Actos

No puedo.

No te voy a guardar rencor, porque a mí me han enseñado que hay que amar a quien te hiere. Eso es lo que diferencia a las buenas, de las malas personas. No voy a pagarte con la misma moneda. Yo, a diferencia de ti, no me perdonaría jamás hacerle daño a alguien a quien he querido y a quien aún quiero. La mayor de las venganzas, es desearte que seas feliz. Y eso dice mucho más sobre mí que sobre ti. Ojalá sonrías mucho, pequeñita. Esa es tu magia. Siempre te he dicho que podías conseguir cualquier cosa que te propusieras. Lo único que necesitas es un pequeño empuje de alguien y ojalá lo encuentres. Ojalá alguien llegue a saberte como yo te sabía, ojalá alguien ponga tu risa por delante de la suya como hice yo, ojalá sea capaz de amar tanto a la niña que eres, como la amaba yo.
No sé despedirme de la persona de la que desee con toda mi fuerza no separarme nunca. Así soy yo, pequeñita. Tú lo sabías. Pero sí me voy a poner en primer lugar, porque al fin y al cabo, mi vida es solo mía y sufrir por alguien que no te merece, no está entre mis planes. Sigo creyendo en que el amor salvará el mundo y me salvará a mí. A pesar de todo. En eso consiste el ser valiente: seguir bailando aunque haya cambiado la canción.

Te abrazo.

P.D. sonríe cuando leas esto.