Capítulo 28

239 20 15
                                    

Arrancamos y él tomó mi mano. Lo miré sorprendida pero la acepté con gusto. Lo que más necesitaba en ese momento era cariño.

Llegamos al hotel y ambos salimos.
Me invitó a su habitación y con gusto fuimos.

- ¿Qué quieres hacer? - me preguntó ya sentados en el sofá.

- ¿Tienes palomitas? - pregunté emocionada por mi idea.

- Sí, me encantan.

- ¡Genial! ¡Veamos unas pelis!

- Claro. Iré a ver cuales tengo. Prepara las palomitas. - me dio otro beso en la mejilla, pero esta vez me tomó de la cintura para que no me moviera.

Me miró a los ojos y me dio un pequeño beso en la nariz.

Miré hacia abajo sonrojada y él fue a su habitación.

Preparé la comida y Raito trajo las filmaciones que tenía.

Nos sentamos y él pasó un brazo por mis hombros.

(...)

Así nos la pasábamos todos los días luego del trabajo.

Len y yo no nos hablábamos más, pero Raito siempre me sacaba una sonrisa.

Pero un día sucedió...

Estábamos viendo unas pelis que habíamos comprado cuando él me miró, yo lo miré y nos besamos.

Pronto comenzamos a salir y poco tiempo después ya éramos novios.

Pero todo se tornó oscuro...

Los vomitos se volvieron más frecuentes, dolores de vientre, atracones de comida... Pero me di cuanta un mes después, cuando la regla ya no me llegaba y compré el test...

- ¡Raito! ¡AMOR!

- ¿Qué mierda quieres? - pues si... Después del orgullo que tenía tiempo atrás, esto sucedió.

Yo era una mujer abusada.
Nadie lo sabía, nadie se daba cuenta; pero yo lo amaba y no lo dejaría.

"O más bien, no quería volver a estar sola..."

- Em... - tenía miedo de que me gritara nuevamente. - La... La regla... La regla no...

- ¡¿PUEDES HABLAR BIEN DE UNA PUTA VEZ?!

- La regla... La regla no me baja... Y me hice la prueba...

- ¿Y a mí qué?

- Que pues... es que... Estoy embarazada...

- Pero nosotros lo hacemos con protección.

Más bien me obliga a hacerlo...

- Bueno, puede que quizás se haya roto en el acto... - hice una pausa y sonreí - ¿No estás contento? ¡Tendremos un bebé!

- Abórtalo. - me miró serio.

- ¿Qué? - lo obvservé confusa...

- ¡¿No me escuchaste?! ¡Te dije que lo abortes! - mis ojos se abrieron de par en par.

- ¡¿Abortarlo?! ¡¿Acaso estás demente?! - le grité - ¡Me niego rotundamente a hacer esa cosa!

- Irás ahora y te sacaras ese engendro de tu horrible vientre; ¡A MENOS DE QUE QUIERAS QUE TE LO SAQUE AQUÍ MISMO A GOLPES!

- Bien... - agarré mis llaves, celular y salí por la puerta.

Obviamente no lo abortaría, ahora mismo iría a ver cómo estaba mi pequeño o pequeña y hace cuanto lo tuvimos...

Emocionada me adentré al hospital y luego de un largo rato me llamaron.

- Señorita Tn...

- Aquí - me levante y fui a la sala.

- Bien siéntese en la camilla.

La señora echo un gel en mi panza y me empezó a pasar un aparato.

En la pantalla salía el bebé. Aunque estaba bastante grande para ser de una o dos semanas. Su corazón ya se veía y media cuatro milímetro, según la doctora.

- ¿Cómo puede ser tan grande?

- Pues el bebé ya está por terminar su primer mes en su panza.

Pero hace un mes yo estaba aún con...
¡Ay no!

Banana (Len Kagamine x Lectora) [EDITANDO] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora