Capítulo 6: Excusas

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De repente siento que la tierra tiembla y no era un terremoto eran mis amigos, en un habrir y cerrar de ojos ellos ya estaban en la cocina con cubiertos, platos y servilletas.

A que hora estará el pastel? -dijo nuckles babeando.

Este pastel no es para ustedes -les dije sin quitar la vista de la mezcla que estaba batiendo.

Entonces para quien es?, porque no creo que te lo comas todo tu sola-me dijo Sonic.

Lo hice para.... -de inmediato me calle, no podía decirles la verdad así que empecé a pensar una excusa creíble.

Yyyyy??-me pregunto Tails, luego se me ocurrió una idea.

Es para mi amigo! -dije y si era cierto, bueno en parte puesto que Shadow es mi amigo.

Todos estaban confundidos.

Tienes un amigo? -me pregunto Sonic.

Claro!, ustedes no son mis únicos amigos -dije del tono mas naturalmente falso que pude.

Y como se llama?, tal vez lo conozcamos -me dijo nuckles, ahora tengo que inventar otra excusa, por suerte no tarde mucho.

En realidad solo nos hemos visto un par de veces y se me a olvidado de preguntar su nombre -dije en un tono apenado mientras me rascaba la nuca.

Podríamos conocerlo? -dijo animado Tails, en ese momento me tense.

No!! -digo, no mas bien grito, todos se quedaron confundidos.

«a ver ahora como lo arreglo»
Pensé.

Es decir, es que él no es muy sociable y con trabajo logre ser su amiga, creo que por ahora no-dije con una enorme sonrisa nerviosa, ellos dudaron de mis palabras, no quería recurrir a esto pero veo que no hay salida.

Se me olvidaba, mañana les are un pastel solo para ustedes-dije y ellos sonrieron victoriosos.

Okey ya vallanse necesito paz y tranquilidad para poder terminar -dije y ellos se fueron, luego di un largo suspiro para luego seguir haciendo el pastel, mientras pensaba.

«estuvo cerca»

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Ya eran las 7:00 pm y tenía todo listo, la comida, los platos, el postre y mis materiales, salí de mi casa para luego encaminarme al bosque, ya en el lugar saque la manta de la cesta y la extendí en el suelo, después no me resistí y me acosté sobre la manta mientras sentía la brisa refrescante de la noche, en eso di un largo suspiro.

Enamorada del enemigo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora