Dead Ended

28 4 2
                                    

-¿Cómo has dicho?- Dije mirándole con miedo... Actualmente le temía a todo, pero mirándola a ella, pensaba que era yo... ¿Esto era quizás otra de esas visiones en la que yo me veía a mí misma? No... Esto parecía ser más Real.

-He dicho que parases de Llorar... No es bonito... Ya nada es Bonito...- Decía esta mirando al suelo.

-¿Qué eres? ¿Una Pesadilla? ¿Una alucinación?- Dije con mucho terror, me temblaban las manos... Era un sentimiento extraño.

-No... Soy como tú...- Dijo esta mirándome de pié. -Una No Muerta... O al menos eso dice quien cuida de mí...-

Sus palabras eran como bofetadas a mi alma en pena... No entendía nada de lo que decía, bueno sí entendía, pero no sabía cómo asimilarlo... ¿Éra como yo? ¿Alguien que cuida de ella? ¿Acaso no era la única "viva" en este mundo lleno de muertos?... Mi cabeza iba a explotar en cualquier momento.

-¿Alguien c-cuída de-de tí?- Decía tartamudeando, las palabras no me salían.

-Sí... Él me dijo que te viniese a buscar... Así que, si quieres puedes seguirme, no queda muy lejos de aquí...- Dijo esta sonriendo y correteando carretera arriba.

Era algo extraño... Las flores rosas de los árboles del sendero estaban quietas, más sin embargo cuando esta pasaba cerca, se caían, tal y cómo lo hacían conmigo...

No sabía qué hacer, si ir o si no... Mi mente moribúnda me decía que era una especie de truco, algo que yo misma estoy recreando para hacerme sufrir, pero dentro de mí sentía que no era así... Su rostro no era como el mío, aunque sí similar, pero no podía decir que era yo de pequeña...

Le seguí, dentro de mí surgió una enorme incertidumbre por saber qué ocurría... ¿Alguien me mandó a buscar? ¿Quien era? ¿Qué era? las preguntas siempre venían a mí como balas directas al corazón, más sin embargo, ya sabía vivir con ellas.

Caminamos alrededor de 30 minutos, ella no se cansaba como los niños normales, seguía correteando y santando las deformaciones del terreno, como si de una pista de obstáculos se tratase, riéndose de cada salto que daba... Eso me repugnaba, no sabía cómo podía vivir ella con todo este dolor alrededor... No sentía que ella era como yo... Ya que si era como yo, debería de estar ahora mismo en las últimas eternas.

Miraba a mi alrededor, viendo a mis súbditos observarme con sus ojos amarillos, comiéndose todo ser vivo que tuviesen al lado, pero cada vez que me cruzaba por su camino me observaban como si estuviesen esperando instrucciones.

Al igual que a mí, podía observar que estos les rendían tributo a la niña, al ir un poco más adelantada que yo, notaba como los muertos le miraban para luego mirarme a mí y seguir haciendo de las suyas una vez nos hemos marchado de su rango de vista.

Me sentía comprendida y molesta a la vez... Si a ella le pasaba todo esto, podía al menos sentir una compañía en todo este mundo de soledad y de tristeza, más sin embargo, su presencia me daba demasiado asco como para aceptar mi sentimiento de comprensión... Sus risas, sus movimientos, todo era un juego para ella...

-¿Cómo estás?- Decía esta reduciendo su velocidad para quedar justo a mi lado.

-¿Qué clase de pregunta es esa?- ¿Acaso no sabía cómo estaba?... Simplemente me repugna.

-Solo quiero saber cómo estás...- Decía esta.

-Muerta...- Dije un poco fastidiada.

-Me alegro mucho...-

Sus palabras me hicieron parar, dejándola caminar delante.

-¿Dije algo malo?- Dijo esta mirándome desde delante con ojos de curiosidad, al parecer no pensaba que había dicho algo malo...

Not Ready To DieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora