Apariencias

Cap 55

Ángela en pijama y sin maquillaje. Tiene con ella cuatro helados en brazos y trata de agarrar uno más. Me acerco y la ayudo a levantar del sabor que es su favorita menta y chocolate-

-Ángela no puedes comerlos aquí, primero tenemos que pagar- Ángela se camuflo una cuchara en la polera y Mery trata de controlar la situación

-hola Mare- saluda mi amiga- ¿a qué hora viniste?-

-hace un rato- sonrió- vamos a pagar-

-espera necesitamos dulces, entre otras cosas. Ella va a la sección dulces llevándose el carrito de compras. Ángela está concentrada en el helado. Me quedo esperando alguna señal de lo que debo hacer. Ella parece darse cuenta y camina en dirección por donde se fue Mery. Una de las dependientas viene en nuestra dirección, acompañada de dos guardias de seguridad.-La señorita no puede...-

-pagaremos el helado, no se preocupe. Déjelo pasar por esta vez. No estamos es una situación normal y necesitamos que nos comprenda. Puede acompañarnos para ver que no nos escaparemos-Ella parece entenderlo y se lo agradezco cuando le dice a uno de los de seguridad que se retire y al otro que nos siga. Mery llega a descargar todo el carrito para que pase el sistema y la cuenta sale superior al efectivo que traemos. Saco la tarjeta que me dieron mis padres

-su tarjeta está siendo rechazada- informa la cajera

-inténtelo de nuevo-

-lo he hecho tres veces como indica el procedimiento ¿Tiene alguna otra tarjeta?- Ángela sigue comiendo su helado y solo nos queda mirarnos entre Mery y yo. -dejaremos esto- Mery mueve algunas cosas para que disminuya la cuenta. Cuando pagamos finalmente el de seguridad nos acompaña hasta la puerta. Subimos al nuevo coche de Ángela. Un descapotable rojo BMW M3 Cabriolet y es Mery quien maneja-

-gracias por nada- comenta Ángela, minutos después que Mery se fue a su casa para traer su ropa de la escuadra, tienen practica en tres horas más.

-por lo que veo, sigues enojada conmigo-

-no, no estoy enojada- continua- para estar enojada has de interesarme, pero que crees no me interesas-

-iré por agua-

- mejor vete de mi casa- contesta

-Ángela basta, yo no he hecho nada para que estés así conmigo-

-no sabía que seducir al novio de una amiga es hacer nada-

-Ibón no es mi amiga- indico- 

-entonces ¿por eso es bueno seducirlo a su novio?-

-que no lo seduje. Paul y yo...-

-vamos Mare, confiesa. De seguro que si él te besara tú no te negarías-Tiene razón, tú no te negaste.- Aunque supongo que lo hayas hecho-

-Ángela yo...--no Mare, escuchame bien. Por buscar tu felicidad destruiste a las personas que te queríamos. Destruiste mi felicidad y la de Karina. Ibón se cobró con nosotras ya que contigo no podía hacerlo. Dios que estúpida fui, la mayor de las zorras siempre fuiste tú. Que te gustara Paul desde hace tiempo es solo una excusa.-

-Ángela yo no fui la que te engaño, fue Néstor y fue Ibón-

-Te equivocas. Fuiste tú tratando de mostrar a Paul que ya no sentías nada por él. ¿O no es esa la razón por la que dijiste que si para ser la enamorada de Evan?-

-acepto que esa fue la razón. Pero nunca seduje a Paul-

-cantarle y bailar provocadoramente delante de su enamorada, salir de noche al lago a encontrarte con él, invitarlo a tu casa para una tarde de videojuegos, si ese día hubieras invitado a Evan, Fredy y Néstor no habrían ido a casa de Ibón acompañándolo. No, Evan nunca hubiera entrado en nuestro círculo de amigos si tú no hubieras tratado de aparentar ser feliz a los ojos de Paul.-