Times Of Death ~ Season I - II ~

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Isabella los miraba con seriedad ya que aún no había recibido respuesta. Justo cuando iba a decir algo, el hombre mayor decidió expresar su opinión sobre lo sucedido con su padre.

- Mi nombre es Morgan y el niño aquí es mi hijo Duane - dijo Morgan, señalando al niño - ¿Y ustedes quiénes son?

- Me llamo Isabella Grimes y él es... - dijo desconfiada - mi padre, Rick Grimes - mirando a su padre con una mueca mientras éste aún no despertaba.

- Te pido disculpas por mi hijo, al verlo inmóvil pensamos que era uno de ellos - dijo Morgan, señalando el cuerpo inerte de la persona que tenía un disparo en la cabeza.

Isabella asintió y Morgan con Duane les ofrecieron su ayuda. Ambos cargaron el cuerpo de Rick y fueron con Isabella a una casa en la que estaban quedándose por el momento. Llegaron al lugar y entraron en la casa, mientras Morgan e Isabella dejaron a Rick en una cama para que el hombre pudiera cambiarle las vendas, que ya se encontraban gastadas. Después de varios minutos, Morgan ya había terminado de curarlo y salió con Isabella, dejando a Rick a cargo de Duane. La joven y el hombre llegaron a la cocina y él la miró con intriga.

- ¿De qué es la herida que tiene tu padre? - dijo Morgan preparando algo para cenar.

- De bala - dijo Isa agachando la cabeza al recordar ese momento - antes de que el mundo se fuera al carajo, mi padre era sheriff de aquí y en una persecución le dispararon – suspirando - dejándolo por dos semanas en coma. Después de ello se despertó, cuando el mundo ya estaba así, y todos esos días permanecí con él... con la esperanza de que despertara, hasta que lo hizo – viéndolo con tristeza Isa.

Morgan asintió y le dio un plato de comer. Cuando ella iba a comenzar a comer, apareció Duane corriendo y agitado.

- Despertó - dijo Duane asustado.

- Voy yo, tú come mientras que lo reviso de nuevo - dijo Morgan dirigiéndose a Isa.

Isa asintió para comenzar a comer lo que Morgan le había preparado, que consistía en una sopa de arvejas con un poco de agua para beber. Mientras tanto, Morgan fue hasta la habitación donde se encontraba Rick con su hijo Duane.

- Te cambié la venda, estaba en muy mal estado - dijo Morgan persuadiendo a Rick. - ¿De qué era la herida? - ya que no le creía la versión que Isabella le había dado.

- Era de bala, me dispararon en una persecución cuando perseguíamos a unos delincuentes - dijo Rick mirándolo.

Morgan se acercó a él y lo miró con seriedad.

- ¿Solo de bala? ¿O te mordieron o arañaron algo así? - dijo Morgan serio, molesto.

En eso venía Isabella, que había terminado de comer, y cuando iba a entrar al cuarto donde su padre se encontraba, escuchó a Morgan que le hacía la misma pregunta a su padre, entonces su enojo salió a flote nuevamente y entró en la habitación.

- Como se nota que no me oíste bien cuando te lo dije - dijo Isa, mirándolo con seriedad al hombre - pero te lo vuelvo a decir y ahora sí escúchame, a mi padre le dispararon en una persecución, no lo mordieron ni arañaron esas cosas de afuera - molesta se acercó a su padre y vio que estaba atado, logrando que su enojo aumentara más - así que ya puedes soltarlo - mirando a Morgan duramente – no es un criminal.

- Solo me aseguraba de que me dijeras la verdad - dijo Morgan mirándola serio y les cortó las cuerdas a Rick - salga cuando pueda – saliendo de allí con Duane.

Isa miró a Morgan molesta por dudar de su palabra para después dirigirse a su padre con una sonrisa y ver cómo estaba de ánimo.

- ¿Cómo te sientes? - dijo Isa, mirándolo con una sonrisa.

- Bien, pequeña. Estoy un poco adolorido y también... pienso en dónde pueden estar tu madre y Carl - dijo Rick, desanimándose.

- No te desanimes - dijo Isa, agarrando su mano - te prometo que haré todo lo posible por encontrar a mamá y a Carl con vida - abrazando a su padre despacio y un poco triste por no saber sobre su madre y hermano.

Rick correspondió el abrazo de su hija y luego, con su ayuda, se levantó para ir a comer algo con Morgan y Duane. Ambos estaban solos en este mundo por el momento, buscando y pensando dónde podrían estar Lori y Carl. Isabella acomodó a su padre en la silla de la cocina para servirle lo que ella había comido minutos antes y darle agua.

- Esto te dará fuerzas para que sigamos en nuestra búsqueda – dijo Isa con una sonrisa a su padre.

Rick asintió y miró a su hija con ternura, porque el hombre sabía perfectamente que la joven quería ocultar su nerviosismo, pero también demostraba su valentía en este mundo que se había derrumbado por completo. Isabella permanecía ensimismada, hasta que la voz de Morgan la sacó de sus pensamientos.

- ¡Provecho! – dijo Morgan mientras se servía comida para él y para su hijo – no es mucho, pero algo es algo en este mundo.

Ambos Grimes asintieron y mientras comían, Morgan les contaba a Rick e Isa con detalles lo que había ocurrido durante esos días que habían estado encerrados en el hospital. Cada suceso que narraba el hombre hacía que la piel de Isabella se erizara y también su ánimo descendía cada vez más, pensando si su madre y hermano pudieron haber salido con vida de la casa o de la ciudad.

La joven suspiró allevantarse de la mesa y salir de la cocina, donde apoyó su espalda en la paredy tapó su boca para evitar que escucharan su sollozo. No quería imaginar que sumadre y su hermanito fueran una de esas cosas, vagando por ahí buscando carnehumana. Lágrimas caían de sus ojos, cuando la mano de alguien se posó en suhombro interrumpiéndola. Vio al causante y encontró a su padre, que la mirabacon melancolía. Ella se acercó y lo abrazó, él la recibió con gusto y lecorrespondió el gesto para consolarla, como en los tiempos en que era chica y necesitaba de él.