cumplir su parte del trato, así que tu no debes cumplir la tuya – le dije dándole a entender que estaba enterado y no me importaba– quédate aquí con Jonghyun era obvio que él te necesita, yo ya no tengo esa clase de sentimientos por él – había decidido hace tiempo alejarme y eso lo sabía, solo había utilizado esa sucia técnica para deshacerse de Jinki, era obvio que los estudios de mi hermano representaban un peligro para él, bueno esa fue mi conclusión en ese momento. Le lancé una mirada retadora al ver como Kibum se calmaba ante mis palabras y yo arruinaba sus planes. Parecía que podía ser Sherezada.
-¡No me provoques pequeño bocadillo! – Sentí un fuerte jalón en mi brazo que acompañaba estás palabras me jaló un poco más y luego sentí un dolor asombroso en mi espalda provocado por la fría pared. – Tu no deberías meterte en mis planes – estaba muy enojado, no lo había visto así, ni siquiera cuando lo había insultado en el parque.
-¡Suelta a mi niño! – Key forcejeaba contra su brazo, su mano había tomado mis dos muñecas y las había puesto sobre mi cabeza, con una sola mano me levantaba del piso, mis piernas pataleaban tratando de zafarme pero era demasiado duro el amarre. Quise gritar pero mis gritos eran ahogados, vi como Key se levantaba de donde había sido aventado, pero cerré los ojos al instante que esa larga lengua se depositaba en mi cuello y luego los filosos dientes la acompañaban para marcar mi cuello y partes de mi pecho. Un fuerte sonido hizo que abriera los ojos, Kibum había roto una lámpara contra su cabeza, pero él no se detenía.
-Detente, por favor detente – mis lágrimas querían salir, al ver a mi amigo luchando por mí y a punto de presenciar una de las escenas más vergonzosas, parecía que no sería Sherezada, era demasiado débil y tonto. Su mano estaba en mi cintura, sentí como tocaba mi piel debajo de la camisa poco a poco fue subiendo tocándome con bastante calor hasta llegar a mi pezón y apretarlo con fuerza quise gemir pero su lengua se encontró de nuevo en mi paladar y todos los rincones de mi boca, volvía a morder y sofocarme de forma salvaje. Una silla se rompió en la espalda de mi atacante pero eso solo hizo que se separara por un momento.
-Que gracioso –giró su cabeza pero seguía tocando mi tórax y subiendo mi playera- pero ahora no quiero interrupciones – lanzó a Key con tal fuerza que aterrizó en una mesa que estalló ante su peso.
-¡KEY! – Mi corazón se detuvo al ver el cuerpo de mi amigo, atravesado por maderos y vidrios. Luego esa cosa se separó de mi y lanzó una mirada diferente, sus ojos eran más humanos y se veían llenos de tristeza, me quedé embobado viendo esa mirada, ya no me estaba tocando, ni acariciaba mi cuerpo con su asquerosa mano, solo me veía lleno de dolor.
-¡TAEMIN! – El grito de Key y el sonido de mi celular me hicieron voltear, cuando volví a ver a mi atacante su tenebrosa mirada había vuelto y volvía a acercarse a mi rostro, pero pasó de lado hasta mi oreja.
Mordió mi lóbulo una vez y se delimitó el borde de mi oreja con su lengua – Eres más delicioso de lo que recordaba, fueron duros días sin ti – volvió a morder y sentí una punzonada de dolor, mi oreja estaba sangrando el ahora lamía el cálido líquido que bajaba por mi cuello. Pude ver a Kibum con un vidrio en su mano pero al tocar el hombro de esa cosa se rompió en cientos de pequeñas piezas, Key se movía con dificultad pero seguía golpeando la espalda.
-Key – dije suavemente ante la excitación que me producía que lamiera con tanta suavidad y sin lastimarme.
-Eres demasiado puro – dijo alejándose un poco y lanzándome otra mirada confusa – te vuelves cada vez más delicioso, preocupándote primero por los demás cuando tú estás en una situación peligrosa – tomó mi barbilla y obligó a que abriera mi boca, me besó otra vez, pero también fue suave, es como si el odio y el rencor de hace unos momentos hubiera desaparecido, solo le quedaba el deseo.
Algo jaló el cuerpo de Minho y caí al piso, Kibum se me acercó y puso un trapo sobre mi lóbulo, debía de seguir sangrando pero yo ya no lo sentía.
Jonghyun golpeaba con fuerza el rostro del chico alto mientras este le devolvía los golpes.
-¿Key estás bien? – Su cuerpo seguía atravesado por varias cosas -¿No te duele?
-Estoy bien, vamos salgamos pronto de aquí – se levantó y me ayudó a pararme – pero Jonghyun...
-El me dijo que te sacara, ahora sígueme – salimos al pasillo y mi hermano entró con varias cosas velas, polvos y demás, luego se asomó y le entregó un collar a Key.
-Pónselo mientras intentamos esto – Kibum seguía presionando en mi oreja con ese pañuelo blanco y luego retiró un vidrio de su brazo para moverse mejor. Al instante que lo sacó la herida desapareció de forma gradual y no dejó ninguna marca, ambos nos quedamos asombrados.
-De verdad soy un monstruo – dijo viendo el brazo atravesado hace unos momentos.
-Yo creo que es una habilidad asombrosa – dije intentando animarlo – ahora el todopoderoso Key también es indestructible – me volteó a ver aun con los ojos muy abiertos y luego sonó el ascensor y apareció el profesor de Jinki con un libro y otra bolsa de objetos como los que traía mi hermano.
-¡Taemin! – Llegó corriendo a ver mi condición.
-Profesor Kim – lo saludé tranquilo.
-¿Tu hermano ya empezó? – Key asintió – le dije que me esperara, es muy peligrosos que trate de sellarlo él solo – el profesor corrió dentro del departamento y lo seguí, Key trato de detenerme pero terminé jalándolo hasta la puerta para que también lo viera.
Jonghyun y Minho seguían peleando en el interior, Jinki trazaba dibujos con sal en el piso y prendía velas, el profesor llegó a ayudarlo con esto. No comprendía el plan pero parecía ser una extraña ceremonia como la de las películas.
-¡ESTÚPIDO ÁNGEL DEJA DE ENTROMETERTE! – el grito me hizo voltear y vi como Minho le gritaba al aire sobre la cabeza de Jonghyun.
-Creo que le puede hacer daño por culpa de un ángel – volteé a ver a Key diciéndole esto, el afirmó desde el otro lado de la puerta – vamos a ayudar – jalé su mano. No podía quedarme ahí solo viendo mientras todos intentaban librarme de mi pesadilla.
– Me senté junto al profesor y comencé a prender velas
-Taemin – Jinki me lanzó una mirada y luego afirmó con la cabeza, sabía que no me quedaría con los brazos cruzados mientras ellos hacían todo lo posible por detenerlo –Está bien, pero ponte el amuleto que tiene Key – yo afirmé y tome el colguije lo pasé por mi cabeza y seguí prendiendo velas.
-¡Jonghyun mantenlo en ese lugar ¡ – Jinki gritó tomando una tiza y comenzó a correr alrededor de donde ambas figuras peleaban y se daban duros golpes. Escribía cosas que copiaba de un libro.
-¿El experto les dijo que hicieran esto? – Pregunté al profesor al ver la escena sacada de una película.
-Nos lo sugirió, tenemos otras técnicas por si esta no funciona, pero tu hermano quiso que intentáramos cuando escuchó de tu ataque – el profesor me contestaba mientras juntaba las velas encendidas y corría hacia el círculo.
Jinki corrió hacia la derecha para trazar algo más pero se tropezó y golpeo fuertemente el piso. Tomé esta oportunidad para tomar la tiza y continuar lo que hacía siguiendo el diseño del libro mientras el se recuperaba de la caída. Key ponía las velas donde indicaba el profesor y cuando mi hermano se paró y trazó un último diseño gritó.
-¡Está todo listo Jonghyun, sal de ahí! – Así que Jong empujó a Minho y luego saltó fuera del círculo, mi hermano abrió una botellita con agua de color rosado y la lanzó, una luz salió del piso con una brisa con un olor suave entre lavanda y rosas, parecía que la luz rodeaba el círculo.
Minho estaba en medio repasando los símbolos con la mirada en el piso, luego vio a mi hermano.
-Nada mal mi delicioso bocadillo, parece que me has atrapado aquí adentro – rió fuertemente y jaló la cabeza hacia atrás mostrando mayor demencia en su risa.
-¡Minwoo te toca! –Mi hermano lanzó el libro al profesor y el tomó unas tijeras.
– Lo siento Taemin – dijo mientras cortaba un mechón de mi cabello – empezó a hablar en un idioma extraño y luego lanzó el cabello al centro del círculo y cuando pasó por la luz con brisa aromática se transformó en mi. Key estaba a mi lado me abrazó sorprendido, del otro lado Jonghyun abría la boca demasiado grande ante tal escena.
-Ese es tu bocadillo – Jinki dijo cuando el chico que era idéntico a mi dio un paso hacía donde estaba Minho.
-Tienes razón, es igual de lindo que mi interesante bocadillo – dijo tocando el rostro del chico suavemente con su mano – hasta su aroma es el mismo – se acercó más al cuerpo del chico, por un momento me estremecí al ver esto, creo que es por que rara vez puedes ver como aprovechan de ti desde otro ángulo. Pero me dolía que lo tocara de esa manera – pero es un truco barato comparado con el verdadero Taemin – tomó su cuello y comenzó a presionar su garganta el chico llevó sus manos hacia las manos del demonio que lo sofocaban.
-¡Detenlo! – Key gritó – lo está matando – ahora comenzaba a llorar mientras se aferraba a mi brazo.
-Taemin tiene inocencia en su mirada, tiene una sonrisa apagada por su pasado, sus pensamientos son para sus amigos, su mayor emoción es estar enamorado, su conciencia es su mayor carga y su pureza hace que su sabor sea esquicito – seguía presionando, Jonghyun quiso acercarse molesto pero mi hermano jalo su brazo y negó con la cabeza. Yo solo veía asombrado por la forma en que me conocía tan bien – esta solo es una sombra barata de Taemin, no acepto simples retratos, quiero al verdadero – lanzó su mirada hacía mi.
-¿No se supone que no puede ver al exterior? – Jinki preguntó.
-No entiendo lo que está pasando, se supone que no se daría cuenta, que sería engañado por el círculo – la presión en el cuello de mi sombra fue demasiado, un crujido sonó y el chico soltó los brazos que habían forcejeado todo este rato, ahora colgaban inertes a ambos lados del cuerpo del chico. Minho sacó sus manos y luego el cuerpo cayó con la cabeza en una dirección distinta al cuerpo y el cuello con una horrible protuberancia, escondí mi cabeza en el pecho de Key, no podía ver la escena de mi mismo con los ojos sin vida y un cuerpo inerte.
-¿Tienes otro truco verdad? Te espero mi delicioso bocadillo, se que quieres a tu hermano solo para ti.
-Calla de una vez, Minwoo, pasa al plan B.
-Ya lo tengo preparado Onew – volvió a decir otras cosas y Kibum se desmayó, sentí el peso de su cuerpo e intenté detenerlo, veía como se empezaba a convulsionar, estaba por gritar para que parara ese extraño cántico.
-¡Detente! – Jonghyun se me adelantó – le estás haciendo daño a Key –miraba asustado la escena. Pero Minho solo comenzó a reír.
-Es obvio que las criaturas obscuras menores desaparecerían primero – su risa retumbaba en mis oídos.
-¡Cambio de plan Onew! – El profesor Kim lanzó el libro y tomó unos cubos de la maleta, luego le lazó uno a Jinki y otro a Jonghyun – ¡Taemin necesito tu ayuda! Puedes dejar a Key por un momento. Yo también recibí un cubo nos colocamos en cuatro esquinas y ahora Onew y el profesor recitaba juntos raras palabras. Creo que esa había sido la razón por la cual mi hermano no había llegado a casa la noche anterior, me sentía algo inútil viéndolo intentar tanto y yo habiéndome rendido hace muchos años atrás. Vi todo esto con un poco más de esperanza pero mi esperanza aumentó cuando Minho tomó su cabeza con ambas manos y empezó a gritar de dolor. Fue bajando hasta el piso y parece que se retorcía por el sufrimiento. Giré mi cabeza no podía seguir viendo esto. Sentí demasiado calor viniendo de enfrente y volví a levantar la mirada solo para ver como el círculo explotaba como si fuera de vidrio.
El silencio invadió la habitación un rato mientras todos veíamos de un lado al otro, esperando encontrar eso a lo que temíamos.
-¿Lo logramos? – Jonghyun fue el primero en preguntar.
-Parece que si – mi hermano me veía sorprendido.
-¡Nos deshicimos de esa cosa! – el profesor gritó de alegría.
Todos empezamos a saltar por la habitación. Gritábamos, nos abrazábamos e inclusive mi hermano me cargó y me hizo girar de la alegría. Reímos un rato, repasamos la anécdota y al final debíamos salir de ahí.
-Yo puedo llevarme a Kibum – el profesor dijo mientras recogía las cosas. Kibum seguía inconsciente en el sillón. Nos habíamos asustado un rato, porque no respiraba, pero bueno Key no podía respirar. Pero no tardo en quejarse y acomodarse, así que estábamos aliviados de ver que aun tenía su segunda vida.
-Depende de Jonghyun – dije volteando a verlo.
-Está bien aquí – dijo lanzando una mirada al profesor que daba algo de miedo – no es ningún experimento científico, aunque no sea Key, aun es un chico o algo parecido.
-Bueno, pero aun así vendré a verle después – dijo tomando su abrigo y luego salió del departamento.
-¡Gracias Minwoo! – Mi hermano estaba completamente feliz – hora de volver a casa Taemin.
Salimos solo despidiéndonos y viendo como Jonghyun tapaba a Key con una manta, la verdad parecía que ahora lo aceptaba un poco más.
-Creo que Jonghyun y Key se llevarán muy bien de ahora en adelante – dije contento sosteniendo la mano de mi hermano.
-Parece que ahora todo saldrá bien – dijo aun con su enorme sonrisa.
-Muchas gracias hyung – dije acercándome y le di un beso en su mejilla. El se sonrojó al instante y luego solté su mano y corrí para adelantarme – ¡Vamos a casa a cenar! – grité contento corriendo y mi hermano intentó alcanzar mi paso, reía como nunca, ahora quería disfrutar un poco más la vida. Llegué primero a la puerta y la abrí jadeando de alegría, sentí una pequeña punzonada en el pecho.
-Hijo que bueno que llegaste – mi madre me recibió – tú también Jinki, aun me debes explicaciones de anoche – dijo algo molesta. Me disponía a subir para no involucrarme en el regaño de Jinki. –Taemin tu amigo te espera en la sala.
Giré la cabeza ante esas palabras y luego quise asomarme, pero algo me lo impedía, después de tantos años me sentía libre, no me lo podían quitar. Negué con la cabeza, podía ser alguien más.
-Vamos Minho ya estuvo buen rato esperándote, ve con él -mi madre ahora dictaba mi triste sentencia.  

Tu Mirada en la ObscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora