La mirada de aquella doncella
observando desde un oscuro vacío,
más si no su propio invierno
teñido de un anaranjado otoño,
no cabe dudas de su miseria
su sola presencia perturba
hasta a la mas sincera criatura,
una mentira ciega
que mata
que penetra
tan solo imaginar su dolor,
un indescriptible aroma
asoma sobre su cordura
se eleva por sobre las tinieblas,
y alcanza el tan deseado
sol de la esperanza
brillante como alas ángel,
su cabello rodeando su cintura
ondeando en sinfonía con el viento
sintiendo los lamentos del tiempo
de su mundo inquieto
esa mirada vacía...
solo quiero volver a soñar
como solía ser antes,
una sonrisa viva
un deseo fuerte
la luz que florece
un sentimiento que nace
y la pesadilla se deshace
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Poemas de amor y delirio
ŞiirPoemas que escribo cada vez que puedo, cada vez que me animo