-Javier Mendoza sale lesionado de la cancha-decían los comentaristas mientras toda la afición veía como se llevaban en camilla al jugador estrella de su equipo-esperemos no sea de gravedad si no se perdería la mitad de la temporada-si esa barrida fue muy fuerte Javier estaría muchos días fuera de las canchas. Después de que fue checado el médico dio a conocer los resultados.
-bueno no es muy grave. Pero creo ya conoces el procedimiento Javier, el club no te dejara jugar si acaso por 3 semanas-dijo el médico parado junto a Javier que estaba aun acostado, bueno estaba así hasta que escucho lo que le decía el medico
-¡No!-trato de sentarse pero el tobillo le dolía- ¡No me puedo perder partidos!-dijo después de un gesto de dolor, termino por sentarse
-lo siento Javier pero es lo mejor, ¿Qué prefieres? ,¿Perderte unos partidos o toda la temporada?-
-¡pues…no sé! Pero tengo que volver a jugar ya-trato ponerse de pie pero el médico se lo impidió
-entiende Javier solo serán 3 semanas. Después volverás, te recuperas y vuelves a las canchas-tratando de tranquilizarlo puso sus manos en los hombres de Javier.
Javier lo miro, pensó que en parte tenía razón. Pero no podía perderse tantos partidos importantes, necesitaba jugar.
Después de varios medicamentos y masajes, Javier espero a su entrenador para saber la decisión final.
-bueno Javier, lo siento pero serán 3 semanas-dijo lamentándose
-bien, aquí estaré en 3 semanas…-dijo agachando la cabeza, no podía hacer nada más.
………………
-mi amor, ¡en verdad lo siento!-dijo Beatriz abrazándolo
-por algo pasan las cosas… ¿no?-dijo Javier después de haberle dado un pequeño beso
-así es amor-lo ayudo a recostarse en la sala-¿qué harás en estos días?-le dijo acomodándose a su lado
-no se…-
-¡yo digo que nos vayamos a México y organicemos la boda juntos!-dijo entusiasmada
-la boda…creo que eso es para mujeres-
-pero también tú debes de dar ideas-
-no Beatriz, creo que será mejor que tu lo organices a tu modo…cualquier cosa que decidas será increíble para mí-le dio un beso y volvió a abrazarla. Esta vez se quedaron dormidos.
Paso media hora y Beatriz se despertó y decidió salir al centro comercial aprovechando los últimos días que le quedaban en aquella ciudad.
Javier después de 1 hora se despertó un poco adolorido. No quiso ponerse de pie así que mejor se acomodo y prendió la televisión. No había nada interesante, le picaba al botón cada vez más rápido haciéndose un juego…hasta que lo detuvo. Había un comercial de un hombre que solo con una mochila viajo hasta llegar a su último destino, el Himalaya. A Javier le gusto tanto aquella toma que le dieron ganas de sentirse como aquel hombre, satisfecho.
Después de que se acabo el comercial sonrió. Una gran idea se le había ocurrido.
-llegue amor, te quedaste bien dormido-le dijo entrando con algunas bolsas con ropa
-ya sé que hare estos días-dijo aun sonriendo
-¿qué? Siempre si te irás a México conmigo, ¡lo sabia!-emocionada se sentó a su lado
-no, me voy de viaje…-
-¿a dónde iremos?-dijo ella esperando el lugar que había escogido Javier
-no, lo siento pero tú no iras-
-¿y entonces?-confundida se puso de pie esperando la explicación de su novio
-¡me voy a viajar por Europa!-
-¿qué?-
- Me voy algo así como de 'mochilazo'-esta última palabra la dijo graciosamente-me subiré al tren y agarrare el rumbo que se me ponga enfrente-
-mmm ¿crees que sea buena idea? Digo tu tobillo no está bien…-
-esto solo dura un par de días, para pasado mañana estaré caminando bien-
-¿por qué mejor no voy contigo? Así podremos disfrutar tú y yo juntos…por las calles de Paris tal vez-se sentó arriba de él tratando de convencerlo
-¡Beatriz! Por favor no te pongas así, por favor necesito estos días. El futbol, los goles, los partidos perdidos, los ganados, empatados, y aparte la boda… ¡me siento presionado!-Beatriz se puso de pie al escuchar que su prometido se quejaba de la boda
-¿cómo? ¿Entonces la boda te causa estrés? ¿No te quieres casar?-puso sus manos en la cintura
-¡no, no! No en ese sentido amor, pero no crees que si quiero estar bien en la boda pues me merezco unos días relajado-dijo sonriendo tratando ahora de convencerla
-ok javo, te dejo en libertad estos días-dijo riendo sentándose de nuevo arriba de él-solo porque quiero que estés bien recuperado para nuestra boda-
-te amo-le dio un beso más duradero pero ella interrumpió
-¿y cuando te vas?-
-¡mañana mismo!-
-¿en serio?-
-¡En cuanto antes mejor! Así tengo más días-sonrió
-Entonces ahora te ayudo a hacer una mochila bien equipada y mañana te llevo a la estación, ¿Te parece?-
-¡me parece perfecto!-
