Capítulo 4 - Imponiendo Respeto III

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En la parte anterior:

La lluvia comenzaba a ser intensa en la noche más fría que podrían haber vivido cualquiera de los supervivientes.
***
Un infectado caminaba por un callejón estrecho cuando recibe un batazo en su cabeza.
— ¿Quién eres? —Pregunta Azabache
—Necesito ese helicóptero chico, y tú vas a ayudarme a conseguirlo —Responde Jeffren
— ¿Sabes a donde se llevaron a mi hermano?
***
—Es este, lo vimos desde el helicóptero, señor —Dice Fred dirigiéndose a su teniente
Sosa acerca su oreja a las puertas del contenedor. "Afirmativo, es el paquete"
***
Cientos de infectados comienzan a salir del camión atacando a todos los hombres que estaban cerca y escondidos.
—Muy bien, aquí es —Dice Sosa señalando una puerta que dirigía hacia el sótano de la escuela.
***
—Reny, detente —Dice el teniente acercándose con su M16
— ¿Quieres a tu muchacho? Pues aun tendrás que pensar en algo mejor si crees que has jugado la mejor carta de todas —Reny muestra una sonrisa maliciosa y estira sus brazos en forma de reto a Sosa, mientras varios vehículos comienzan a llegar al lugar.


Capítulo 4

Imponiendo Respeto III


Un hombre inhalaba fuertemente un cigarrillo mientras veía al cielo en el patio de un refugio improvisado, en una vieja empresa; el hombre que vestía una franela gris y unos pantalones vaqueros, como acostumbraba y como también lo hacían muchos de sus compañeros, se encontraba haciendo guardia con su pierna derecha reposada en el caucho de un jeep. Éste tenía una AK47 colgada de su cuerpo con la cual vigilaba atentamente la zona; el sujeto suelta una fuerte bocanada de humo la cual se dispersa por todo su norte, tanto humo que dificultaba su visión cuando lo hacía, y reía por la actividad. El hombre vuelve a soltar otra bocanada de humo, cuando el humo está terminando de dispersarse, su visión le presenta un puño de unos veinte centímetros de ancho que se disponía a impactar con su rostro, fue eso lo último que divisó antes de desmayarse.

Azabache espera atento la caída del cuerpo a su posición para atajarlo, evitando así cualquier tipo de ruido. Frente a él se encontraba Jeffren, quien le hace un gesto con un movimiento de su cabeza para continuar avanzando, dejando el cuerpo del vigilante en el piso. Ambos hombres entran a una industria de plástico que estaba siendo el refugio de unos sujetos bajo el mando de Reny, estos hombres estaban esperando para poner en práctica el plan de su jefe, el cual estaba en una escuela esperando ser invadido por el teniente Sosa y sus soldados.

Jeffren y Azabache entran a la empresa por una pequeña puerta lateral, en el estacionamiento. Una vez dentro del lugar, un amplio galpón se les muestra en frente, con múltiples estibas repletas de plástico lo cual podría ayudarles a desplazarse por el lugar, ocultándose en los laberintos formados por las estibas. Jeffren se permite detener a su compañero, para hacerle saber que frente a ellos se encontraba otro sujeto haciendo guardia, y con una seña, le indica que guarde silencio y espere. El hombre de cabellera larga comienza a desplazarse corriendo por uno de los callejones y comienza a ascender por las estibas en forma de escalera, hábilmente sus pasos y saltos no hacían ninguna clase de ruido. Una vez llegado a unos seis metros de altura, corre a la posición del hombre que hacía guardia y saltó de lo más alto para caerle encima, haciéndolo rodar consigo y malográndolo por el impacto, dejándolo así fuera de combate. Azabache recibe la orden de su compañero para avanzar, pero estaba un poco impresionado ante lo que acababa de ver.

— ¿Qué rayos acabas de hacer allí? —Pregunta el joven beisbolista llegando a la posición

—Limítate a avanzar, ¿ves esa puerta que está allí arriba? —Pregunta Jeffren, señalando un lugar elevado dentro del galpón.

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