Llegó a aquella sólida fortaleza donde nadie podría lastimarle,pero, nadie podría ayudarle igual. Una risa nadie la escucharía, un llanto amargo tampoco, estaba solo y así se quedaría.
Se mordió el labio hasta lastimarse, con la cara agachada caían lágrimas de dolor por su rostro.
Revisó entre su mochila y saco un papel que se había arrugado inevitablemente, era una carta que planeaba darle a una chica, pero no se animaba ni a verla de lejos por miedo a que ella lo descubriese.
Había leído detenidamente tantos libros de poesía pero ella lo abrumaba con su presencia podría escribirle un libro en su honor pero en persona ni una palabra, era una niña de 16 años pero su estatura no le hacia referencia e ello y aquellos ojos cafe, entre negros cabellos era hermoso a la vista.
¿Los golpes y el dolor?
en ocasiones las cosas reales nos ayudan más que las abstractas a calmar el dolor, hubiera dado miles de plegarias y el dolor no se hubiera ido de su rostro, hubiera pedido por que aquellos jovenes entendieran sus ideales y lo golpearian más fuerte, lo que quieres en este vida solo se consigue en esta vida no con ayuda de alguien que no puedes ver.
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El Super Hombre.
RandomDe como actualmente defender tus ideas te puede dejar muchas consecuencias. ¿Nadie te entiende? Quizás no estas sólo.
