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Shane solo miraba cómo Isabella se le acercaba y seguía acortando la distancia entre ellos. Ella mordió su labio mientras escasos, pero hermosos recuerdos de lo que había sucedido en el pasado con ellos, inundaban sus pensamientos.

- Recuerdo ese día, cada momento Shane - dijo Isa mirándolo a los ojos - cuando les hice creer a mis padres que iba a la escuela, pero me escapé contigo a esa cabaña que alquilaste - mientras acariciaba el pelo de éste.

Shane solamente se apartó del contacto de la joven y le dio la espalda porque, aunque en su momento habían tenido relaciones, para él solo había sido placer.

- Isa, por favor, en ese tiempo eras una niña de diecisiete años metiéndote con alguien mayor - dijo Shane serio.

- Lo sé Shane, pero sabes que te di mi virginidad a ti - dijo Isa para volver a acercarse y agarrarle la cara con sus manos - y no me arrepiento - para besarlo con pasión.

Shane siguió el beso mientras la apretaba de la cintura; la arrinconó contra el árbol más cercano para continuar el beso con pudor y salvajismo. Isabella gemía por los besos en su cuello, haciendo que Shane reaccionara rápidamente y se detuviera. Se separó para dejarla con la respiración entrecortada y agarraba con enojo su cabello.

- No, Isabella, esto no está bien. Fuiste una adolescente que solo tenía las hormonas encendidas, pero nunca sentí nada por ti - dijo Shane mirándola enojado - y nunca sentiré nada por una adolescente calentona como tú.

Isabella se largó a llorar por las palabras de Shane, logrando que ésta se acercara al hombre para pegarle una cachetada.

- Debes tener el corazón como una piedra – dijo Isabella llorando y furiosa – Púdrete, Shane.

Ella sostuvo con fuerza su katana para salir corriendo nuevamente al campamento. Miles de lágrimas inundaban sus ojos por las palabras de él. Desde que se acostó con él, había estado enamorada de Shane. Lloraba sin parar y su corazón estaba destrozado, quería gritar para descargar su dolor.

Cuando llegó al campamento, pasó de largo por el lado de su madre, Lori, que, al ver a su hija en ese estado, rápidamente se acercó y la detuvo para hablarle.

- Hija, ¿qué tienes? - dijo Lori, asustada por el estado de su pequeña.

Isabella no le dijo nada para no preocuparla y siguió su camino hasta la carpa, quería estar sola para descargar su dolor. Cuando llegó a la carpa, se tiró en su colchón a llorar desconsoladamente, se sentía muy mal y no sabía si en algún momento podría reponerse de ello. Después de unos segundos, Shane volvió al campamento muy pensativo, reflexionando sobre todo lo ocurrido con Isabella. Cuando iba a dar un paso, Lori se le puso en su camino y lo detuvo, visiblemente enojada.

- ¿Qué le has hecho a mi hija, Shane? - dijo Lori - ella llegó llorando desconsoladamente y tú apareces por el mismo camino por donde ella vino.

- No le hice nada - respondió Shane nervioso ante las acusaciones de la mujer.

- Tú le hiciste algo y debes decírmelo ahora mismo - dijo Lori, enfadada - MALDITA SEA, SHANE ¿QUÉ CARAJOS LE HICISTE?

Shane la miró con enojo y, incapaz de contenerse, le gritó con furia y sin medir sus palabras.

- SI LE HICE ALGO, DECIRLE QUE NUNCA ME COMPLACIÓ... CUANDO NOS FUGAMOS JUNTOS PARA HACERLA MÍA - dijo Shane enojado, pero rápidamente se calló por lo último que dijo. - Lori yo.... - pero no alcanzó a decir algo más, porque Lori lo interrumpió.

Times Of Death ~ Season I - II ~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora