Capitulo 37.- Magnus.

257 19 3
                                    

  Sí recorres los pasillos de ese castillo, encontrarás la soledad acompañada del poder, la grandeza acompaña a las mentiras, y el respeto va con el miedo; todos juntos. Todos admiraban el castillo del gobernante de la isla de mutantes, era respetado, era considerado grande y poderoso; pero también estaba sólo, mentía como nadie y en el fondo provocaba el miedo.
En una de las habitaciones principales del castillo, una habitación blanca, con muebles caros y blancos, todo ordenado y limpio, en el centro se encontraba la cama y Polaris estaba atada a la cama con cintas de cuero sin metal. Casi nada era de metal en el cuarto, todo era vidrio, plástico o cerámica.
Lorna Dane despertó poco a poco, una persona estaba caminando en el cuarto,era una mujer, una mujer azul de cabello naranja, una desconocida. Polaris tardo en reaccionar, ¿Dónde estaba? ¿Había llegado a la Mansión de Charles Xavier?
-Has tardado en despertar-menciono la desconocida acariciando la cara de Polaris, ella forcejeó, estaba asustada y confundida y le dolía demasiado la cabeza. -Cuidado, niña-murmuró la mujer estrujando su cara.-Vaya que si se parecen, es una pena-concluyó soltando la cara de la joven.
-¿Qué es esto?- exclamo Lorna nerviosa mirando a su alrededor.- ¿Dónde estoy?
-Tu padre te responderá eso-respondió la mujer indiferente. La respiración de Lorna se aceleró, estaba asustada, desesperada, había pasado meses escondida de todos y ahora la han secuestrado, su padre la ha secuestrado. -Y tranquila, las cintas son de cuero, sin metal para que no te pases de lista-dijo la mujer azul "se llama Mystique", Lorna la miro confundida. Se escucharon pasos afuera de la habitación, Lorna se desvanecía, no podía controlar su respiración, ni los latidos de su corazón, ni el miedo que todo esto le provocaba. Empalideció.
-Dile hola a papi-susurro Mystique sonriendo, el hombre llego a la habitación, Lorna giró su cabeza a la izquierda para no ver a la puerta ni ver al hombre.
-Raven, déjanos solos-demandó el hombre avanzando, tomó la silla del escritorio y se sentó junto a la cama, Mystique dejó la habitación. -Lorna...
"Controlate, no llores" se repetía Polaris sin girar la cabeza, tratando de parecer relajada, pero estaba aterrada por dentro.
-Polaris-volvió a llamar Erik, pero su hija no se giró- mírame, quiero ver tu cara- "Controlate, se fuerte. Se tan despreciable como puedas."
-¿Qué no me has visto cuando me dejaste inconsciente y me secuestraste?- susurró Lorna enojada tratando de contener las lágrimas. Su padre se acercó un poco, y ambos sintieron punzadas en el cuerpo, era el magnetismo haciendo efecto. -Alejate - se quejó.
-Por favor, se que mis métodos no son los mejores... Solo... Sólo mírame- pidió el hombre bajando el tono de su voz. "Se fuerte" se repitió por última vez y se giró. Erik Lenshner era un hombre alto y fornido, de cabello blanco y ojos azules, de seguro era más viejo de lo que parece. Él era Magneto. Él era Magneto y Pietro se parecía demasiado a él.
-Te imaginaba más joven- murmuró Lorna volviendo a girarse. Ambos se mantenían serios.
-No conozco mucho de estas cosas... Soy Magneto, tu padre y quiero que seamos una familia ahora, eres mi hija, esta es tu casa y quiero cuidarte desde ahora-explico Erik mirando fijamente la cara de su hija. Polaris soltó una risa irónica.
-No-exclamó enojada, se giró otra vez a ver a Erik- no puedes aparecerte así de la nada, secuestrarme y decirme que quieres cuidarme. No puedes aparecer después de tantos años y decirme que quieres que seamos una familia.
-Te he estado buscando-aclaró Magneto, estaba siendo paciente, no dejaba que nadie le levantará la voz así, pero tal vez esta vez se lo merecía.
-Si, y hacer que un avión se caiga es la mejor forma de llamar mi atención, ¿Verdad? ¿Crees que no me di cuenta?-exclamó su hija enojada.
-Sólo lo estaba moviendo un poco-respondió su padre.
-Había personas ahí, Coulson y su equipo, mis amigos estaban ahí-interrumpió ella.
-Eran sólo agentes de Shield, -respondió su padre gritando- sólo trataba de dirigir el avión hasta acá...
-¿Acá?-preguntó Lorna.
- Genosha, nuestra tierra. Una isla solo para mutantes, yo la gobierno y yo los cuido.- respondió su padre volviendo a sentarse en la silla.
-Te imaginaba con casco y capa-murmuró ella abrumada, ¿Qué tan lejos estaba Genosha de los Vengadores?
-No los uso aquí, el casco lo uso para protegerme de poderes de telequinesia y para lectores de mente- respondió Erik, Lorna frunció el ceño confundida.- Contigo no lo necesito.
-¿Cómo me encontraste?
-Primero te vi en las noticias juntos a los vengadores y junto a tus hermanos salvando Nueva York, note que nuestros poderes se parecían y empece a investigar, además te pareces...-ella lo interrumpió otra vez.
- ¿A mi madre? ¿A ti?
-Ambos- respondió él cortante-... Una vez incluso fui a buscarte... Las cosas se complicaron un poco- ella lo miraba confundida.
-¿Cuándo?
-Estabas en una cafetería pero parecidas perdida y destruida y estabas enojada, te mire y me dijiste que era por la universidad, después saliste...
-Tu eras ese viejo que me miraba extraño-exclamó ella recordando todo.
-Después Pietro llegó, te cargó y desapareció entre la gente- terminó Magneto.
-Habíamos peleado-respondió Lorna.
-Hablaremos de tus hermanos después. Lo siento por las cintas pero no sabíamos como reaccionarías cuando despertaras.-explico Erik levantándose dispuesto a soltar el amarre de la cintas, Lorna forcejeo y movió su cuerpo lo más lejos de su padre.
-No te atrevas a tocarme-advirtió ella asustada.
-Haré que Raven te las quite. Superáremos esto, como familia.- aclaró mirando el reloj en la pared.- Debo irme...
-¿Dónde están mis cosas, mi ropa?
-Todo esta guardado en ese cajón- dijo Erik señalando el armario- incluso ese extrañó juguete que traías, todo esta ahí.- El hombre caminó hasta la puerta y se giró una última vez. - Lorna, quieras o no, eres mi hija y yo soy tu padre, sólo busco lo mejor para ti; siempre lo he hecho. - Y Magneto se fue. Lorna por fin dejo caer las lágrimas por su rostro, lloraba en silencio, esta fue la primera conversación con su padre y no se había atrevido a leer su mente, simplemente no podía. "Stark, sácame de aquí" pensó, pero estaba muy lejos de casa como llamar a Tony, a sus hermanos o a los Vengadores.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 01, 2016 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

The MutantDonde viven las historias. Descúbrelo ahora