- Iremos al mejor lugar del mundo. – la miro. – según yo. – rió.
- Así, ¿se puede saber cuál es el mejor lugar del mundo?
- Claro, es la playa. – sonrió, una excelente elección, estarían en la playa…tranquilos, relajados con el sonido de las olas romperse en la rocas, el sonido del mar, solos.
- Me encanta. – Kendall solo sonrió mirando el camino, faltaba aún media hora y conocía la playa perfecta para ambos. Donde se podía hacer una perfecta cena romántica, una playa especial para una ‘declaración’ y proposición.
No lo negaba, estaba nervioso, jamás le había salido tan difícil una proposición de novios, con la única que lo había hecho fue con Katelyn, las otras solo eran besos y no llegaba a nada más de eso, era un perfecto mujeriego y Casanova y aunque imposible, aún era virgen.
Puso la radio, de fondo sonaba Beyoncé, una canción que ninguno de los dos escuchaba, sólo estaban en sus pensamientos, los cuales ambos se centraban en una cosa ‘ellos’ ¿qué cosa? Que pasaba con ellos, que pasaría con ellos está noche, lo de la apuesta, el sufrimiento, novios, besos, citas, risas, absolutamente todo lo que habían pasado en estos dos meses, si aún el sufrimiento no lo pasaban, estarían por sentirlo y estaba más cerca que nunca.
- No te vayas a quedar dormida. - __________ lo miro, adormecida, no era muy buena para los viajes largos, se queda dormida o sólo, se aburría fácilmente. – Falta poco. – sonrió, tomando la mano de __________ cariñosamente, ________ se acomodo en el auto y cambio la canción, si quedaba camino, pondría algo más movido.
- No me gustan los viajes algo largos.
- Lo note, llegamos en diez. – se estiro hacía atrás en el asiento y tarareo la canción de Rihanna que ahora sonaba.
Kendall la miraba sonriendo, aún estaba muy encantado por como ese vestido color azul le quedaba a ella.
- ¿Llegamos? – pregunto _________, una vez que Kendall aparco el auto a un lado de la carretera, entre unos arbustos, para que no se viera.
- Claro que sí. – apago el motor y se bajo del auto, para otra vez, abrirle la puerta como todo un caballero.
Al bajarse del auto, _________ sintió como la brisa marina jugaba con sus cabellos, el sonido del mar y la exquisita sensación de la arena en sus pies. Era una playa completamente solitaria, pero hermosa. Desabrocho los zapatos de tacón y los tomo en sus manos mientras veía a Kendall que sacaba algunas cosas del auto.
Camino un poco más para sentir la arena entre sus dedos y cerró los ojos, recordando cada y uno de los momentos felices que paso con sus padres en aquella playa, claro que la conocía, venían cada sábado luego de que su padre saliera del trabajo.
- ¿En qué piensas? – unos brazos la rodearon por atrás. Se giro para quedar frente a frente con Kendall.
- En todo lo que pase en esta playa. – sonrió y luego rió.
- ¿Por qué te ríes?
- Porque. – rió un poco y se aguanto. - ¿Por qué tan formales? ¿Y en una playa?
- Bueno, siempre quise tener una cita en una playa y con ropa formal, lo lamento.
- ¿Qué? – pregunto ________. – me encanta, fue una idea completamente original. – Paso sus brazos alrededor del cuello de Kendall –
- Gracias entonces. – rozó sus labios con los de ella, causando un ligero escalofrío en _________.
- Te quiero. – confesó _________, se sonrojo al instante, era primera vez que se lo decía, a un chico…que no fuera Taylor.
- Yo también te quiero. – Y ahora sí, la beso, tan bien como sólo él lo podía – sabía – hacer.
Kendall preparo un pequeño picnic, donde tenían una magnifica vista al hermoso mar.
A un lado de la playa, había una hogareña cabaña, la cual hace dos años no se encontraba allí. Su cara de incógnita miro a Kendall, quién se encontraba acomodando unas fresas con chocolate. Sintió la mirada de _________ y la miro. Sabía a lo que se refería.
- La construyo mi padre hace un año. Nadie venia aquí, así que sería un lugar para vacaciones o si alguno quisiera salir a despejarse. – _________ sonrió.
- Con mis padres veníamos acá, hace unos años. Ya ni me acordaba que está playa existía.
- Pues, podemos venir cuando quieras. – sonrió Kendall, frotándole el brazo a __________, que ya tenía los ojos acuosos.
La hermosa velada continuo, entre risas, besos, juegos, correteos y caminatas a la orilla de la playa. Había sido completamente estúpido la ropa de gala, que Kendall había querido que se pusieran, pero le daba un toque especial. Que sólo él – y ella – podían darlo…juntos.
- ¿Qué han hecho? – pregunto del otro lado de la línea.
- Nada interesante, besarse, comer, jugar como unos críos, estoy ya aburrida Katelyn.
- No puedes dejarlos solos. – insistió ella. – podrían hacer algo mientras no estés.
- Pero Kate. – se quejo Erin. – estoy cansada, tengo frío y hambre.
- Aaaaagh, está bien. Vente, tampoco lo creo, quizás, vuelvas más tarde, ahora ven y muéstrame que es lo que tienes. Todo puede servir. – sonrió.
- Okay, estaré allá, lo que tengo puede servir.
- Claro. Te esperamos en mi casa. – y cortó. Erin los miro nuevamente, no habían hecho absolutamente nada hoy, que ayudará a Katelyn a realizar el maléfico plan que tenía.
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Malditas, estoy totalmente de acuerdo con ustedes, las lectoras, me cae mal Katelyn pero solo en la novela, en la vida real la adoro xdEspero que les hayan gustado los capítulos, cada vez queda menos para el baile, pero quedan muchas cosas por pasar.
Gracias por los votos y los comentarios, sigan haciendolo
Besos, las quiero Atte
-Javii CamposNOVELA ADAPTADA.
CREDITOS A SU CREADOR.
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'Patito Feo' (Kendall Schmidt & Tu) ADAPTADA
FanficKendall apuesta enamorar a _______, más conocida como 'patito', pero nada sale bien, nadie espero que el enamorado fuera él. Y como en la historia infantil el 'Patito Feo' se convierte en un bello Cisne.