Todo cambio

Capítulo 19: Rebelde

Han pasado un tiempo desde que los gemelos se fueron y el comedor cerró, si dijera que mis días no han sido tan malos como pensaba mentiría, han sido mucho peores, han sido de los días más horribles de mi vida. Siento un gran vacío al pensar en ellos y por lo general ese sentimiento esta siempre...simplemente no puedo escapar. Me siento muy aburrida, antes pasaba ayudando a las personas y ahora solo puedo estar en el orfanato y ayudando a mi padre en sus clases de música.

Se preguntarán el porqué, bueno, pues sencillamente el Señor Lagos cerró su tienda porque también se iba, él se fue a España, su lugar de nacimiento, incluso los Adams se habían mudado, me refiero a Frederick y a Luis de la fotocopiadora, no a otro país pero sí lejos. Faltan unos cuantos días para terminar el año y pronto cumpliré 17, era el últimodía de clases y yo había vuelto a ser la rara, asocial, odiosa y fría con todo el mundo.

Ya no era lo mismo estar sin los gemelos o estar sin ayudar a más personas, todas las clases pasaron igual de aburridas que siempre así que al final empecé a guardar todos mis libros en el bolso para limpiar mi casillero. Tengo la gran suerte de que Chad y Gabriel tienen sus casilleros justamente uno a cada lado del mío ¿Por qué? Fácil, querían joderme más la vida. No les preste atención y seguí haciendo lo mío.

-¿Qué harás en las vacaciones, Melisa?-me preguntó Chad mientras yo seguía guardando libros sin ganas.

-Dormir, comer y seguramente no salir nunca de mi cama-le respondí sin ganas.

-Eso es un poco aburrido-se metió Gabriel-Mi familia y yo iremos a la playa y a muchos otros lugares, podrías ir con nosotros.

-Paso-dije terminando de guardar las cosas.

-Sí, eso es aburrido ¿Qué tal si vas conmigo y con mi familia a Nueva York? Serán solo unos días...-empezó Chad pero lo corte.

-Paso-cerré mi casillero y caminé a la salida.

-¡Oye! ¡Espera!-me gritó Gabriel-¿Enserio estas así por esos gemelos?-me volví hacia él con el ceño fruncido.

-¿Esos gemelos? Esos gemelos eran las personas más maravillosas del mundo, eran mis mejores amigos y ¿Qué obtengo cuando se van? Nada, ni una llamada, ni un mensaje, ni siquiera un mail, así que no quiero escucharte volver a hablar de los gemelos Smith de esa forma-golpeé unos casilleros que estaban cerca y empecé a caminar más rápido por lo enojada que estaba.

-¡Oye, espera! Él no quería decir eso, me refiero a que te entendemos pero ahora que solo volvemos a ser nosotros tres en la competencia...-empezó Chad pero ¿Qué se cree? ¿Piensa que yo soy un trofeo por el cual hay que competir?

-¿Competencia? ¿Estas demente o qué onda? ¿Qué te hace pensar que esto es una competencia en la cual YO soy el trofeo? Ni que fuera reglada ni puta como para ser trofeo de nadie-golpeé otra cosa y fui rápido en mi skate a casa. ¿Qué pasaría si entro en modo rebelde? No creo que nadie pueda hacer nada, de todas formas ¿Quién me diría algo? ¿Mis padres? ¿La psicóloga? Como si me importara si me dieran permiso o no para lo que sea.

Entré a mi casa y cambié mi ropa por unos jeans ajustados negros, una camisa de cuadros azul, botas negras, mis viejas gafas que ya no usaba pero me gustaban ya que ocultaban mis ojos azules y por ultimo un bolso azul con mi dinero para un tinte y mi celular con un estuche azul. Llegué a un salón de belleza o algo así, todo era rosado y daba asco pero era el más cercano. Una hora después salí con casi todo el pelo azul dejando las raíces negras para que cuando creciera podría regresar mi negro natural.Llegue de nuevo a casa y ya había llegado mamá.