Cap. 10

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Antes de empezar la charla un besazo a AlejandraHernandez53, por la increíble inspiración. Este capítulo es para ti :) Espero que esté a la altura de tus expectativas <3

Buenas. Así es ¡SIGO VIVO! jajaja bromas aparte, de verdad tengo excusa para no haber escrito en tanto tiempo pero no estáis aquí para oír dramas (¿o sí, quién sabe?), bueno aquí está el siguiente capítulo. Espero que os guste tanto leerlo como a mí me ha gustado escribirlo, en verdad me siento bastante orgulloso de este capítulo. Bien, ya me he tirado suficientes rositas. ¡Al lío!


POV RANMA

Oscuridad.

Eso era lo único que veía, más bien que no veía. Intenté levantar los brazos para ver si podía llegar a ver mi mano entre tanta oscuridad, pero sentía mi cuerpo inmovilizado.

También tenía frío, muchísimo. Eso era extraño, puesto que recuerdo perfectamente que hacía calor esta mañana, ¿O fue ayer?¿O la semana pasada?, había perdido completamente la noción del tiempo. No sé cuánto puede haber pasado desde que me quedé K.O. o espera... ¿Estoy muerto? Probablemente... ¿Esto es lo que se siente?

Pues qué aburrido.

Pensaba que se entraba en una especie de limbo donde veías todos tus recuerdos pasar y luego llegaba paz y no sé qué más. Yo sólo sé que me duele todo y no puedo moverme. Tampoco veo nada así que ni siquiera sabría dónde ir.

Cerré los ojos para así potenciar mis otros sentidos. Lo poco que puedo apreciar es que estoy tumbado. En mi cabeza siento un ruido sordo y repetitivo, es... ¿Mi pulso? Eso significa que puede que aún esté vivo, es bueno saberlo.

De pronto vi una luz a la distancia, casi me deslumbra por su intensidad. Cuanto más se acerca más me siento en paz, ya no me duele el cuerpo y me siento feliz. Oigo voces que vienen de la luz y risas de niños, parece agradable.

-Ranma

Una voz me llama, incitándome a ir hacia la luz. Cada vez mi paso es más firme y seguro, ya casi llego a alcanzarla... hasta que un pensamiento atraviesa mi mente.

Akane

¿Cómo podría no haber pensado en ella? De golpe recordé todos aquellos momentos que habíamos compartido. Tanto los buenos como los malos, sobre todo esa primera hermosa sonrisa. Me asaltaron los recuerdos nublándome la vista completamente.

Tan pronto como recordaba todos esos momentos, sentía como se me escapaban de las manos, me detuve y la sensación de pérdida pareció aminorar.

Acercarme a la luz, a la paz y tranquilidad sería tomar el camino fácil y de verdad me gustaría tomarlo, pero ¿Qué precio debería pagar por ello? ¿No recordar a Akane? Entonces... no lo quiero.

Me quedaba tanto por hacer. Deseaba... deseaba estar con Akane, hacer viajes solos, vivir nuestra vida, crear una familia... Tener mi dojo y ser el mejor combatiente de toda China y Japón. Deseaba volver a ver mi madre, que se sintiera orgullosa de mí. Deseaba...vivir.

En ese instante algo se rebeló en mí. Los sonidos sordos parecían ser más intensos y inundaron el lugar. Cuando oí la voz de un ángel.

-Ranma, ¿Me oyes? ¡Ranma!

Era ella, me llamaba y como siempre yo respondería a su llamada. La luz se alejó pero de algún modo empecé a ver con más claridad.

Estaba vivo.

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Abrí los ojos muy lentamente, los tenía medio entrecerrados por la luz que entraba de fuera.

Dos palabrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora