¿Por qué amarte está prohibido?
Bueno... La verdad no se...Era una tarde de otoño, las hojas caían de los árboles y el aire soplaba... Una tarde común...
Recuerdo que ese día había sido la ceremonia de bienvenida a las estudiantes de primer año...
Recuerdo haberme graduado de esta misma escuela 5 años atrás, y había decidido quedarme como maestra de la escuela por el gran amor que le tengo a la misma, además de haber pasado grandes momentos en la secundaria justo aquí, en la secundaria Nanamori...Iba caminando por los pasillos, observando el cómo había cambiado mi viena escuela, era nostálgico. Entonces, apareciste tú...
"Esto... Será..." - dijiste.
"Disculpa, no te he podido entender..." - dije extrañada.Fue ahí donde descubrí una de tus hermosas cualidades...
A pesar de que eras reservada y de pocas palabras, tu voz era algo que solamente yo tenía el privilegio de oír.Recuerdo que cuando me hablaste, estabas perdida, buscabas la salida y llegaste hasta lo que llegaría a ser mi salón. No te entendí demasiado, pero pude intuir lo que deseabas, así que te acompañé a la salida.
En ese entoces, eras más tímida, y solías asustarte con facilidad. Después de aquella ocasión, recuerdo que empezaste a buscarme todos los días para poder almorzar conmigo, estabas muy agradecida conmigo, a pesar de que mi acción fue mínima. No me quejaba, además, no me llevaba con mis otros compañeros de trabajo, la mayoría era gente mayor, y yo era una de las maestras más jóvenes en ese entonces, así qie decidí pasarla contigo, cosa de la cual no me arrepiento ni arrepentiré el resto de mi vida.
Aunque solías hablarme seguido, los demás se preguntaban qué era lo que me decías, dado a qye aparentemente, únicamente yo podía entenderte... Eso era lo mejor de nuestra amistad.
Cuando llegabas a mi salón, siempre lo hacías cuidando de no hacer el menor ruido, ya que yo a veces acostumbraba a descansar un rato, pero luego, llegabas detrás de mí y me abrazabas, como adoraba tus abrazos...
Tus pequeñas manos siempre tan cálidas, tu mirada profunda ti largo cabello, además, eras la más pequeña en estatura de tu clase, cosa que te hacía adorable.Un día, mientras almorzábamos, tú me diste un bocado de ti almuerzo, cosa que me hizo sonrojar, así que quise devolver el favor... Realmente te pusiste muy roja, eso fue tan lindo.
Inclusive los fines de semana la pasaba contigo. No tengo la menor idea de donde sacaste mi dirección, pero ahí estabas junto a mí. Preferías estar conmigo que con tus compañeras de clase, y aunque las chicas a veces hablaban acerca de lo rara que eras, no te importaba.
Aun recuerdo nuestro primer experimento... Me encontraba tratando de resolver algunas ecuaciones con las cuales crearía un químico especial. Te acercaste para ver de qué se trataba, y pues, era una fórmula que te permitía crecer, a lo cual tú te ofreciste para probarla, pero yo me negué, no quería que te pasara algo malo, pero tú insistías, al parecer no te importaba que te sucediese, mientras pudieras verme feliz te bastaba...
Probaste aquella fórmula, pero no sucedió nada... En cambio, explotaste...
Me preocupé demasiado, la dala estaba llena de humo y no lograba visualizar nada, estaba muy asustada, pero de pronto, sentí que una pequeña mano tiraba de mi brazo... Eras tú, sana y salva... Yo casi lloraba de la emoción de verte, pensaba que te había matado... Poco después, averigué que la fórmula que te había dado, te hacía resistente a cualquier daño físico independientemente de su magnitud o impacto... Ahí nos volvimos compañeras de experimentos...Explosión tras explosión, intento tras intento... Han pasado tres años desde que iniciamos esta relación tan explosiva... Me niego a aceptar que pronto te irás y me volveré a quedar sola...
Sabes, antes de conocerte, había pasado por una situación difícil, cosa que había hecho de mí una persona tosca y solitaria... Pero afortunadamente tú llegaste para sanar mis heridas del pasado.
Sabía que en algún momento te tenías que graduar, pero no quería que fuera tan pronto... Quiero seguir viéndote crecer, quiero seguir sintiendo tus pequeñas manos, quiero seguir sintiendo tu aroma, quiero seguir viendo tus hermosos ojos, tu larga cabellera, todo de tí me parece perfecto, me vuelves loca.
Cuando te vayas, sólo recuerda que alguna vez fuimos amigas, nunca me olvides, quisiera volver a verte después de eso, quiero volver a estar contigo...
Nunca cambies tu dulce personalidad, nunca pierdas tus objetivos, que yo nunca dejaré de apoyarte, y más importante, nunca dejaré de amarte... Matsumoto...
Maestra y alumna, vaya combinación, la brecha que nos separa, por eso es algo prohibido, pero nada nos detendrá después, a tí mi más amada estudiante...Atte.: Nishigaki Nana
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En Mi Mente y Con Mi Alma
RomantiekCuando te das cuenta de la realidad, la fantasía se pierde. Diversos problemas amorosos, con un final indefinido. Los personajes son propiedad de Namori.