No se termina.
Se esconde,
se retrae,
se reinventa,
evoluciona
pero no se va,
nunca se va.Siempre regresa,
cada vez con más frecuencia,
a veces disfrazado
de falsa felicidad,
a veces detrás de una risa contagiosa,
o de un momento alegre
pero el dolor siempre está, ahí,
latente,
y me corrompe,
me hace volver
siempre a ese lugar
oscuro y frío.Y me lástima,
me empuja,
me apuñala,
me tira de los pelos,
me pone al límite,
una
y otra vez,
y grito
pero nadie escucha.
No están.
Me dejaron sola,
de nuevo.Pensaron que con terapia
se iba a solucionar,
pero solo lo lograron tapar,
como tierra sobre una tumba
que tiene escrito
mi destino.Y ahora que lo pienso
ya no quiero ser la culpable de todo.
¿Quién me puso en este papel antagónico?Nada cambió,
van casi doce meses
y nada pasó.
Sigo siendo la misma flojita
con el alma partida,
los ojos mirando el suelo,
el cuerpo confundido,
y el corazón adolorido.Nadie me escucha,
ni siquiera la persona
a la que le pago por hacerlo.
¿Dónde está mi familia?
¿Dónde se fueron mis amigos?
Lo pienso.
Lo reflexiono.
Y entonces lo descubro.Y estoy sola.
Y vacía.
De nuevo.
O tal vez no,
de nuevo, no,
siempre lo estuve,
pero preferí no verlo.Este hueco no se llenó,
era todo mentira,
era todo pasajero.
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All I Never Say
PoetryAnte la inmensidad del universo, el tiempo me ayuda a distinguirlo: el dolor no dura para siempre, la soledad es la consecuencia de mis decisiones, la falta es la presencia de algo nuevo, la metamorfosis es necesaria, el silencio suena a lo que qu...