Capitulo 10

114 6 0
                                    

Dulce estaba decidida a averiguar que pasaba con Leo y quien era la chica de quien escribía, además tenía que saber cuáles eran sus verdaderas intenciones con April, a pesar de odiarla por alejar a Leo de ella, no le parecía justo que jugara con sus sentimientos, ese no era el hermano que recordaba.

Cerró la computadora y se retiró a su habitación esperando a que Leo llegara para poder hablar con él.

Para cuando Leo llego a casa Dulce había sido vencida por el sueño y dormía plácidamente y no pudo notar la llegada de su hermano.

Al momento de despertar, Dulce noto que ya era muy tarde y seria seguro que todos durmieran, decidió intentar hablar con Leo a pesar de ser muy tarde. Camino a su habitación y abrió la puerta con mucho cuidado y en total silencio, encontró a Leo recostado en su cama pero para su sorpresa estaba despierto.

- Leo ¿Podemos hablar?

- Si, dime

Dulce estaba nerviosa y con un poco de miedo, pero se dio valor a sí misma sabiendo que después de hacer las preguntas que tenía en mente Leo sabría que tomo su computadora y vio sus archivos, pero tenía que hacerlo.

Se sentó junto a Leo que permaneció recostado en la cama.

- Tengo que preguntarte algo

- Adelante

- ¿Cuáles son tus intenciones con April?

- Estamos saliendo, eso es todo

- ¿Qué tan serio es?

- No lo sé con seguridad

Dulce buscaba una respuesta más clara, pero Leo no se la daba, decidió ir directo al punto que le interesaba.

- No juegues con sus sentimientos

- Yo creí que ella te desagradaba

- Eso es cierto, pero aun así, no me parece justo que juegues con ella

- ¿Por qué dices que juego con ella?

- Porque estás enamorado de otra chica ¿Cierto?

- Claro que no

- No me mientas

Ella estaba enojada por la reacción tan deshonesta de Leo, ella sabía que mentía, había leído lo que sentía por alguien más y el hecho de que Leo no le dijera la verdad solo hacía que se molestara más con él.

- No te miento, no estoy jugando con ella, lo prometo

- ¿Y la otra chica?

- ¿Cuál chica?

Leo se sentía acorralado y solo quería escapar, en sus palabras se podía escuchar la desesperación y el deseo porque esa discusión acabara, pero Dulce no estaba dispuesta a irse sin una respuesta.

- De la que hablas en tu diario

Ahora el molesto era Leo, en cuanto escucho la palabra "diario" supo que Dulce había estado viendo sus archivos personales.

- ¿Cómo sabes tú de mi diario?

Dulce sabía que en algún momento le haría esa pregunta y también que debía responder con total seguridad.

- Lo leí

- ¿Por qué hiciste eso?

- Porque quise saber que escribías y encontré un escrito donde hablas de estar enamorado de una chica

No pude evitar amarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora