Tornado.

1.3K 73 40
                                    

Narra Matteo.

Gastón se marchó y Nina siguió llorando sobre mi hombro. Me limité a abrazarla y acariciarle la espalda.

- ¿Queres hablar?- consulté sin recibir más que sollozos como respuesta. - ¿Cantar? ¿Gritar?- ella se aferró más al abrazó. Nunca vi a alguien llorar así por un chico, menos por uno que ni siquiera había terminado con ella. Ella le pidió un tiempo a él. - Nina, no podes seguir así, llevas horas llorando.- indiqué al notar que había oscurecido.- Hasta mi camisa está empapada de tus lagrimas.

- Perdón.- dijo ella apartándose finalmente. Sus ojos estaban hinchados ocultos tras sus lentes empañados. - Ya te abro así no te retengo más.- dijo ella cuando la detuve.

- No te voy a dejar sola.- le dije secando sus mejillas.

- Pero Matteo, vos tenes otras cosas de qué preocuparte...

- En este momento, lo primordial es la amistad.- le sonreí.

- Pero vos también sos el mejor amigo de Gastón. Entiendo que no te puedas ocupar de ambos.

- Seguro que Gastón está hablando con sus nuevos amigos. Descuida, él va a estar bien.

- Matteo, por favor, sos su mejor amigo. Anda a animarlo.

- Bueno, pero mañana nosotros dos nos vemos en el Roller y patinamos.

- Pero...

- Por favor, Nina, va a ser divertido.

- ¿No te va a hacer acordar a Luna?

- A mi me encanta patinar, y necesito una amiga que me acompañe ¿quién mejor que mi alumna más aplicada?

- Bueno, está bien.- suspiró ella. - Nos vemos allá mañana.- saludó abriendo la puerta.

- No olvides alimentarte y dormir bien. Mañana te quiero con pilas recargadas.- le indiqué besando su mejilla antes de irme.

Llamé a Gastón y él atendió.

- ¿Matteo?

- ¿Cómo estás?

- ¿Como esperas que este? Es horrible esto. Me rompe el corazón ver a Nina llorando.

- Tranquilo, ya se arreglaran. ¿Qué hacías?

- Cocinaba.

- ¿Enserio tenes apetito?- cuando le pedí un tiempo a Luna no me sentía ni con fuerzas para pensar en comida.

- Es que...- decía cuando llamé al timbre de su casa.-...un segundo.- agregó yendo hacia la puerta.

- Hola. - saludé mientras él me abría.

- Matteo ¿qué haces acá?- consultó sorprendido.

- Vengo a animar a mi mejor amigo, pero veo que ya tenes compañía.- dije al notar a Felicitas en la cocina.

- Hola, Matteo.- me saludó ella con una sonrisa.

- Gastón, no pasaron ni veinticuatro horas de tu distancia de Nina ¿y ya invitaste a otra a tu casa?- cuestioné en voz baja apartándolo de la cocina.

- Invité también a Martín pero no pudo venir por un trabajo.- dijo él.- Además, si Nina quiere que demuestre que no me gusta Felicitas, tengo que probarme a mi mismo que puedo estar a solas con ella sin que pase nada.

- Matteo, perdón que interrumpa, ¿pero vos también te quedas para la
película?- preguntó Felicitas ¿y dejé a Nina sola por mi amigo quien ya estaba acompañado?

2. El Retorno de la Niebla | Gastina (Completada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora