Andrea se despertó sobresaltada, los meses pasaban y ella aun seguía encerrada en ese sitio...lo unico bueno que tenía todo aquello es que había conocido a gente realmente buena, Raquel la había apoyado muchisimo en todo durante todos estos meses y Adriano, él la comprendía, era el primer adulto que conseguía comprenderla y eso la hacía feliz.
Llevaba varios dias pensando en la posibilidad de enamorarse, de darle una oportunidad al amor pero ella solo tenía 12 años y estaba ahi encerrada, ¿como conoceria a algun chico si todos los que habia ahi estaban demasiado trastornados para ella? Lo dió por imposible.
Raquel estaba probandose un vestido que su novio le habia traido en la hora de visitas cuando Andrea entró en la habitación, "que, ¿como me veo?" preguntó Raquel dando una vuelta sobre si misma, Andrea sonrió y levanto la mano en signo de aprobación. "Tienes que venir con nosotros, Eduardo va a venir a verme para tener una especie de cita desde aqui y podria decirle que traiga a un amigo para ti" dijo Raquel abrazando a Andrea, "no no no yo, no quiero que tu me busques un novio" dijo Andrea apartandose de ella rapidamente. "Ya veremos" pensó Raquel con una sonrisa en los labios.
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Una vida rota
Non-FictionLa vida de una niña feliz cambia por completo cuando es abusada sexualmente por su padrastro, cosa que traerá consecuencias inesperadas.