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Capítulo 7

El domingo lo pasé con normalidad, no hice nada especial. Simplemente lo dediqué a estudiar un poco y ponerme al día. Seguramente la mayoría de los domingos de ahora en adelante sería así.

Ya era lunes. Otra semana. Hoy al salir de la facultad me compraría algo de comer e iría a mi nueva casa. Por fin me daban las llaves.

Por una parte me daba pena dejar a mis padres y a las enanas de mis hermanas. Pero tenía muchas ganas de independizarme. Ya era hora. Llegué a la facultad y allí estaba Harry en la misma posición que todos los días. Me acerqué a él y le saludé.

- Buenos días Hazz.

- Buenos días Lou - sonrió y me dio otro beso en la mejilla. Llegar así a la facultad da gusto.

- ¿Qué tal el fin de semana?

- Esto...creo que bien...

- ¿Crees? ¿Algo no ha ido bien?

- Sí sí...solo que no me acuerdo de todo muy bien.

- Entiendo, vaya fiesta te tuviste que pegar eh - reí y asintió tímido - hoy al salir de clase me dan las llaves del piso, ¿quieres acompañarme?

- Me encantaría Louis pero no puedo...yo esto...si quieres te ayudo con la mudanza por la tarde.

- ¿Lo estas diciendo en serio? No pensé que al final aceptarías.

- Sí, claro...esto ehm... ¿me dices la dirección de la casa? ¿Me recojes? ¿Cómo lo hacemos? A mi me da igual no quiero molestar.

- Te recojo en tu casa a las 5.

- Perfecto - se removió los rizos mientras el sol le daba en la cara. Estaba muy guapo.

- ¿Dónde vives? - me dio la dirección no sin buscarla antes en el móvil y me sonrió - hasta luego Hazza.

- Hasta luego Lou - me dio un beso en la mejilla.

Durante las clases avisé a Zayn de que esta tarde era la mudanza y tenía que estar listo, prometió ayudarme.

Salí de clase y fui en metro a la inmobiliaria. Me dieron las llaves y cuando hice la última firma no me pude creer que ya lo había hecho. Ya tenía casa propia...bueno era un piso pero algo es algo y para empezar está muy bien.

Las 5 menos cuarto. Fui a la dirección que me había indicado Harry, y allí estaba puntual. La casa era más o menos normal, en un barrio normal. Por lo menos vivía en una casa que con su actitud empezaba a pensar cosas muy raras. Llamé a la puerta y me abrió una señora no muy mayor, era muy guapa, tenía el pelo largo y una bonita sonrisa. Supuse que era su madre porque tenían los mismos rasgos.

- Buenas tardes, ¿es aquí donde vive Harry Styles?

- Claro, soy su madre, Anne. ¿Y tú eres...?

- Louis, Louis Tomlinson encantado. ¿Está su hijo? 

- Sí está, ¿para qué lo necesitas?

- ¿No se lo ha dicho? Esta tarde empiezo una mudanza a un nuevo piso aquí en la ciudad, estoy estudiando en la facultad de Ingeniería Náutica, al lado de la de su hijo, nos vemos todos los días y habíamos quedado esta tarde dijo que me ayudaría y que pasara a buscarle - en ese momento aparece Harry por la puerta. 

- ¿Mamá quién es? - en ese momento me mira asombrado.

- No me habías dicho que habías quedado hoy - le dice seriamente Anne a su hijo.

- Esto...lo siento se me ha olvidado - dijo el perfecto chico que estaba en frente mía mientras se colocaba los rizos. 

- No pasa nada, anda ve y pásatelo bien. 

- Gracias mamá... - salió de casa después de que su madre le diera un beso en la mejilla y me saludó abrazándome efusivamente - hola Louis - me susurró al oído y un escalofrío me recorrió la espalda. 

- Hola Harry, ¿estás preparado? - le pregunté con una sonrisa. 

- Preparado.

Nos montamos en el metro y Zayn estaba esperándonos en la dirección que le dije, donde se encontraba la casa. En el metro Harry estaba muy callado, tímido, como era él. Siempre que le veía tenía la sensación de que nadie más existía. Era como si todo mi mundo se conviertiera en él.Era una sensación muy extraña. Nunca me había pasado con nadie, ni siquiera con Eleanor, ni con ninguna otra chica. Esto ya estaba empezando a tocar el límite de lo inesperado.

Llegamos al piso. La primera vez que lo vi me encantó, y ahora aún más. Allí estaban Zayn, mis hermanas y mis padres para ayudarnos. Saludé a todos y les presenté a Harry.

- Qué pasa tío, mira este es Harry, el chico del que te hablé.

- Hola, yo soy Zayn, el amigo sin el que Louis no puede vivir - pronunció Zayn con un tono sarcástico a la vez que le extendía a Harry la mano.

- Hola...yo soy em... Harry, Harry...Styles. Sí, Harry Styles encantado - dijo Harry manteniendo esa sonrisa que cada día se comía más mi mente de día y de noche.

- No le hagas caso, es idiota. LLevamos siendo amigos desde pequeños - aclaré riéndome.

Le presenté tambien a toda mi familia y tanto ellos como Harry parecieron encantados de conocerse. Por una parte sentí un gran alivio por dentro. Saber que Harry, una persona que en poco tiempo se había convertido en algo muy especial para mí en poco tiempo, se llevara bien con mis amigos y familia me reconfortó bastante. Tenía todas las ganas del mundo de empezar la mudanza.

- ¿Empezamos?