Me desperté al notar caricias en la espalda y estuve a punto de pegarme a mí misma por haberme quedado a dormir, Ángel y Kate debían estar preocupados por no saber nada de mí.
-¿Cómo te encuentras?
-Perfectamente, nunca tengo resaca.
-Me alegro- dijo poniendo su mano en mi vientre haciendo que cada nervio de mi cuerpo se alterara.-¿Desayunamos?
-Si insistes...
Me pasó su camisa blanca y me la puse para cumplir un cliché a medias, porque aunque habíamos dormido juntos no me había acostado con él. Punto para mí. ¿O no...?
Cogí el móvil y me senté en el taburete mientras veía cómo bebía zumo, esa garganta era algo maravilloso. Tenía que dejar de comportarme todo hormonal con él o al final se notaría.
-¿Dónde narices estás?
-Pues no sabría decirte, iba un poco borracha cuando llegué- Kimmich me sonrió. Mi mejor amigo había decidido llamarme, sinónimo de problemas.
-No juegues, Emma, estaba preocupado.
-Estoy en casa de Joshua Kimmich.
-¿Cuál es ese?
-El rubio que tiene 3 años más- Kimmich alzó una ceja y me encogí de hombros, era uno de mis crushes. Cosa que no pensaba admitir frente a él ni con todo el alcohol del mundo.
-¡Uau chica! Y... ¿qué tal?
-Eso está totalmente fuera de lugar, voy a desayunar. Nos vemos más tarde.
-Sin prisa, quiero detalles.
-Voy a colgar.
Idiota.
Colgué y le mandé un mensaje a Kate diciendo que estaba perfectamente y que se lo pasara bien con su novio, del que tendríamos una charla más adelante. Guardé el móvil y sonreí incómoda a Kimmich, que estaba entretenido mirándome.
-Cuando te concentras frunces el ceño, es adorable.
-Tú sí eres adorable.
-Lo sé- me reí y le revolví el pelo.-Ayer dijiste que serías mi amiga así que... ¿qué tal acompañarme al Allianz Arena? Me dejé allí las deportivas en el último partido.
-Necesito ropa- dije obvia tratando de ocultar la emoción de una posible visita al estadio, uno de los lugares favoritos de cualquier fan.
-Pasamos por tu casa y te cambias.
-Me parece bien.
-Mientras me ducho y me visto come algo, estás en tu casa.
-No tengo hambre- me fulminó con la mirada y me rendí, me tocaba comer algo. Lo vi salir del baño y no pude resistirme...-Estás precioso.- Negó con la cabeza y cogió las llaves mientras me pasaba el móvil, yo ya llevaba el vestido y los tacones de nuevo.
Nos subimos al coche y en cuestión de unos minutos estábamos en mi casa. Entré en mi cuarto y me di una ducha rápida y me puse lo primero que pillé.
-No te pongas tacones- oí que me decía desde el salón y sonreí, era un amor. Me puse unas sandalias con poco tacón porque realmente no tenía muchos zapatos sin tacones y me miró mal al verlo.-Eso lleva tacón.
-Yo siempre llevo tacón así que deja de lloriquear, me he puesto lo que menos tacón tenía.
-¡Qué niña!- dijo exasperado, puso un brazo sobre mis hombros y me metió en el coche. Me gustaban esos toques de confianza y amistad.-Bueno... ¿algún chico por el que ayer te hicieras la estrecha?
ESTÁS LEYENDO
Solo amigos?
FanficÉl un futbolista reconocido. Ella una indecisa chica atrapada entre dos chicos. ¿Qué son? Sólo amigos ...