|Capítulo 5|

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•Sigue narrando Justin•

Salgo del baño y me pongo mis vaqueros, una camisa sencilla y mis supras. Peino mi cabello hacia arriba y bajo las escaleras.

─¡Hey, bro! ¿A dónde irás?- Salió Ryan de donde no se.

─Iré a comprarme unos zapatos para esta noche.- Lo miré.

─¿A dónde irás?

─Al baile.

─Recuerda que es simple, no tienes que ir elegante, es como una fiesta.- Me dijo.

─Lo sé, pero no tengo zapatos.

─¿Qué no tienes que?- Río ─Tienes una zapatería allá arriba.- Señaló el techo.

─Déjame, adiós.- Cerré la puertas a mis espaldas.

Me monto en mi hermoso auto y arrancó de allí, llego al centro comercial, estaciono mi auto, bajo de él y me dirijo hacia las grandes puertas de aquél centro comercial.

─Justin, ¿eres tú?- Preguntó aquella voz tan hermosa y melodiosa.

─__, ¿tú aquí?- Sonreí.

─Sí, yo aquí.- Río.

─¿Qué vienes a comprar?- Le pregunté.

─Algo muy importante.- Me miró ─¿Y tú?

─Unos zapatos, para hoy.- Sonreí. ─¿Qué es eso tan importante, si se puede saber?

─Nada, es algo que necesito llevarme para esta noche.- Me miró algo "nerviosa"

─¿Qué pasa, __?- Pregunté.

─Nada, jajá.- Me miró. ─Me tengo que ir, cuídate.- Se puse de puntas y dió un beso en mi mejilla.

Al ella irse, me fui a la tienda de zapatos. Al entrar, suspire al ver todos esas zapatillas, mis favoritas, las supras. Algo caras, pero me las compraré. Un par de supras negras en cuero, geniales para esta noche. Como dijo Ryan, no es algo muy elegante, es algo más casual.

Recuerdo que __ dijo que iba a llevar un vestido, pero ¿por qué vestido? Sino es algo muy elegante. Igual, está bien, así será mejor. «¿Qué traes, Justin?» Preguntó mi subcociente. «No te importa, idiota.» ¿HASTA DÓNDE HE LLEGADO? ME INSULTO A MI MISMO. Volví a reír.

•En casa•

¿¡Dónde carajos estaba aquella camisa!? ¡Ah! Ya sé, voy al cajón de abajo y la saco. Luego voy en busca de mis pantalones caídos y los pongo sobre la cama. Voy al baño y me doy un baño rápido, me seco el cuerpo y me visto.

•En casa de __•

Llegue a la casa de __, baje del auto y toque 3 veces el timbre. Y ahí salió, tan hermosa y con su blancuzca sonrisa.

─Hola, Justin.- Sonrío.

─Estás muy hermosa.- Sonreí. ─¿Vamos?

─Claro, espera se me queda algo.- Fue a buscar una bolsita y lo puso en su corpiño. Reí al verla hacer eso, ya que ella pensaba que no se veía nada. ─Ahora, vámonos.- Sonrío.

─¿Qué buscabas?- Pregunté.

─Nada, metiche.- Reí.

─Entra.- Le abrí la puerta del auto.

─Gracias, Justin.- Sonrío.

Cerre la puerta, rode el carro y me monté. Prendí la radio y pusé un cd. No lo subí mucho, ya que estaba al lado de __.

No podía dejar de mirar a __, ese vestido blanco, corto, le queda tan perfecto. Ese maquillaje, le queda a la perfección con el morde de su hermosa cara angelical

PYD (Justin Bieber y tú) |Hot|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora