Llegaron a la estación del tren, en busca de su nuevo destino…
-señorita, ¿cual tren sale más próximo?-pregunto Javier. Esa pregunta ya se había hecho costumbre en el viaje
-el tren más próximo es con destino a Dresde-Javier sonrio
…………….
-¿a dónde iremos esta vez?-pregunto Melissa poniendo su mochila en su espalda
-a Dresde-sonrió Javier mostrando los boletos
-¿Dresde? Nunca había escuchado ese lugar-
-pues esta a un poco más de dos horas, y el tren sale en 10 minutos así que córrele-Javier rio y corrió dejando a Melissa atrás. Los dos rieron hasta llegar al tren, un hombre checo sus boletos y subieron.
-sabes una cosa…-dijo Melissa incomoda
-que paso?-
-como que empiezo a extrañar dormir en una cama-Javier rio incontrolable
-¿en serio…? ¿Entonces quieres cancelar el viaje?-
-¡no!, !No! Si este viaje es lo que he estado esperando por mucho tiempo…pero deberíamos empezar a pensar en quedarnos en un hotel de perdido una noche…-
-¡ok!-le dio un beso en la frente sonriendo-no sé cómo le hacen los que siempre andan de “mochilazo”-
-ellos están acostumbrados…me gustaría ser como ellos en estos momentos-acomodo su cabeza en el hombro de Javier, mientras veían como el tren empezaba a moverse
-entonces vamos a ser como ellos, disfrutemos cada momento, ¿Ese es el objetivo del viaje no?-
-¡claro! Pero resulta difícil cuando duermes en una cama donde caben 20 personas y acompañada de 5 almohadas de pluma…con la temperatura adecuada de tu cuarto y el baño enseguida-rieron
Pasaron unos minutos, Javier había cerrado sus ojos para descansar un momento. Melissa lo miraba disimuladamente, bueno, a la mejor no tanto. Pero no importaba mientras Javier no le dijera nada.
Sonrió y poco a poco puso su mano en la mejilla de él. Javier al sentirla sintió un escalofrió, pero después se relajo dejando que la mano de ella empezara a jugar con su cabello y hacer cosquillas en su nuca.
-¿crees que nunca me iba a dar cuenta de lo que me estás haciendo?-abrió sus ojos lentamente para después abrazarla
-¡pensé que estabas dormido!-dijo riendo
-pues pensaste mal-la acerco a él para que sus rostros quedaran frente a frente
-"...aquel hombre seguía sonriendo y hablando y ella casi no lo escuchaba, perdida en sus ojos, en su divertida convicción de que todo era posible..."-dijo mirándola a los ojos con su suave sonrisa
-esa parte ya la leí-dijo mirando los ojos de Javier
-¿qué pasa después de eso?-le pregunto Javier tratando de no besar los labios de la mujer que le había robado el corazón en unos días
-no recuerdo…-miraba los labios de Javier, deseaba tenerlos junto a los suyos ya
-yo tampoco…-soltó una pequeña risa
-¿entonces?-pregunto agitada tan solo de pensar en que estaba a punto de probar aquellos labios
-tal vez…-se acerco lentamente para besar primero su mejilla-de tan perdida que estaba en su sonrisa…-beso su frente-no se dio cuenta cuando él beso sus labios…-y por fin juntarían sus labios. Daban pequeños pesos, y después se fundían en uno más largo, lento y tierno.