VUÉLVEME A QUERER

Capítulo 16: "Arreglando nuestros destinos"

(Últimos capítulos)

Ya había pasado un mes desde que Gokú y Milk eran novios, para ellos cada día que pasaban juntos era maravilloso ya que todo era alegría y dicha.

Gokú había planificado para ese día la presentación oficial de su novia con sus padres, él ya les había hablado de ella y con la experiencia que tuvieron del matrimonio arreglado con Bulma les basto para no volver a querer interferir en las decisiones de su hijo y volverlo hacer tan infeliz como lo fue con la peli azul.

La mansión Son lucía radiante, para recibir a la novia de Gokú y su padre, desde muy temprano los empleados se encontraban arreglando cada detalle del ambiente, mientras eso acontecía en la casa de Gokú, en la casa de Milk la situación era otra, una nerviosa pelinegra no sabía que ponerse para la ocasión, buscaba una y otra vez en su armario la vestimenta apropiada para la presentación con los padres de su novio.

No sé que ponerme, decía la nerviosa joven mirando todos los vestidos que se encontraban en su cama.

Toc toc toc, tocaron a la puerta de su habitación.

Adelante, dijo la bella jovencita.

Hija, ¿aún no estás lista? Gokú quedo en venir en media hora dijo su padre mirando con una sonrisa a su nerviosa hija.

Es que no se que usar, dijo la bella jovencita.

Hija ponte cualquiera de esos vestidos, todos están muy lindos y te verás bien con cualquiera de ellos dijo su practico padre.

Sí, pero quiero que los padres de Gokú se lleven una buena impresión de mí, dijo la pelinegra con tristeza.

Ellos saben ya que no somos de su clase y te han aceptado hija, no te preocupes por ello, además a Gokú le parecerás hermosa con lo que te pongas dijo el padre de Milk haciéndola sonrojar.

Está bien padre, tienes razón, voy a alistarme y en unos minutos bajo, dijo Milk sonriendo.

Mansión Ouji:

Un joven cabello de flama se encontraba recostado en su cama con las manos en su cabeza mirando al techo, cuando de repente alguien entro a su habitación sin siquiera tocar la puerta.

Hermano, te buscan, decía un jovencito también de cabello de flama sonriendo.

Table, ya te he dicho que toques antes de entrar, ¿y quién demonios me busca?, dijo con molestia Vegueta sin dejar de mirar el techo.

Tú destino, dijo su hermano saliendo de su habitación, dejando intrigado al joven de cabello de flama que con molestia se paró de la cama y bajo a la sala.

El joven cabello de flama camino con molestia hacia su sala y al llegar se sorprendió al encontrara allí parada con la mirada altiva a la jovencita causante de todo su dolor.

¿Tú qué haces aquí?, dijo Vegueta con molestia.

Bulma no dijo nada solo fue a darle el encuentro y al llegar junto a él se arrodillo abrazándose a su cuerpo le dijo: ¡perdón¡ ¡perdón por todo el daño que te he hecho.

Casa de Milk:

Una bella jovencita pelinegra salía de su habitación con una radiante sonrisa a darles el encuentro a su novio y a su padre.

¡Estas bellísima¡ dijo Gokú al verla, mientras la pelinegra sonreía al acordarse de lo que su padre le había dicho en su habitación.

¡Gracias¡ dijo Milk.

Vámonos, dijo Gokú colocando su brazo para que la pelinegra lo tomase.

Milk se sujeto del brazo de su novio y junto a él y su padre salió de su casa para conocer a su nueva familia.

Mansión Ouji:

No, no hagas eso mujer, no es necesario que te humilles así, dijo Vegueta ayudando a la peli azul a levantarse.

Pero necesito tú perdón para seguir viviendo, dijo sollozando la peli azul.

Si eso te hace sentir mejor te perdono, dijo Vegueta mirándola con tristeza.

¡Gracias¡ ¡gracias Vegueta¡ yo se que tú lo dices de corazón, ¡perdóname por no haber sabido valorar tu amor¡ tú mereces encontrar alguien mejor que yo y que te de toda la felicidad que conmigo no encontraste dijo la peli azul sollozando.

Esta es una despedida, dijo con tristeza Vegueta.

Si, no volverás a verme más en tu vida, dijo la peli azul.

Bulma, ¿tú crees en el mañana?, dijo Vegueta mirándola dulcemente.

No entiendo tú pregunta, pero el mañana si existe y de nosotros depende que sea mejor que el ayer, dijo la peli azul.

Me gusta esa respuesta, dijo Vegueta sonriendo , para luego volver a decir: ¿Crees que exista el mañana para los dos?.

Bulma se sorprendió ante la pregunta, ¿por qué preguntas eso?.

Por qué si tú estás de acuerdo, yo quisiera volver a intentarlo de nuevo contigo, ya ves que por allí dicen que la tercera es la vencida, tal vez esta vez nos vaya mejor, dijo Vegueta sonriendo.

Estas pidiéndome que lo volvamos a intentar, dijo Bulma limpiándose las lágrimas y sonriendo después de meses de no haberlo hecho.

Sí, mujer te estoy pidiendo eso, solo que esta vez quiero que tus padres conozcan de nuestra relación, al igual que los míos, dijo Vegueta.

Estoy de acuerdo, dijo Bulma lanzándose a sus brazos para darle un apasionado beso.

Mansión Son:

Gokú abría la puerta de su auto, para que bajase Milk y su padre, luego los llevo dentro de su casa para las respectivas presentaciones.

Padres le presento a mi novia Milk y a su padre dijo Gokú con una amplia sonrisa.

Qué linda eres dijo la madre de Gokú abrazando a la pelinegra.

Un gusto conocerlos, dijo el padre de la pelinegra.

El gusto también es mío, dijo Bardock, el padre de Gokú.

Luego todos pasaron a la mesa a compartir el agradable almuerzo, en medio de pláticas y risas debido a las anécdotas que el padre de Milk platicaba de su hija.

Gokú aprovecho la ocasión, para pedir formalmente la mano de Milk, mientras la pelinegra no cabía de la felicidad de la sorpresa.

Horas más tarde:

En el jardín de la casa de Gokú, él y su ahora prometida estaban abrazados contemplando el anochecer:

¿Por qué adelantaste el compromiso?, decía fingiendo molestia la pelinegra.

Es que ya no quiero esperar más, ¿o te parece muy rápido 2 meses para nuestra boda?, dijo Gokú haciéndose el resentido.

Claro que no cariñó, es solo que no me lo esperaba, pero por lo visto mi padre siempre lo supo ¿verdad?, dijo la pelinegra sonriendo.

Así es, mi suegrito lo supo siempre dijo Gokú sonriendo.

¡Te amo mi querido prometido¡ dijo la pelinegra girando en su brazos para darle un dulce beso.

Yo también ¡te amo¡ mi princesa dijo Gokú besándola dulcemente en medio del anochecer bajo el cielo alumbrado de radiantes estrellas.