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Cuando Harry despertó a la mañana siguiente, lo primero que sintió fue felicidad. Al recordar lo vivido la noche anterior, una sensación de dicha lo envolvió. Al abrir los ojos y notar que todo era real, no se sintió triste y perdido como días atrás, sino que aliviado y...cuidado, porque las cosas estaban cambiando, de a poco, de forma extraña, pero lo estaban haciendo.

Él sabía que no conocía mucho a Louis, que sólo se habían visto hace unos pocos días (aunque desde esos pocos días habían estado conviviendo de manera extrema), pero al estar los dos solos en un lugar donde lo único que tienen es al otro, no era muy difícil ni raro el hecho de comenzar a desarrollar sentimientos. Pero Harry decidió que era demasiado temprano como para estar ocupando su mente con pensamientos tan profundos y confusos.

Y no fue hasta que su mente se relajó que lo notó: Louis ya no estaba abrazado a su cuerpo. Su corazón había dado un latido fuerte para luego dejar de latir por completo, su pecho estaba aplastando sus pulmones y ya no podía tragar saliva. Ni siquiera tenía el valor para observar cómo sus brazos ya no lo rodeaban. Él había sentido el frío de su ausencia. Él simplemente no quería ver. Harry no quería caer en la realidad. Harry no podía creer que Louis había sido igual que todas las otras personas.

¿Por qué nadie podía quedarse junto a él?

¿Por qué todos huían?

Y Harry ya sentía sus piernas temblar y sus ojos llenarse de lágrimas que amenazaban con salir.

Pero una dulce voz lo ayudó a componerse. "Buenos días" Harry giró su rostro como si hubiera oído al propio Dios. Se sentó en el lugar enseguida, no pudiendo evitar la sonrisa que ocupó su rostro y la risita que escapó de sus labios. "¿Dormiste bien?" Louis estaba sentado a tan sólo unos pocos metros de distancia, parecía estar comiendo una de las otras frutas que había encontrado (ah sí, habían encontrado unos pequeños frutos rojos que, según Louis el gran experto Tomlinson, no eran venenosos; así que ahora tenían algo nuevo para agregarle a su menú). "Estuve durmiendo hasta recién pero...me dio hambre" Se excusó Louis, con una mueca de culpabilidad pero su enorme sonrisa inundando su rostro. Era obvio que le estaba pidiendo disculpas a Harry por haber salido de sus brazos y también le estaba explicando que no se había ido a ningún lado, que seguía allí - con él.

Y tal vez Harry ya estaba otra vez pensando lo mismo que hace unos minutos. Louis le provocaba eso, pensar. Él no tenía que pensar, él sólo debía actuar y esperar que todo saliera como él quería. "Muy bien" Una sonrisa. "Demasiado bien..." Y puede ser que estuviera presumiendo sus hoyuelos. Y también es posible que Louis le haya guiñado el ojo. Y, oh por Dios, Louis le había guiñado el ojo.

Ambos se quedaron viendo el uno al otro por unos segundos. Ninguno parecía querer correr la mirada. Y Louis estaba comenzando a ponerse realmente incómodo porque, Jesús, nunca había visto una mirada tan penetrante como la de Harry. Y Louis tenía miedo. Ya no era un adolescente pero con Harry se sentía como uno y los sentimientos de inseguridad que cualquiera de dieciocho años tendría, lo estaban invadiendo como una peste. Louis terminó con la competencia de miradas y salió caminando bastante rápido del avión. Se paró en la puerta viendo hacia el cielo con una mueca algo graciosa "Parece que va a llover" Dijo lo primero que se le ocurrió aunque, era cierto, Louis conocía el cielo y sabía más que bien que ese tipo de nubes sólo podían indicar una cosa. Louis bajó la vista sólo para ver qué hacía Harry y tuvo que volver a subirla al cielo ya que el chico lo estaba mirando al mismo tiempo que se levantaba deprisa y parecía caminar hacia su dirección.

Harry sabía lo que Louis estaba haciendo. Harry había notado como movía sus manos con nerviosismo y como su mirada parecía estar más allá del cielo. "Louis" Le susurró Harry con una voz que le puso todos los pelos de punta y lo obligó a mirarlo. Ni siquiera le dio tiempo para darse cuenta de lo que sucedía cuando sintió como las manos de Harry lo tomaban de ambas mejillas y ambos se unían en un beso. Louis había quedado estático, sus brazos colgando a los costados y su cuerpo congelado. Por otro lado, el modelo apretaba sus labios contra los del otro chico, una de sus manos estaba apoyada en una de sus mejillas y la otra acariciándole el brazo, incitándolo a que se moviera, a que lo tocara. El piloto se dejó llevar por lo que los labios y las manos de Harry sobre su piel le estaban haciendo sentir. Pasó ambos brazos por los hombros de Harry y comenzó a jugar con un pequeño rizo que quedaba justo al alcance de sus manos. 

Los sentimientos no pueden describirse. O, bueno, al menos no es nada fácil hacerlo. Pero eso que sientes cuando las comisuras de tus labios se van solas hacia arriba; cuando apruebas el examen más imposible de todos; cuando empiezas las vacaciones de verano; cuando faltan horas para ver en vivo a tu banda favorita; todo eso combinado era lo que ambos jóvenes sentían cuando sus bocas se unieron formando una sola. La sensación de no querer soltarse el uno al otro, de jamás dejarse ir. Y de repente la naturaleza hizo de las suyas: comenzó a llover. Las nubes grises que cubrían el cielo se abrieron y dejaron que las gotas de lluvia inundaran la Tierra. Louis atinó a separarse de los labios del otro chico pero este último lo tomó del brazo, uniéndolo a él nuevamente. "No te vayas" Le rogó Harry a mitad de un beso, con la respiración agitada y los ojos cerrados. Los bocas aún tocándose. "Es sólo lluvia" Y ese último susurro acabó con la poca cordura que le quedaba (si es que le quedaba algo). Volvió a aferrarse a Harry con todas las fuerzas que tenía. Louis sentía que no era él, que aquel hombre que estaba refregándose contra la pierna de un joven que había conocido hacía pocos días, no podía ser él. Pero no lo sentía incorrecto. Es más, se alegraba de no estar comportándose como el Louis de antes lo haría. Se alegraba de estar metiéndole la mano por abajo de la camisa. Se alegraba de haberlo hecho gemir luego de rozarle el pezón con el pulgar. Harry dejó de besarlo para largar un sonido de placer que por poco no hace que Louis se venga allí mismo.

Harry se desesperó por tener más de Louis, así que lo tomó de la cintura y lo llevó consigo al suelo, tratando de recostarlo junto a él. "Harry" Louis llamó su atención. Su voz salía demasiado aguda y agitada. "No podemos acostarnos...aquí" Ahora el modelo iba dejando marcas en el cuello de Louis. Louis, quien no podía pensar claramente con Harry haciéndolo sentir como lo estaba haciendo sentir. Se oyó un '¿por qué?' provenir de Harry, que tenía sus labios apoyados sobre la piel del piloto. "En cualquier momento la tierra se hará barro y..." Harry lo calló con un beso y le susurró viéndolo a los ojos.

"Y yo me muero por verte cubierto de barro" Y los ojos verdes se cerraron para seguir llenándolo de besos. Y Louis ya no pudo decir más nada. No luego de lo que acababa de escuchar. Aunque estaba seguro que llegarían lejos ese día, sabía que tampoco llegarían tan lejos. Harry empezó a refregarse contra la entrepierna de Louis, haciendo que ambas erecciones crecieran un poco más hasta el punto de doler. Louis se regocijaba bajo el espectacular y bien formado cuerpo del ojiverde, quien no había parado de gemir en ningún momento. Y ese día sólo fue eso. Unos cuantos besos húmedos (literalmente) más un poco de fricción entre ellos sin siquiera haberse quitado la ropa. Pero tampoco hacía falta algo más para complacerlos. Louis, al menos, podría haber acabado hasta con un beso de Harry. A Harry parecía gustarle el nombre de Louis, ya que durante las últimas frotaciones era lo único que murmuraba. Y Louis, el pobre ni siquiera pudo formular una 'H'; de él sólo se escaparon gemidos sin sentido.

Y no, no les importo la lluvia. En lo absoluto. El ruido de los pájaros y las gotas cayendo sobre las hojas de las plantas los incitaron a disfrutar aún más de aquel grandioso momento que, sin saberlo, ambos habían estado anhelando.  Y tal vez estaba mal lo que pasaba por sus mentes, pero los dos sentían que, después de todo, quizá, no sería tan mal estar perdidos. 

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Dedicado a @EstefaniaHernandz <3

Corto pero bueno ahre 

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¿Quién quiere dedicación? :) x

Lost In Your Eyes | Larry Donde viven las historias. Descúbrelo ahora