Capítulo 13: ¿Que pasa aquí?

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-¿Qué soñaste?-me preguntó Lucía.

-Pues lo de siempre, el accidente, todo lo lindo que me dijo Jake, las salidas con Chad, los momentos con Gabriel, los besos, las caricias...todo-sentía como mis ojos se empezaban a poner llorosos, es increíble el efecto que tienen en mí estos chicos, ahora siento ganas de vomitar y siento que me estrujan el corazón...

-¿Estas bien?-negué con la cabeza mientras empezaba a sentir como las lágrimas bajaban por mis mejillas-Háblame de Gabriel.

-Él... es muy atento, guapo, divertido y tenemos muchas cosas en común. Me agrada mucho, incluso creo que me gusta pero ¿Cómo estar segura después de sufrir tanto? ¿Cómo saber si es verdad o que solo siento esto porque parece que me trata bien?-ahora las lágrimascaían libremente.

-¿Y Chad?

-Él es un pedazo de pervertido pero no puedo negar que me encantaba lo atento, divertido y cariñoso que era conmigo... supongo que aún lo quiero-levanté mis piernas mientras las ponía en el sillón negro donde me gustaba sentarme y las abrazaba.

-Cuéntame de Jake, él es con el que pasaste más tiempo... ¿Qué piensas sobre él?

-Pues...pues...-es in idiota pero un idiota que sigo amando ¡Pero no le puedo decir eso a la psicóloga!-No quiero hablar de él, es un idiota y...y...y lo odio ¡Lo detesto!-empezaba a hiperventilarme, no me gusta hablar de él.

-Dime más de Jake ¿Qué te gusta de él?

-¡Dije que nada! No me gusta nada de él, solo es un idiota de ojos hermosos, pelo perfecto, perfume embriagador, labios deliciosos...-meneé mi cabeza para sacar esos pensamientos de mi cabeza ¡No pensaré en él!

-Pienso que harían buena pareja juntos.

-¡Ya no más! Él me ha destrozado el corazón 2 veces, creo que ya fue suficiente dolor por una vida.

-¿Qué te hizo?

-Primero cuando llegó era esa necedad de querer conquistarme porque no séqué carajos vio en mí que ahora no me deja en paz, luego se puso a llevarme la contaría y a ponerme como la mala durante el baile y terminó conmigo, dos días después me montó una escenita de celos que odié para luego decirme que me amaba, que siempre estaría conmigo pero ¿Qué hizo después de que volviera con él y tuviera el accidente? Irse con una zorra cualquiera mientras yo casi muero en el hospital-estoy muy enojada ahora mismo, necesito calmarme pero esta tipa solo me mete más carbón-Para finalizar viene como si fuera la gran gracia a decirme que sí me quiere y que quiere volver conmigo ¿Por qué? Sencillo, se dio cuenta de que es un idiota que solo puede ser más idiota.

-Deberías perdonarlo.

-¡¿Perdonarlo?! ¿Para qué? Para que siga lastimándome, no lo creo.

-Pero debes perdonar a la gente o eso te harámás daño-decía tranquila.

-Daño mi polainas ¡Usted debería dejar de meterse en mi vida privada y concentrarse en sus asuntos! ¡Para empezar yo ni siquiera quería venir a un psicólogo! ¡No estoy loca y no lo necesito!-le grité enojada.

-Tienes problemas de ira.

-No los tengo ¿Entendió? N-O L-O-S T-E-N-G-O-tomé mis cosas enfadada de verdad-Esto es una pérdida de tiempo, me voy-cerré la puerta muy fuerte y me fui a casa. Me lancé a mi cama y lo que hice fue llorar y llorar toda la noche, al día siguiente tenía una cara horrible, los ojos hinchados y rojos, la cara pálida y mi pelo no tiene remedio alguno sin contar las ojeras. Me metí a la ducha y al salir me puse unos pantalones ajustados gris oscuro, una blusa negra de manga larga y unos zapatos grises tipo tenis que fueron los primeros que vi.

Todo cambioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora