Lost In Your Eyes | Larry

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Harry usualmente tenía problemas para conciliar el sueño. Fue por eso que le extrañaba el hecho de que las últimas dos noches, allí en la jungla (¿era una jungla?), durmió mejor que en cualquier hotel de cinco estrellas en el que se había hospedado. Pensó que quizá el hecho de estar cansado por no comer bien y tener cero comodidades era lo que lo hacía poder dormirse con facilidad. Cuando abrió los ojos y notó enseguida la claridad de la mañana, los pájaros cantar, supo que ya era de día y que nada había interrumpido su sueño. Una sonrisa se formó en sus labios mientras se estiraba en el lugar, justo allí sintiendo un dolor que le recorría toda la espalda. "Mierda" Se quedó quieto por unos segundos, sabiendo que si se movía podía dolerle incluso mucho peor. Se había quedado dormido en una posición para nada cómoda y ahora estaba sintiendo las consecuencias. Cuando el dolor ya se había ido, se sentó en el lugar y soltó un bostezo. Cuando estaba tratando de poder abrir sus ojos del todo, refregándolos con cuidado de no hacerse daño la vista pero con la suficiente fuerza para despertarse por completo, los recuerdos de la noche anterior lo invadieron.

Y volvió a sonreír por segunda vez aquella mañana. Louis estaba realmente ayudando a que el estar perdidos no fuera una tortura, a que Harry no entrara en pánico cada cinco segundos. No había pasado mucho tiempo, pero Harry sabía que si habría estado solo la situación sería diferente; si Harry fuese el único sobreviviente, no habría podido aguantársela -si entienden lo que eso significa. Se giró hacia su derecha esperando encontrar a Louis todavía durmiendo a un lado, pero allí no estaba. Entrecerró los ojos, algo exrañado. Siguió buscando con la mirada, aún sentado en el suelo, pero allí no había rastros del joven. Harry se puso de pie y comenzó a caminar por el pequeño avión, entrando a la cabina, buscándolo. "¿Louis?" Dijo su nombre en voz alta, y aunque estaba algo preocupado se tomó un segundo para pensar que le gustaba como sonaba su nombre. Louis. Siguió caminando, saliendo del avión porque Louis tal vez estaba allí afuera: allí tampoco estaba. Harry tragó saliva y ahora sí estaba comenzando a preocuparse. Dio la vuelta al avión, quizá estaba comiendo algo o estaba aburrido así que para no despertar a Harry se alejó un poco del lugar. Pero Harry no estaba para nada tranquilo, tenía una mala sensación, algo dentro suyo que lo asustaba. Quería salir corriendo de allí, meterse jungla adentro para ver si Louis estaba perdido pero temía perderse él también. Otro de sus pensamientos era que tal vez Louis había sido comido por un animal salvaje, aunque no habían visto ninguno hasta el momento y el mismo Louis le había dicho que no había nada más que aves en un lugar como ese. También le cruzó la mente la posibilidad de que los habían venido a rescatar y Louis se había marchado solo de allí, dejando al cretino de Harry Styles atrás. Había entrado en pánico como cualquier persona en su lugar lo haría, su respiración se volvió irregular al mismo tiempo que sus piernas comenzaban a temblar, obligándolo a sentarse. Se apoyó contra un gran árbol y quedó allí sentado, con sus rodillas sobre su pecho y abrazando sus piernas, tratando de no perder la cordura. No entendía por qué, pero no podía parar de temblar. Hacía mucho tiempo no le sucedía eso, y ya había olvidado lo horrible que se sentía. Quería dormirse, quería desmayarse o incluso hasta morirse con tal de dejar de sentir ese dolor en el pecho que no lo dejaba respirar y el temblor que no le permitía caminar. Cerró sus ojos, tratando de calmarse a sí mismo, de darse cuenta de que todo estaba bien y que nada saldría mal.

"¿Harry?" La voz de Louis le obligó a abrir los ojos al instante, poniéndose de pie enseguida como si Louis fuera la realeza. El cabello de Louis estaba mojado por completo y algunas gotas bajaban por su pecho desnudo, cayendo y perdiéndose en el pantalón corto que traía puesto (siempre llevaba en su mochila, además de suministros, una muda de ropa). Se acercó hacia Harry, pero este no se lo permitió ya que se abalanzó sobre Louis, empujándolo pero no tanto como para hacerlo caer. "¡Hey!" Le grita Louis, al mismo tiempo que se mantiene en el lugar tratando de entender lo que acababa de suceder.