Apretó la mano de su acompañante y pensó un lugar a donde podrían ir a pasar un bien rato juntos.
—Ya sé, probablemente no lo hayas hecho nunca, así que ya es hora de que te diviertas como un "adulto-joven" normal.—Sonrió y tiró de él hasta que llegaron a la sala de videojuegos, bolos y billar. Incluso una pista de patinaje en hielo.
—Aquí es un buen lugar para que me conozcas.
Miró ese lugar y lo vio tan... Rin. La verdad le gustaba que aquel chico le gustaran este tipo de cosas, pero él era más de bares, negocios y viajes, es decir, casi ni se divertía.
-- Enséñame como divertirse, cielo. -- Sonríe levemente.
Fueron a loa lugares de la sala de juegos, había tantos que no sabía cual elegir hasta que vio no de autos llamado "Need For Speed 2"
-- Oh, quiero ese, juguemos ese, amor. -- Señala al juego el cual estaba siendo usado por un niño.
Sonrió ampliamente al ver que no estaba decepcionado del lugar, le tomó la mano y lo jaló hacia el juego que el pequeñín usaba. Una vez que terminó le sonrió de nuevo.
—Bien, es nuestro ahora, amor.—Se sonrojó un poco pero se distrajo con los créditos de la pantalla.
—Bien, espera.—Fue hacia la caja y cargó lo de siempre en su tarjeta platino.
—Listo, mira.—Le mostró la tarjeta y la pasó por el lector.—Soy cliente habitual de este lugar.
Sonrió al ver la tarjeta -- ¿Sabes que es lo mejor? Que no me siento sorprendido.
El juego comenzó y el pelinegro hacia lo que creía había que hacerse para comenzar. El pelinegro comenzó a jugar, y estaba gustándole.
-- Si yo fuera un jugador de Nascar sería genial, ¿Cierto?
—Claro que si, cariño.—Respondió con sinceridad al ver como conseguía estar entre los mejores puntales.
—¡Eres genial!—Exclamó y luego sin querer, más bien porque se dejó llevar, le dio un pequeño beso en los labios para no distraerlo.
Cuando se dio cuenta de lo que acababa de hacer se sonrojó bastante y encogió los hombros algo avergonzado.
-- Cielo, me harás chocar. -- Dice para darle un rápido beso a sus labios y ver la pantalla. Se ha obsesionado.
-- Amor, ve a jugar algo, tenemos exactamente 3 horas para ir al Jet.
Luego de esas horas sacó a su novio del lugar y lo llevó a su empresa, el cual en el techo de ella se encontraba aquel Jet. Subieron hasta el techo, a 34 pisos y ayudó al pelirrojo para luego entrar él.
-- Llegaremos a lo mucho en 7 horas.
—Esta bien.—Se perdió por un momento jugando DanceUrFeet y después siguió con el moreno jugando a otros juegos.
Cuando finalmente se llegó la hora de volver regresaron con las compras y fueron a la empresa del moreno, la había visitado solo dos veces, pero jamás había subido hasta el techo.
—Bien, que bueno que traje mis cascos conmigo, jamás había viajado en avión, mucho menos en jet.
-- No te preocupes, es casi lo mismo, solo que en vez de estar con desconocidos estaremos solo los dos... Además este Jet es grande~... --
Era como un avión privado, pero más pequeño.—Esta bien.—Sonrió, sacó su móvil para conectarle los cascos pero en lugar de eso volteó a mirarlo rápidamente.
—OYE, ¿que pasó con mi sorpresa?—Ya lo había olvidado, pero ahora quería saber de que se trataba.
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Ya no quiero ser tu cliente.
Fanfiction¿Cómo se siente el que el amor de tu vida sea de muchas más personas?