Capítulo dieciséis

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________ se levanto perezosamente, había dormido estupendamente, aunque con una extraña sensación en su corazón. Sus padres no se encontraban y no quería quedarse un día domingo encerrada en su casa, hacía calor por lo que decidió ir al parque. Se vistió como normalmente lo hacía, pero hoy quiso cambiar algo, soltó sus trenzas y peino su cabello, largo y lacio, color miel que caía a ambos lados de su cara, con un flequillo en su frente. Se miro, estaba haciendo algo nuevo, jamás lo soltaba, tenía un hermoso cabello que llegaba casi a su cintura. Se miro una vez más al espejo, y salió camino al parque, Taylor no estaría hoy, y ella no sabía dónde se encontraba su mejor amigo. Se sentó debajo de un árbol, mientras miraba a los niños divertirse con sus padres, como años antes ella también lo hacía, pequeñas lágrimas resbalaban por sus suaves mejillas hasta que unos gruesos dedos las secaron, asustada miro para ver de quien se trataba. Era Kendall.

- ¿Por qué lloras? – pregunto él. –

- Nada que te importe. – Kendall suspiró. –

- ¿Hasta cuándo tendrás esa actitud?

- No lo sé. – trato de sonreír. – no es normal que Kendall Schmidt te hablé, y menos que me hablé a mí. – Kendall sonrió y se sentó a su lado. –

- ¿Podríamos hablar, como amigos? Dame una oportunidad.

- No es tan fácil Kendall. – lo miró, él ya había notado algo raro en _____, su hermoso cabello, primera vez que lo veía suelto y era hermoso, _____ se veía diferente. –

- Lo sé, pero de verdad, me gustaría remediar todo lo que te hice.

- Lo pensaré. – contestó divertida. –

- Está bien, y me dirás ¿por qué llorabas? - ____ miró a los niños jugar, sonrió y luego miró a Kendall. –

- Mi vida no es fácil. – se le quebró la voz, con Taylor era el único que hablaba sobre su vida, y ahora estaba por hablar con un completo desconocido. –

- ¿A qué te refieres?

- Mis padres, discuten todos los días. – miró el suelo. – la relación con mi madre, es de unas completas desconocidas, no hablamos y con suerte nos saludamos. – secó una pequeña lágrima. – mi padre es un alcohólico. – y ahora si lloraba, necesitaba a alguien con quien desahogarse. Kendall la abrazó.

- Lo lamento. – acariciaba su espalda repetidas veces, él se sentía mal, al verla llorar así, jamás había pensado que podría ella, tener una vida así y aguantar tantas cosas.

______ se sentía bien así, protegida, no quería que ese momento terminará nunca. Quizás podía intentar algo con Kendall, poder, ser amigos.

Luego de estar llorando unos segundos más, levanto su cabeza para mirar a Kendall. Kendall miró sus hermosos ojos azules y se quedo conectado, con su mano saco los lentes que ______ portaba. Los dejo a un lado y luego volvió con la cara de ______, delineo con su pulgar, sus ojos, sus cejas, su nariz, sus mejillas y sus labios. Cada rasgo de ella era tan delicado, fino, como una hermosa muñeca de porcelana y así, con lágrimas y los ojos cristalizados, se veía encantadora. Su pelo que danzaba con el viento la hacía tener un look angelical, realmente hermoso. Sintió unas inmensas ganas de besar esos carnosos labios y así lo hizo, saboreando cada interior de la dulce boca de ______ George, patito.

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Que emocion se besaron! aaaaaah

Aqui les dejo estos dos bellos capítulos, espero que los disfruten tanto como yo.

Espero que hayan pasado una excelente noche buena

Besos, Atte
-Javii Campos

NOVELA ADAPTADA

CREDITOS A SU CREADOR

'Patito Feo' (Kendall Schmidt & Tu) ADAPTADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora