Nate me presta su Toyota el jueves por la mañana. No puedo buscar a Alexis del aeropuerto en una motocicleta.
Una vez que estaciono el auto corro dentro del aeropuerto y, espero. Tengo unas ganas increíbles de verla, solo han sido cuatro días pero, han sido los más largos de mi vida.
-¡Jax!-, la escucho llamarme pero no la veo entre la multitud que se agolpa en la puerta de salida, -¡Jax!-, no la veo, muevo los ojos sobre toda la multitud buscándola pero, no la encuentro, de repente, se cuelga de mi cuello por un costado,
-Lex-exclamo abrazándola, -No podía encontrarte-,
-Salí por otro lado, sabía que pasaría eso-dice señalando al amontonamiento de gente frente a nosotros, me rio mientras envuelvo su cintura entre mis brazos y, entierro mi nariz en su cuello,
-Te extrañe-dice devolviéndome el abrazo, resoplo en su hombro aliviado,
-No tienes idea cuanto te extrañé yo a ti-admito, -Vamos, debes estar hambrienta-, asiente con una sonrisa, rodeo sus hombros con mi brazo y, tomo su valija con la otra mano,
-¿Cómo estuvo Nueva York?-pregunta,
-Igual, nada interesante paso-admito, -¿San Diego?-,
-Playa, playa y más playa-dice haciéndome reír,
-¿Eso fue todo lo que hiciste?-pregunto,
-No había que más hacer, no estabas ahí y me aburrí un poco-admite, exploto de la risa, lo abro,
-Que linda eres-digo antes de darle un corto beso. Saco las llaves del auto del bolsillo,
-¿Y esto?-pregunta mirándome sorprendida,
-Nate-admito, ella se ríe y pone los ojos en blanco, se sube mientras cargo su valija.
-Pensé que vendrías en la moto-dice cuando me subo,
-¿Cómo íbamos a llevar la valija?-ella se ríe con ganas,
-Buen punto-admite,
-¿Italiana?-pregunto,
-¡Si!-acepta,
-Ayer vi un lugar nuevo y quiero hacer eso que me enseñaste de elegir cualquier cosa-, sonríe de oreja a oreja, -¡Eres hermosa!-, se sonroja,
-Vamos-dice acercándose a mi y pegando sus labios a los míos.
-Hagamos algo-dice cuando nos entregan los menús, la miro, -Escoge cualquier cosa y eso comeré yo, yo elijo cualquier cosa y esa será tu cena-,
-Bien-acepto, -Pero si tiene hongos no lo como-, le sonrío y ella explota de la risa,
-Bien, sin hongos-.
No tengo idea que es lo que ordenamos pero eso es lo que hace las cosas divertidas, porque Alexis termina odiando su comida y se come medio plato de la mía.
-Por favor-dice cuando la acompaño hasta la puerta de su edificio,
-Lexi-protesto riéndome,
-Hoy, mañana no molesto-dice haciendo pucheros,
-De acuerdo pero me iré temprano-,
-No importa-dice, -Con que duermas conmigo va a estar bien-, me rio,
-Dame las llaves del garaje, no voy a dejar el auto de Nate en la calle-, asiente y camina hasta el garaje para abrirme la puerta, corro al auto y lo entro.
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¿Hay lugar para el amor? (Libro 2 de 3)
Teen FictionSegunda parte de la historia... Alexis y sus sentimientos siguen confundidos, tan Alexis como siempre. Jackson sale de las sombras. Tobias pone las cartas sobre la mesa, ¿Cómo continuará su romance? Nate te sorprende, como jamás creiste que sucederí...