Nadie es Indispensable.

Capítulo 13

Miraba el reloj de pared que Michelle colgaba junto a la puerta de la cocina, y mientras eso, pensaba en algún dialogo aceptable, por desgracia no se me ocurría ninguno, además le duele la cabeza solo empeoraría la situación. Me levanté del sofá en donde Michelle descansaba, no abrió sus ojos en ningún momento, al parecer "amaba" demasiado a su padrastro, y yo no juzgaba eso, solo que no podía compadecerme totalmente de su dolor ya que estoy lleno de dudas, las cuales me gustaría responder. 

Pasaban los minutos muy lentamente, estaba tan aburrido que era capaz de hacer ejercicio...  ¿qué acabo de decir?¡ no! eso no pasaría nunca, a menos de que Sam estuviera cerca.

*Ding Dong*  El timbre sonó.

Me acerqué lentamente a la puerta y vi una silueta conocida, claro, era Beatrice quien había llegado en mi rescate. Después de abrirle, ella entró apresuradamente.

-¡Michelle! 

Michelle se levantó al oír a Beatrice.

Con la mano en la cabeza y una voz suave contestaba las afanadas preguntas de Beatrice.

-Bien, estoy bien, no te preocupes, tranquila.

-¿Pero Michelle que fue lo que sucedió? 

Intervine viendo que Michelle no se sentía dispuesta para responder. 

-El Sr.Brown está en el hospital central de Farleiyuel. Y ella se preocupó por él. Y ya eso es todo linda historia.  Sonreí y agache la cabeza.      Ellas me miraron extrañadas.

Con la mirada decían "cállate"  yo podía oirlas...

-Oye Harry ya es tarde, es mejor que te vayas a casa.

-Eh claro, comprendo.

-Gracias por todo Harry.

-No te preocupes Michelle, con gusto.

Di media vuelta y me dirigí hacia la lejana puerta entre el corredor y la sala, mis pasos eran fríos y mis pensamientos iguales,  no sabía qué hacer estaba confundido, y un oscuro panorama se asomaba. 

-Adiós. Dije ya cerrando la puerta sin respuesta alguna.

Por alguna extraña razón no quise irme sentía que en esa casa iba a encontrar respuestas, tal vez no todas pero sí algunas, las cuales me ayudarían en mi "nueva vida"

Silenciosamente fui hacia la puerta trasera, la cual es la de la cocina por donde se entra del patio, había también una ventana cerca a ella, y observé silenciosamente hacia la sala donde estaban Michelle y Beatrice.

***

-¿Ya salió?

-Sí, ya salió. Pero no entiendo Michelle, ¿qué sucede?

-Beatrice... ya te eh contado un poco sobre Harry, sabes lo sucedió con él.

-Sí, sus padres... ya lo sé, pero para que era este "dolor de cabeza" 

-Farleiyuel llamando a Beatrice.  ¡Ay por favor, el Sr.Brown no está enfermo!  

¿Era en serio lo que estaba escuchando?, no podía creerlo, ¿qué necesidad había, para que el Sr.Brown se hiciera el enfermo y me mintiera de esa manera?...  "confía en mí" "yo sé más que tú de tu propia vida" ¡solo mentiras siempre!  no pensaba volver a terapia, ¡soy tímido pero no estúpido!

No comprendía la situación, cada vez más lleno de dudas, ¡esto esta matándome! 

Me molesté tanto que no me di cuenta donde puse los pies y resbalé, chocando con las bolsas de basura, los envases de vidrio en su interior delataron mi posición, y me congelé completamente.

-¿Quien anda ahí?     Escuché desde el interior de la casa.

Cuando recuperé el control de mi cuerpo, una extraña sensación que Thomas llamaba adrenalina me invadió, y mis piernas corrieron como nunca habían corrido, corrí sin detenerme y seguí corriendo, dejando atrás los gritos que buscaban mi identidad.

Me apresuré a sacar las llaves de mi auto, los nervios aún estaban en mí, tiré las llaves sin poder hacer nada y los gritos ya respiraban sobre mi cuello, logrando recogerlas ingresé con velocidad a mi auto y salí disparado.

Las sorprendidas siluetas me veían desde la puerta delantera de la casa, en realidad no sabía que sucedería pero no sería tan bueno, lo único era esperar el día siguiente.

Llegué a casa tan cansado que tomé una ducha y me acosté a dormir de una vez. 

Todo consistía en esperar a mañana, para resolver dudas, y divertirme en el gym... bueno si eso lo puedo llamar diversión, muchas personas lo hacían pero yo jamás lo llamaría así....