Al mirar por la ventana puedo ver a Killer desde la suya mirándonos.
Aparto de un empujón a Ian y camino hasta las cortinas. Me estoy cansando de esto. Las cierro y con un movimiento de cabeza le indico a Ian que salga y cierro la puerta de golpe dando un portazo.
Me pongo el pijama y me recuesto sobre la cama.
Cuando me levanto abro las cortinas de mi habitación y miro el cielo. Hoy hace un perfecto día.
Mientras miro el horario de hoy meto los libros en la mochila.
Varios golpes en la puerta me hacen girarme. Ian está apoyado en el marco de la puerta.
—Me marcho ya — dice con voz melancólica — tu madre va a llevarme a la parada.
—Muy bien. Espero que tengas un buen viaje — le sonrió sin pararme delante de él y sigo mi camino escaleras abajo.
No quiero que vuelva a ocurrir lo de ayer.
Espera...¿Y como voy yo al instituto?
—Mama —grito.
—Cariño voy a llevar a Ian a la parada — dice mientras entra al salón — te tocará ir a pie. Lo siento.
Frunzo el ceño pero no digo nada. Se que a mi madre le da pena Ian.
Recojo la mochila del suelo y camino hacia la puerta, detrás de mi aparece mi madre e Ian.
Me despido de ellos con la mano mientras suben al coche.Reviso mentalmente el trayecto hasta el instituto, un cuarto de hora caminando no es nada. Creo.
Cuando paso por delante de casa de mis vecinos la miro detenidamente.
Saco los auriculares del bolsillo pequeño de la mochila y sigo caminando. Pongo la música al tope y me transporto a mi mundo.
Mientras voy caminando me doy cuenta que hay un coche que va a mi lado a velocidad lenta. Lo miro y para mi sorpresa es Engel.
Me quito uno de los auriculares y me saluda con la mano.
—¿Quieres te lleve? — me pregunta y yo desvío la mirada al todoterreno de atrás que va conducido por Killer, este me mira expectante a la espera de mi respuesta.
—Vale — camino con rapidez y uno de los chicos que estaba en el asiento del copiloto se baja y se pone detrás dejándome el asiento libre.
Mientras me estoy poniendo el cinturón, Killer se pone en paralelo al coche y me mira con sus ojos azules que parecen calentar cada parte de mi cuerpo.
Lo miro fijamente y él arranca de forma brusca.
Engel arranca y lo sigue detrás. En todo el camino nadie habla y yo menos. Dos de su hermanos están detrás y noto sus miradas en mi espalda.Cuando llegamos los dos todoterrenos aparcan uno enfrente del otro. Bajo y Engel se pone a mi lado.
—¿Si quieres a la hora del almuerzo te sientas con nosotros? — me ofrece.
Killer y los otros chicos se unen a nuestro lado mientras caminamos.
—Tranquilo me sentare con el equipo de futbol no quiero molestar — sonrió y oigo a alguien gruñir.
ESTÁS LEYENDO
La marca del lobo (#1 Ámame)
WerewolfCambiar de pueblo nunca podía haber sido mejor para mi. Estaba cansada de todo, que mi novio me hubiera engañado con otra solo era el principio de mi vaso lleno. ¿Porque nunca me salía bien ninguna relación? No lo podía entender. Nos mudamos a un pe...